La otra mirada

Àngel Llàcer «El fútbol es a veces la prensa rosa de los señores»

«El fútbol es a veces la prensa rosa de los señores»_MEDIA_1

«El fútbol es a veces la prensa rosa de los señores»_MEDIA_1

OLGA LERÍN
BARCELONA

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Al actor, director teatral y presentador Àngel Llàcer (Barcelona, 1974), que en la actualidad está al frente del programa Còmics (TV-3), le van los retos. En cambio no es amante de la actividad deportiva, ni tan solo como espectador. La alimentación sana y un buen descanso son sus compañeros de viaje.

-¿Qué hace para tocar tantas teclas a la vez y no morir en el intento?

-Duermo mucho, ocho o nueve horas. Mi truco para llegar a todo es dormir. Y tener la agenda muy bien planificada. Me puedo permitir ser un caos, porque lo tengo todo muy bien organizado.

-¿Practica algún  deporte para desconectar?

-No, no me gusta. Voy al gimnasio cuando me engordo un poco, porque tengo tendencia a la obesidad. Yo llego al verano con mucho peso. No he hecho la operación biquini como algunas personas. Y, en cambio, la Navidad es mi época de máxima delgadez, porque hago deporte. A veces tengo un entrenador personal. Pero hasta he llegado a correr carreras, como La Jean Bouin, con Manu Guix.

-¿Y aguantó el tipo?

-Sí. Son retos que me pongo. Me pasa también en el ámbito profesional.

-¿No es de los que predican mens sana in corpore sano?

-Es verdad que cuando practicas deporte te encuentras mejor, pero no durante el tiempo que lo haces. Es decir, te sientes mejor después, y yo soy mucho de vivir el momento. Soy más del carpe diem.

-¿Tampoco es espectador de deportes de masa, como el fútbol?

-No, pero es que a veces, en el caso del fútbol, hay noticias que no son de deporte específicamente, sino de todo lo que le rodea. Muchas veces el fútbol es la prensa rosa de los señores, porque este ha dicho no sé qué, el otro está enfadado porque no ha jugado, un entrenador afirma que su colega es tal cosa… Pocas veces oigo cómo se ha jugado un partido. Por ejemplo, cuando hablan con Guardiola hay una parte de cotilleo, de señora de peluquería que quiere oír lo que Pep ha dicho.

-Por lo que cuenta, deduzco que no sigue a unos colores.

-¡Uy, no!, porque yo tengo un defecto: lloro con mucha facilidad. Cuando alguien pierde, a mí me sabe muy mal, sea quién sea. En mi casa son del Barça de toda la vida y me ha llegado a saber mal que ganen, porque pienso que tal vez a unos pobres como el Leganés les tendríamos que haber dejado ganar. ¿Usted sabe la ilusión que deben de tener los del Villarreal por vencer al Bar-

ça? Y cuando alguien levanta una copa, me emociona, sea quién sea.