BALONCESTO

La deuda fuerza al Joventut a solicitar concurso de acreedores

La entidad presentará la solicitud en los próximos días para afrontar los 10 millones de déficit

Vista general de las gradas del Olímpic de Badalona, en un partido europeo del Joventut.

Vista general de las gradas del Olímpic de Badalona, en un partido europeo del Joventut.

LUIS MENDIOLA / Barcelona

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Una deuda acumulada de 10 millones de euros obligará al Joventut a presentar ante el juzgado un concurso de acreedores, la denominación actual de lo que antes se conocía como suspensión de pagos.

La intención de los máximos responsables de la entidad badalonesa es presentar el concurso de acreedores en los próximos días ya que, dentro de la complicada situación a la que aboca a la entidad, la consideran como la única salida viable para garantizar el futuro del club.

Con esa decisión, la Penya reconoce que no está en condiciones de afrontar todos los pagos de la deuda, lo que hace que estos se paralicen de forma automática y le permitan renegociarla, en la mayoría con una sustancial rebaja, ya que los acreedores prefieren cobrar una parte de la deuda antes que forzar una quiebra definitiva.

El Joventut, que mantiene en la actualidad una deuda de cinco millones de euros con Caixa Laietana, de tres millones con el Ministerio de Hacienda y de dos, con la Caixa, ya ha rebajado esta temporada un 50% su presupuesto: de 8,5 a 5 millones de euros, para intentar escapar de la situación de crisis actual.

ACTIVOS DEL CLUB / Con un activo del 25% del Centre Comercial Magic Badalona (el otro 75% pertenece a Sacresa, el grupo inmobiliario de la familia Sanahuja, que presentó el viernes un Expediente de Regulación de Empleo) y también con diversos terrenos en la ciudad, el Joventut cuenta, en teoría, con activos suficientes para garantizar el pago de la deuda, pero no se ve en condiciones de liquidarla a corto plazo.

Ese es uno de los aspectos que tranquilizan a Caixa Laietana y también a La Caixa, las dos entidades que firmaron los créditos de los dos terrenos con los que el club había negociado dos operaciones económicas (la construcción de un colegio y un supermercado), a las que el ayuntamiento de Badalona, tras impulsarlas, no dio luz verde al final.

Al acogerse a un concurso de acreedores, el control económico del club pasa a un juzgado. El juez designa a uno o varios administradores (con deudas inferiores a diez millones suelen ser dos) para que someta las cuentas a un estricto plan de saneamiento que garantice el cumplimiento de los pagos.

El Joventut será la segunda sociedad anónima de la ACB que se somete al concurso de acreedores después de que lo hiciera el Estudiantes hace un año a causa de una deuda de nueve millones con Hacienda.