ENTREVISTA PUBLICADA EL 6 DE SEPTIEMBRE DEL 2010

Tito Vilanova: "El Barça juega al revés que los demás"

"Los rivales nos estudian mucho y el 4-3-3 estático no te vale como antes. Nos reinventamos continuamente", afirma el segundo entrenador del Barça

Compenetrados 8Guardiola y Vilanova, en un entrenamiento.

Compenetrados 8Guardiola y Vilanova, en un entrenamiento.

MARCOS LÓPEZ / DAVID TORRAS / Barcelona

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Lleva tres años con él. En realidad, lleva más de media vida. Desde cuando jugaban juntos en el Barça B o compartían aquellas largas horas de conversación en La Masia. No se entiende la figura de Pep Guardiola sin la compañía, discreta, sencilla, de Tito Vilanova (Bellcaire d'Empordà, 17 de septiembre de 1969). Y la mano de Tito, un estudioso del juego, se nota mucho más de lo que se pueda pensar.

--Tienen la plantilla más corta de la última década: 19 jugadores. ¿Será suficiente?

--El año pasado ya se habló mucho de este asunto. Eso solo lo marcarán las lesiones. Las lesiones y, por supuesto, las competiciones. Pero aunque lleguemos hasta el final en la Liga, en la Champions y en la Copa, como deseamos, seguimos pensando que no es corta. La cuestión es que muchos jugadores pueden actuar en diferentes posiciones.

--Pocos pero más polivalentes.

--Sí, un poco esta es la idea que tenemos. Sería decir que son 19 pero que valen por 24 porque con cuatro o cinco jugadores puedes cubrir ocho puestos. Ahí están los casos de Abidal, Adriano, Busi, Maxwell, Andrés y todos los de arriba. Todos son muy buenos en diversas posiciones. Además, lo que siempre decimos con Pep: si tienes 24 o 25 jugadores hay muchos que no pueden jugar con asiduidad. Cuando los necesitas, si llevan un mes o mes y medio sin jugar, no están a su nivel. Siempre es mejor tener a la gente en funcionamiento.

--Y luego está la gestión de egos y del vestuario.

--Cada entrenador tiene su manera de trabajar. Algunos se sienten cómodos con 25 jugadores, hasta con 30. Para nosotros sería incómodo. Ya nos cuesta ahora hacer el equipo titular y dejar gente fuera. No es solo por un tema de convivencia sino porque lo entendemos así. Creemos que es lo mejor. Alguien que se queda a menudo fuera de la convocatoria es imposible que tenga la misma motivación para entrenar que los otros.

--El objetivo es que todos se sientan importantes.

--Todos saben que van a jugar. Saben que si alguien tiene una pequeña molestia será cambiado porque habrá otro preparado para salir. Es lo que pasó con Xavi en Santander. Todos mantienen la ilusión, nadie se desconecta del equipo. No les da tiempo. Así perciben que son importantes. No se lo dices, pero lo ven.

--Esta polivalencia es, al mismo tiempo, un arma para sorprender.

--No solo es importante por la alineación inicial. Depende del tipo de jugador que escojas para una posición, cambian los matices. También pasa durante un partido. Antes, la gente decía: "Mira, el Barça juega así". Pero eso es al ver solo el equipo titular. Pero el otro día en Santander, por ejemplo, ya se vio ese cambio. El lateral izquierdo que pensaba marcar a Iniesta luego vio que se iba al centro. Y en la segunda mitad, lo mismo. Leo se fue a la derecha, Villa al centro y Pedro a la izquierda. Los centrales que tenían a Leo se sorprenden porque luego deben marcar a Villa o a Pedro. En cierta manera es un dibujo táctico que se va reorganizando tácticamente. Y así es mucho más difícil de controlar.

--¿La sensación es que después de tres años es más fácil que les cojan el truco y es obligado cambiar?

--Claro. Por eso no es nada fácil jugar en el Barça. Jugamos al revés que los demás equipos.

--¿Por qué?

--Porque nos adaptamos en ataque al rival y en defensa no nos adaptamos nunca. Hacemos al revés que los demás. En la mayoría de los equipos, por no decir todos, los defensas dan un pelotazo e inician la jugada a través de un rechace. Nosotros, no. Los otros, cuando el portero saca, sus centrales están en el centro del campo. Nosotros salimos desde atrás con el balón. Eso para atacar. Para defender también somos distintos. Totalmente al revés que los demás. La mayoría, cuando pierde la pelota, baja a su área a defender. Nosotros, no. Nosotros vamos a buscarla al área enemiga para robarla lo más pronto posible y crear situaciones rápidas de ataque cuando el rival intenta organizarse. Durante estos dos años nos hemos reinventado. Cada año nos reinventamos. Ahora, también. Es lógico, los equipos nos estudian mucho y el 4-3-3 demasiado estático no te vale como antes. Todos los rivales intentan cogerte el truquillo, es normal. Pero la ventaja es que llevamos dos años trabajando juntos y el equipo ya sabe lo que debe hacer. Por eso nos tenemos que ir reinventando continuamente.

--Eso explica que grandes jugadores, como Ibrahimovic, no hayan encontrado su sitio.

--Jugar en el Barça es muy difícil. ¿Por que? Por ese estilo que tenemos. En la mayoría de los equipos, el delantero tiene mucho espacio a sus espaldas y espacios mucho más grandes. Aquí, no. Aquí nos encontramos muchas veces que en 20 o 30 metros se acumulan 20 jugadores. Los 10 nuestros y los rivales, que nos esperan en su área. Es normal que jugadores más pequeños y más bajitos se muevan mucho mejor en esos espacios tan reducidos. Es una cuestión lógica, incluso física si se quiere.

--Messi no tiene problemas y le han encontrado el sitio ideal.

--Cuando llegamos, se decía que Leo no era goleador. A mí me hacía gracia porque lo tuve en las categorías inferiores y si algo era es goleador. Cuando llegó al primer equipo, tuvo que jugar de extremo, pero de pequeño actuaba de media punta. Siendo tan bueno como es se adaptó a la banda y a lo que haga falta. Pero ahí, cerca del área, es perfecto para él. No le pueden arrinconar como en la banda, tiene opciones de irse por dentro, por fuera, por donde quiera… Y la distancia con la portería ya no es de 40 metros ni los esfuerzos deben ser tan grandes.

--Además de gol, ¿qué ofrece Villa?

--Lo que buscábamos con él es la capacidad que tiene para moverse justo en la línea defensiva, justo para romperla y dar profundidad al equipo. Nosotros tenemos mucha gente que juega muy bien, pero mucho mejor cuando recibe el balón al pie. Siempre hemos reclamado a jugadores con capacidad para ir al espacio. Eso lo hemos ganado en estos dos años con gente como Bojan, que ha mejorado muchísimo. Y ahora con Villa, mejor aún.