«Les damos un mapa, pero los buenos son ellos, los jugadores»

El Barça mantiene la misma base ideológica, táctica y grupal desde que llegó Guardiola. Han ido cayendo jugadores referencia (Ronaldinho y Deco ni llegaron a cruzarse con el técnico, Etoo solo estuvo un año e Ibrahimovic tampoco mucho más), pero la estructura del equipo se mantiene indestructible. Ahora, con más variantes tácticas, a pesar de que la plantilla se ha reducido a tan solo 19 jugadores, quedando abiertas, de par en par, para los jóvenes que llegan desde el Mini.

-¿Cómo consiguen la adaptación inmediata de los canteranos?

-Nuestro trabajo es facilitarles las cosas a los jugadores. Nosotros solo les damos un mapa de lo que puede ocurrir durante un partido, pero los buenos son ellos, los jugadores. Ellos son los que encuentran soluciones. Para ayudarles dedicamos las horas que haga falta, estudiando a los rivales y buscando también soluciones a los problemas tácticos que puedan ir apareciendo. Esto mismo en otro equipo no nos serviría para ganar.

-Ahora tienen otro reto por delante. Tras la marcha de Márquez, Touré, Henry e Ibrahimovic, el Barça ha perdido mucha altura para defender las acciones a balón parado.

-Es verdad que hemos perdido mucha altura sin todos esos jugadores. Pero hay que reconocer que el año pasado nos hicieron pocos goles a balón parado. Fue algo extraordinario, teniendo en cuenta que somos un equipo muy ofensivo. Eso nos dio muchos puntos. Ahora, por lo tanto, también nos tenemos que reinventar en ese aspecto.

-¿Cómo lo harán?

-Tenemos que ser mucho mejores. No tanto en el juego, ahí no se dan esas situaciones con mucha frecuencia, pero sí en las acciones a balón parado. Hay que estudiar aún más si cabe al rival y saber mucho más lo qué te van a hacer.