entrevista con el CENTROCAMPISTA DEL BARÇA

Andrés Iniesta: «Me gusta pensar que el fútbol, como la vida, te devuelve lo que le das»

DAVID TORRAS / MARCOS LÓPEZ / Barcelona

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El gol del Mundial le ha convertido en una especie de héroe nacional, pero Andrés Iniesta es el mismo de siempre. Un tipo de lo más sencillo que disfruta jugando como cuando era un niño. Y no hay mejor equipo para disfrutar de este juego que el Barça, el campeón que hoy se pone otra vez en marcha.

-Ha vivido un verano muy especial...

-Sí, distinto sí ha sido porque, quieras o no, tienes el recuerdo del año pasado, que lo pasé muy mal con la lesión y otras cosas, y claro, en este he disfrutado muchísimo.

-¿Y no se le ha hecho raro eso de ser objetivo de los paparazis y salir en revistas del corazón?

-Es normal, ya pasó un poco después de ganar la Eurocopa y ahora con el Mundial y marcando el gol pues hay más interés. Así que ya lo esperaba. Lo que no sabía es que a algunas personas no les iba a gustar mi bañador, que para mí era muy bonito (risas). No pensaba que iba a levantar esa expectación. Si lo sé me hubiese puesto uno peor al día siguiente. El año que viene ya iré preparado.

-También se le veía muy blanco...

-Encima eso. La foto era el primer día que iba a la playa y aún no me había puesto moreno. Después, ya cogí color (risas).

-Con todo lo que le rodea, el dinero, la fama, la admiración, ¿no es muy difícil seguir siendo el mismo?

-Para mí no lo es. Soy de los que piensan que cada uno siempre se muestra como es. El que al final te la acaba dando por chulo, es porque es chulo y el que te la acaba pegando es porque es así.. Yo tengo mi forma de ser. Igual lo veo demasiado fácil y desde fuera se ve diferente. El fútbol es mi vida, y luego tengo a mi novia, a mi familia, a la gente que está cerca de mí y nada más. Estoy encantadísimo de vivir en esta situación privilegiada pero sé que hay que valorarlo. A veces el hecho de estar arriba, que si el dinero, que si los coches, que si la fama... Todas esas cosas te hacen perder un poco el norte pero yo me siento el mismo. Llevo una vida muy normal y creo que la gente también lo agradece.

-Ha hablado de momentos difíciles. Pero después de golpes duros ha recibido grandes compensaciones. Le ocurrió con el gol ante el Chelsea y ahora en el Mundial.

-Tenía muchas ganas de que el Mundial saliese bien porque, claro, lo que uno no puede hacer es caer en esa dinámica de que todo te salga mal, y ser negativo. No es mi forma de ser, siempre me ha gustado darle la vuelta a las cosas. Y también me gusta pensar que el fútbol, como la vida, a veces te devuelve lo que das o te compensa un poco los esfuerzos, los sacrificios. No sé, creo que la gente que ama el fútbol acaba recibiendo una recompensa. Nunca sabes cuándo llegará, pero a mí me ha llegado, y ahí quedan esos momentos.

-¿Y qué sería sin el fútbol?

-Pues no lo sé. Supongo que habría estudiado alguna cosa para vivir pero el fútbol es mi vida. El fútbol lo cambia todo. Cuando estás en el campo solo piensas en eso, en disfrutar, te olvidas de todo un poco, es esa medicina que a veces es necesaria.

Salir a un campo y verlo todo lleno de gente, tener la oportunidad de jugar a fútbol, yo creo que es un regalo. Así que no yo me siento presionado, salgo a pasarlo bien. Igual que cuando era un niño. Esto es un juego, un juego serio si quieres, y con partidos más trascendentales que otros, pero no creo que puedas jugar bien si no disfrutas.

-Qué lejos quedan aquellos viajes de Fuentalbilla a Albacete con su padre, saliendo del cole a toda prisa con el bocadillo. Y los tiempos de la Masia, con 13 años. Lo pasó mal pero pudo mucho más la ilusión de ser futbolista.

SEnDSí, sí. Cuando vine aquí lo tenía muy claro. Aparte de la educación que me ha dado mi familia, soy una persona muy disciplinada, muy de saber lo que tengo que hacer. Vine aquí a entrenar, a estudiar y a intentar ser jugador de fútbol. Hubo momentos muy duros, claro. Pero eso vale para todo el mundo, cuando quieres llegar a un sitio tienes que sufrir. Luego la verdad es que el fútbol me ha dado muchísimo y, por supuesto, el Barça. Soy lo que soy gracias al Barça, me lo ha dado todo a mí y a mi familia.

-También le ha ayudado el estilo de juego que impuso Cruyff en el club.

--Sí, seguramente. A lo mejor en otro club me habría costado más o hubiese quedado en el camino como tantos otros, nunca se sabe. Pero la filosofía del club te ayuda a crecer, y luego que haya un entrenador que apuesta por ti siendo joven, es un poco estar en el momento oportuno, no sabes si todo esto es suerte o casualidad, pero suceden y al final encuentras el premio que buscas.

-Una buena imagen es la foto de Guardiola entregándole el premio de la Nike Cup cuando era un crío.

-Es verdad. La tengo en un cuadro. Pep y Laudrup siempre fueron mis ídolos y, bueno, que con 14 años Guardiola te dé aquel trofeo, pues imaginaos... Nunca pensé que unos años después sería mi entrenador.

¿Cómo es? Es una persona que se entrega mucho. Sabe transmitirte muy bien las cosas y lo más importante es que cada día aprendes algo. Te facilita mucho el trabajo, cuando a lo mejor tu no ves soluciones en el campo, él sí las ve.

-Y, ahora, vuelta a empezar.

-Sí, y tengo muy buenas sensaciones. Veo a la gente muy bien, muy metida. Este equipo es especial, hemos dado con un grupo muy bueno, en el sentido de que podremos ganar o perder, pero estar vamos a estar de principio a fin. Vamos a pelear, a darlo todo, ese compromiso no va a faltar.

-Guardiola pidió primero que la gente se abrochara los cinturones y ahora que se ponga cómoda.

SEnDEs que vamos a disfrutar seguro, todos. Será difícil porque cada año lo es más. Pero sabemos que no podemos desaprovechar esta oportunidad o este momento para seguir ganando.