Abidal ya ejerce

Están tan encantados de ser antagónicos y de defender modelos tan distintos que coincidieron en enseñar sus respectivos proyectos el mismo día para que resaltaran aún más las diferencias. Se podría resumir en una: Eric Abidal, que se marchó tras una promesa de renovación de Josep Maria Bartomeu (todavía vicepresidente de Sandro Rosell), volverá al club con Joan Laporta. En realidad, ya anda de camino hacia Sant Joan Despí.

«Tengo la intención de hablar con Luis Enrique, espero verle esta semana y saber qué piensa sobre el futuro de la plantilla», dijo Abidal, imbuido en su nueva responsabilidad de director deportivo, aún etérea. A Bartomeu no le hace falta enviar a nadie a la ciudad deportiva. Sabía todo lo que necesitaba Luis Enrique y se lo ha dado: Aleix Vidal y Arda Turan. Abidal desea saber si Luis Enrique vuelve a desear el fichaje inmediato de Paul Pogba o lo aplaza al próximo verano. Laporta se ufana de poder contratar al mediocampista francés en cuanto se lo proponga.

Futbolistas. Nombres sobre los que articular un proyecto. Bartomeu dijo haber renunciado a ese juego y lo recalcó ayer. El último expresidente afirma que tiene «un plan estratégico que es de larga duración y no puede basarse en personas». El antepenúltimo (presidente) prefiere posar y exhibir los pilares que sostendrían su hipotético regreso al club. Otra triple A, que nada tiene que ver con la que presuntamente le iba a acompañar en el 2003.

Le reprochaban, hace 12 años, que confiara en Ayala, Albelda y Aimar para reflotar aquel decadente Barça cuando Rosell, su primer antagonista, abominaba del cruyffismo, desconfiaba de Txiki Begiristain y se arrogaba el fichaje de Ronaldinho. Laporta se hace acompañar de Abidal para ejercer de director técnico, de Alexanco para reflotar el fútbol base y de Albertini para lubricar las relaciones con las UEFA y la FIFA. Ellos tres sustituirían al futuro secretario técnico de Bartomeu -«el responsable es una persona con mucho prestigio, mucha experiencia y relacionado con el club. tiene ADN Barça», adelantó, ocultando el nombre-, a Jordi Roura al frente de la cantera y a Amador Bernabéu en los frecuentes viajes a Suiza.

Un gurú

El ejecutivo aún anónimo podría ser el exjugador Roberto Fernández, uno de los técnicos contactados por Bartomeu. Como Gerard López, a quien le ofreció el Barça B. «Al entrenador no le escogeremos nosotros, sino el responsable del fútbol formativo», reculó ayer el candidato. «Es un gurú», precisó Jordi Mestre, que repetirá como vicepresidente deportivo. Igual que Rafa Yuste en las filas contrarias. «Nuestra propuesta es antagónica», corroboró Laporta, deseoso de entrar hoy en el plató para el único debate cara a cara, con invitados que van a lo suyo: Toni Freixa presentó su plan de las secciones y Agustí Benedito expuso su estrategia de márketing.

Abidal tiene más nombres, pero no quiso adelantarlos hasta el día 19. En eso coincidió con Bartomeu, que ratificó a Albert Soler (actual director de deportes profesional), Ariedo Braida y Carles Rexach (miembros de la comisión técnica) en su nuevo organigrama. «El entrenador decide si alinea o no un jugador; el director deportivo piensa en la temporada actual y en las siguientes», explicó el ejecutivo Abidal.