Navarro destroza el sueño francés

Si hubiera que dibujar un partido perfecto, estaría muy cerca del que completó ayer la selección española en la final del Europeo. Si hubiera que soñar con una actuación sobresaliente, estaría muy cerca de la que ofreció Juan Carlos Navarro, autor de 27 puntos, y elegido mejor jugador de la final.

A nivel táctico, España avasalló a Francia, ayer sí con todas sus figuras en la pista. A nivel individual,la Bombadestrozó los sueños del equipo francés con otra actuación prodigiosa, cercana a los 30 puntos, que ya había rozado en cuartos y en semifinales, con la que puso broche a un torneo de ensueño, posiblemente el mejor en su larga y exitosa carrera en la selección.

No encontró antídoto Francia para Navarro, que se dedicó a martillear el aro una y otra vez con saña, ni tampoco para frenar los golpes que le vinieron por un lado y por otro, en una exhibición del baloncesto ofensivo que propuso España y en el que participaron todos los jugadores de Scariolo.

Estuvo soberbio Calderón, con sus 17 puntos y su emparejamiento defensivo con Parker. Estuvieron enormes Pau Gasol (17 puntos, 10 rebotes), Rudy (14 puntos), Marc (11 puntos) y así, uno por uno, todos los jugadores a los que Scariolo recurrió para mantener la intensidad en el partido, con un papel inesperado para Victor Sada, que apenas había tenido protagonismo hasta ahora, y también para Ibaka, que se dejó en defensa toda su energía.

España dominó, de principio a fin, y solo los 26 puntos de Parker, su protagonismo, impidieron que Francia hincara la rodilla antes de tiempo, mientras Noah naufragó en la batalla en la zona, dominado en su pulso con los hermanos Gasol.

ANTIDEPORTIVA DE RUDY / Por actitud, por inteligencia, el cuadro de Scariolo podría haber resuelto la final en los primeros 20 minutos, una gesta que está solo al acance de unos pocos equipos de la historia.

Pero una falta antideportiva de Rudy a Parker sacó a Francia de una situación crítica al final del segundo cuarto, cuando la selección dominaba con claridad (46-34, m.18) y parecía decidida a romper el partido. Esa acción resuelta con cinco puntos (dos tiros libres y un triple) dio aire al equipo francés que, con un robo añadido de Batum, firmó un parcial de 0-7. Eso le permitió ponerse de nuevo en pie y llegar sin un excesivo castigo al descanso (50-41), porque hasta ese instante el control del juego fue únicamente español.

A pesar de los 14 puntos con los que Parker se fue al descanso, España cerró gran parte de las vías ofensivas de Francia con una intensa presión sobre el base de los Spurs. La inició Calderón, que además lo hizo trabajar en defensa. Siguió Ricky y continuó Sada. Francia logró sobrevivir a base de triples (6 de 10), porque la defensa preparada por Scariolo y también el despliegue físico de Ibaka (cinco tapones en los primeros 20 minutos) selló la zona española.

La selección, además, encontró siempre una alternativa que la sostuviera en ataque. Empezó Navarro, siguió Marc Gasol y continuó Rudy Fernández. Así que España, después de una puesta en escena con algunos despistes, se apoderó del marcador y llegó sus ventajas hasta los 12 puntos, creando muchas dudas en la pizarra de Vincent Collet.

La antideportiva, en cualquier caso, no rompió la concentración de los jugadores de Scariolo, que volvieron con más convicción a su plan inicial y fueron minando, poco a poco, la resistencia de Francia, hasta que un triple de Pau Gasol llevó las ventajas a los 16 puntos (84-68, m. 33) y se convirtió en el punto de inflexión de un partido en el que Francia arrojó definitivamente la toalla.

En el partido por el bronce, Macedonia volvió a dar una excelente impresión , pero acabó cediendo el triunfo enlos últimos segundos antes Rusia por 72-68.