ACTIVIDAD EN AUGE

Tres formas de tomarse el 'running' en serio

Escoger las zapatillas adecuadas, someterse a un chequeo médico y llevar una dieta sana, claves para que correr no deje de ser un hábito saludable

Una corredora efectúa una prueba de análisis de pisada en la tienda Asics de Barcelona

Una corredora efectúa una prueba de análisis de pisada en la tienda Asics de Barcelona / periodico

EDUARD PALOMARES / Barcelona

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Todo el mundo puede calzarse unas zapatillas deportivas y salir a la calle a correr un rato. Es gratis, no requiere ningún vestuario especial, se puede hacer en cualquier momento y no hace falta cuadrar agenda con los amigos. Hay muchas personas que lo prueban y lo acaban dejando. En otras, en cambio, llega un momento que se produce un clic interno y el hasta el momento corredor informal se convierte en 'runner', según la terminología actual. Esto significa que el compromiso y el entrenamiento aumenta, al mismo tiempo que sube en gran medida el presupuesto. Eso sí, es conveniente huir de las modas para concentrar el gasto en aquello que realmente importa, es decir, la salud.

A la hora de comprar unas zapatillas, por ejemplo, no es buena idea dejarse guiar únicamente por el gusto. No se trata de comprar el modelo más bonito ni el que mejor combine con el resto del 'look', sino el que más conviene según el uso que se le va a dar, las características morfológicas del usuario y el tipo de pisada. Para analizar este último aspecto, la firma Asics  ha creado un sistema de análisis personalizado del pie, que permite establecer en apenas 30 minutos toda una serie de parámetros básicos para identificar qué zapatilla es la más adecuada para cada corredor, que puede ser pronador, si el impacto de la pisada se concentra en la parte interior de la planta del pie; supinador, si lo hace en la exterior; o neutro, si está equilibrado. 

“Hacemos una primera prueba estática mediante láser para conseguir una imagen 3D del pie y luego una prueba dinámica en la cinta de correr, que se graba con una cámara de alto rendimiento para analizar la pisada en movimiento. Al cruzar los datos, además de las respuestas a una serie de preguntas sobre el tipo de entrenamiento y los objetivos de cada persona, obtenemos toda una serie de conclusiones para recomendar una zapatilla determinada”, resume Álex Lamarca, especialista en el Asics Foot ID, para el suplemento Exclusive de EL PERIÓDICO.

Deporte seguro

El análisis de la pisada es algo básico y económico, pensado para cualquier tipo de corredor. Al aumentar un poco el ritmo y aspirar a objetivos algo más ambiciosos, aparecen otras pruebas recomendables y que cada vez son más solicitadas, como los reconocimientos médicos deportivos. El grupo Geseme ha puesto en marcha un servicio exclusivo de medicina preventiva, los Executive Medical Check Up, que pueden incluir un exhaustivo chequeo deportivo.

Este tipo de reconocimiento incluye dos aspectos fundamentales, uno más centrado en determinar el estado de salud para hacer frente al esfuerzo, y el otro, en mejorar el rendimiento deportivo. En todo caso, se trata de asegurarse que uno practica deporte de forma segura, siendo consciente de los propios límites. “Mucha gente comienza a correr sin ni siquiera preocuparse de enfermedades de base cardiacas que no se manifiestan en la vida cotidiana pero sí cuando se pide al corazón un mayor esfuerzo. Anomalías que pueden ser detectadas con un estudio cardiaco y, a partir de aquí, tomar las medidas adecuadas”, explica la doctora Catalina Vadell, directora médica de Geseme.

En los chequeos deportivos se efectúan analíticas, mediciones antropométricas para determinar la composición corporal, una espirometría para verificar la capacidad funcional de los pulmones y una exploración del aparato locomotor. Pero las pruebas más importantes son aquellas destinadas a comprobar la salud del corazón, mediante un electrocardiograma en reposo, en algunos casos un ecocardiograma y una prueba de esfuerzo. Tal y como comenta la doctora Vadell, esta última es clave para “valorar la potencia aeróbica máxima y analizar cómo se adapta el corazón a diferentes esfuerzos y velocidades”.

Dieta mediterránea

Respecto a la alimentación, existen todo tipo de teorías, aunque todo depende del tipo de entrenamiento. En cualquier caso, a veces hay que apoyarse en el sentido común y no buscar tres pies al gato. El nutricionista Àlex Pérez, especialista en el área de alimentación deportiva del centro de salud Nutrim de Barcelona, recomienda algo tan básico como la dieta mediterránea. “Su patrón es perfectamente aplicable para un deportista amateur y puede prevenir lesiones. Fruta y verdura, farináceos, poca carne y pescado, huevos, lácteos semi o desnatados, aceite de oliva y frutos secos, sería lo esencial”, detalla.

Se puede leer el artículo completo en el suplemento Exclusive de EL PERIÓDICO.