ENTREVISTA CON EL SECRETARIO DE ESTADO PARA EL DEPORTE

Cardenal: "Lo anormal es usar el fútbol para demostraciones políticas"

Miguel Cardenal posa en Barcelona.

Miguel Cardenal posa en Barcelona. / periodico

JOAN CARLES ARMENGOL / BARCELONA

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El secretario de Estado para el Deporte, Miguel Cardenal (Bilbao, 1968), ha pasado por Barcelona para asistir a la Gala de la Liga de Fútbol Profesional. EL PERIÓDICO ha aprovechado para repasar con él algunos de los aspectos controvertidos que han acompañado la actualidad del deporte en los últimos meses, comenzando por la amenaza de sanción de la UEFA que pesa sobre el FC Barcelona por la reiterada exhibición de 'estelades' en la grada en partidos de la Champions.

-¿Usted cree normal que la UEFA pueda decidir qué banderas entran en los estadios y cuáles no?

-Creo que este asunto hay que verlo con un poco de universalidad. Desde este punto de vista, lo anormal es usar el fútbol para demostraciones políticas. No encontrará ningún caso en el mundo democrático occidental y en los países en los que debemos mirarnos. Se ha apelado a la libertad de expresión, pero, repito, no se encontrará ningún caso en el que organizaciones políticas, como son la Assemblea Nacional Catalana y Òmnium Cultural, organicen demostraciones políticas en un partido de fútbol de la Champions.

-¿Por qué se castigan las 'estelades' en los partidos europeos y en cambio no se hace lo mismo en la Liga española?

-No soy quién para decirlo, pero quizá es el momento de pensar si el deporte puede seguir siendo instrumentalizado políticamente en nuestro país. Hemos hecho muchas reformas en los últimos años, entre ellos contra la violencia en el deporte, y hemos conseguido cambiar el ambiente del fútbol. Rebajando el grado de tolerancia hemos mejorado el fútbol como espectáculo.

–Pero el deporte siempre ha estado politizado. Piense en las banderas nacionales en las celebraciones...

–La bandera de España no representa un mensaje político, sino que es un símbolo de España (está en la Constitución), como la senyera lo es de Catalunya (está en el Estatut). En cambio la estelada sí representa una aspiración, como reconoció el Parlament. Una aspiración, legítima, sí, pero política de conseguir la independencia de Catalunya. Hay gente en Catalunya que lleva tiempo tratando de politizar el fútbol y, algo peor todavía, intentar convertir la política en un partido de fútbol.

–Pasemos a los silbidos. Usted calificó de «germen de violencia» silbar el himno español en la final de Copa. ¿Tan grave es?

–En un espectáculo de masas con 80.000 personas es de sentido común no crear situaciones de confrontación. En ese partido había miles de personas para las cuales el himno español y la figura del rey Felipe VI tiene un valor importante, frente a otros que no les dice nada. Por eso no se puede introducir un elemento de confrontación, y quien alimente eso, debe pagar.

–¿Cómo se ve desde el CSD el proceso catalán, y qué pasaría con los clubs en el caso de que triunfara?

–He venido mucho a Catalunya y he percibido que la gente no cree que sea un escenario posible, la verdad. No creo que un porcentaje importante de la población piense que esa es una hipótesis verosímil, y yo tampoco lo creo. Nosotros seguimos trabajando conjuntamente con el deporte catalán, como en la candidatura de la Copa Ryder del 2022.

–¿Pero dónde jugaría el Barça en caso de una secesión?

–Cuando uno toma una decisión en la vida, la toma con todas las consecuencias. En el caso de esta hipótesis, habría tantas cosas importantes que lo de menos sería dónde juega un equipo u otro. Me parecería poco serio no asumir todas las consecuencias, porque es más importante el objetivo de la independencia que estar pendiente de en qué Liga vaya a jugar el Barcelona o el Espanyol.

–Con el nuevo acuerdo de derechos de TV, ¿podrá competir la Liga española con la Premier?

–Tendremos los instrumentos para hacerlo. Hemos ordenado un mercado que era una jungla, en que había una guerra del fútbol cada año. Le hemos dado al fútbol una vuelta como un calcetín.