El Barça aparca la idea del nuevo pabellón y reformará el Palau

La idea de construir un nuevo Palau Blaugrana, una promesa electoral de Sandro Rosell, que consideró prioritaria cuando accedió a la presidencia del Barcelona en junio del 2010, quedará aplazada sine die. El club sigue sin tener una idea clara sobre el proyecto del nuevo pabellón y no descarta que en lugar de construirlo, acabe remodelando la vieja instalación.

Toni Freixa, el portavoz del club, dio a conocer el proyecto de reformas del Palau dentro de los acuerdos de la última junta azulgrana. «La idea es mejorar el Palau Blaugrana. Sabemos que tenemos que cumplir con la normativa de la Euroliga y que eso pasa por construir un nuevo Palau. Pero ese no es el único escenario. Hay otros», explicó Freixa, dejando claro que la construcción de la nueva cancha no entra en la agenda de la directiva a corto y medio plazo. «Todo lo que debemos hacer es más inmediato, necesario. Lo haremos aunque luego se puedan hacer otras cosas», añadió.

La normativa de la Euroliga a la que se refiere Freixa es la que obliga a los clubs como el Barça Regal, que cuentan con una licencia A ( lo que les garantiza una presencia mínima de tres años en el torneo), a jugar en pabellones de 10.000 espectadores. En la actualidad, el Palau tiene un aforo de 7.585 localidades, pero cerca de 300 de esas localidades cuentan con una visibilidad limitada por las columnas que sostienen la segunda gradería.

La norma de la Euroliga entrará en vigor la próxima temporada, pero el Barcelona ha logrado una moratoria con los responsables de la competición europea hasta la temporada 2015, sujeta al cumplimiento de unos plazos del nuevo proyecto. Si esos plazos no se siguen, el Barça tendrá dos opciones: el traslado al Palau Sant Jordi, una posibilidad que esta junta ni contempla, o la pérdida de la licencia, lo que le obligará a ganarse la clasificación cada temporada, como primero o segundo de la ACB.

SIN FINANCIACIÓN / La directiva azulgrana considera que en la coyuntura actual no tiene sentido invertir en la construcción de un nuevo pabellón y, además, el club tampoco ha tenido éxito en la búsqueda de un patrocinador que ayude a financiar la nueva instalación.

Esa es la razón fundamental por la que el Barcelona emprenderá una serie de reformas cuando acabe la temporada, que sirvan para adecuar las instalaciones, algunas de ellas ya obsoletas como los vestuarios. La idea del club es hacer una nueva sala de prensa en lugar de la que existe, ampliar la zona del gimnasio, adecuar las salidas de emergencia y dotar a cada sección de unos despachos que permitan el trabajo personalizado, ya que ahora mismo es casi imposible no superponer los horarios de entrenamiento del baloncesto, del balonmano, del hockey y del fútbol sala. El estudio realizado por el club prevé la construccion de todas esas instalaciones en el subsuelo que va del actual pabellón hasta la zona de La Botiga .

AMPLIACIÓN DE LA BOTIGA / Freixa anunció también la construcción de un nuevo pabellón en la Ciudad Deportiva, en la parcela que tiene libre y que recompró el año pasado, para el uso de las categorías interiores.

También se remodelará por completo el Palau Blaugrana 2, el antiguo Picadero, que está en Travessera de les Corts, para que albergue la sede social del club, las oficinas de atención al socio y un auditorio multifuncional. El que existe ahora, denominado Sala París, se reubicará en la nueva edificación del Picadero. El traslado de estas instalaciones, que actualmente se encuentran al lado de La Botiga, permitirá ampliar metros para la tienda del club.