Alternativas a Catar

Bartomeu anuncia una oferta asiática y Benedito exhibe otra con una bebida energética de 70 millones

Los candidatos a la presidencia del Barça y su campaña electoral en internet

Los candidatos a la presidencia del Barça y su campaña electoral en internet / periodico

JOAN DOMÈNECH / BARCELONA

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El desagrado general a la publicidad de CatarCatar tiene visos de precipitar el final de la relación del Barça con el país asiático, que se visualiza en las camisetas mediante Qatar Airways y en las cuentas del club con 165 millones de ingresos en seis años. El contrato firmado en el 2010 acaba en el 2016, pero en octubre, en la próxima asamblea de compromisarios, los socios deberán aprobar u oponerse a la continuidad del compromiso. Tres de los cuatro candidatos a la presidencia se oponen.

La presión popular se visualiza con la firme postura de Joan Laporta, Agustí Benedito Toni Freixa. La contundente postura de cambiar de patrocinador ha forzado a Josep Maria Bartomeu, único defensor del contrato, a buscar alternativas, pese a que cuando dimitió para concurrir a las elecciones dijo haber atado un preacuerdo hasta el 2020 a razón de 50 millones anuales. Ayer, tras el debate televisivo donde se evidenció la soledad de Bartomeu en contraste con la contundencia de sus rivales, anunció que tenía una alternativa a Catar. Coincidiendo en el tiempo, prácticamente, con Benedito, que había convocado una rueda de prensa para mostrar «la alternativa al espónsor».

VOLAR SIN ALAS

Benedito aseguró que tenía cuatro alternativas, pero presentó la única que le permitió romper el acuerdo de confidencialidad antes de las elecciones. El acuerdo es con World Trade Brands Limited, una multinacional que pagaría entre 70 y 80 millones por temporada, en un contrato de tres años. El Barça luciría la marca de Flight without wings, una bebida energética. El lanzamiento del refresco, que e comercializará con ochos sabores diferentes en el mundo, se producirá en el 2016 y la corporación, de capital indio, invertirá 800 millones en la campaña promocional.

«No hay mejor manera de darnos a conocer que asociándonos con el Barcelona y que el logotipo aparezca en la camiseta», explicó Tahir Khan, director financiero de World Trade Brands Limited y desplazado expresamente desde Inglaterra para el acto. Quince minutos después del anuncio de Benedito, la cuenta de Twitter de Bartomeu escribía: «Tenemos una oferta de patrocinio de una empresa del mundo de la electrónica global y muy conocida que se acerca mucho a lo que queremos». La noche anterior, ante el acoso de los otros candidatos, había adelantado esa propuesta de una empresa asiática de tecnología.

OTROS ACTIVOS

«La única oferta seria y que cumple lo que Barça necesita y queremos para el futuro es la de Qatar Airways», había dicho Bartomeu el pasado 19 de junio. Poco después, añadió que el espónsor había liberado por buena voluntad «otros activos publicitarios» para que el Barça ingresara más dinero. Ahora, el último presidente, ha encontrado otras opciones.

Además de Benedito, que aludió a «intereses económicos» de Rosell y Bartomeu para seguir con Catar, Laporta y Freixa se alinearon en la idea de prescindir del mecenazgo asiático. El exdirectivo denunció que el acuerdo original con Qatar Foundation «no pasó por la junta» y lamentó que hubiera un derecho de tanteo hasta hace poco desconocido. Laporta defendió su idea de «devolver el nombre de Unicef al pecho de la camiseta» tras resaltar su perplejidad por que el Barça solo dispusiera de la oferta de Catar. «Quería demostrar que nos han mentido, que si ellos [en alusión a la candidatura de Bartomeu] no tienen otras ofertas aparte de Qatar es porque no quieren», argumentó Benedito al exponer el acuerdo por la camiseta del Barça. El empresario esperaba obtener entre 15 y 20 millones más por la de entrenamiento.