UN RECUERDO AMARGO

"Italia tiene un 'culo' que no veas"

Abelardo, como sus excompañeros en la derrota del Mundial-94, cree que los 'azzurri' conviven con la suerte en los grandes torneos "Hay que ser muy superiores porque, de igual a igual, te ganan por oficio", asegura Bakero

EMILIO PÉREZ DE ROZAS

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Boston. Foxboro Stadium. 9 de julio de 1994. Mundial de Estados Unidos. Italia elimina a España, cómo no, en los cuartos de final. Dino Baggio abrió el marcador a los 25 minutos. Caminero empató, tras cesión de Sergi, a los 58. En el 82, Nadal mete un balón en profundidad a Julio Salinas, el vasco dispara solo ante Pagliuca y el meta italiano despeja, in extremis, con la punta del pie. De posible 2-1 al 1-2 definitivo, pues Roberto Baggio, tras pared con Signori, dispara a puerta sin que Abelardo pueda evitar el gol sobre la línea. Minuto 93, el escándalo final: Luis Enrique sube a rematar a la desesperada y Tassotti le frena rompiéndole la nariz de un codazo. El húngaro Sandor Puhl grita:"¡Sigan, sigan!".

Viena. Estadio Hernst Happel. 22 de junio. Eurocopa del 2008. España-Italia, de nuevo."Éramos tan superiores como lo somos ahora, o eso me parece",narra el exazulgrana Bakero."Nos ganó la genialidad de Baggio. Y punto. De ahí que piense que hoy, lo más importante, es que España marque cuanto antes la diferencia y que lo haga ¡en goles! no en juego. En juego, nosotros, en el 94, fuimos mucho mejores que ellos y no nos sirvió de nada. Hay que ser muy superiores. De igual a igual, los italianos te ganan por oficio".

Demasiada suerte

PituAbelardo asegura, con cariño, con chispa, casi con admiración, que "Italia tiene un culo que no veas".Culo, en italiano, es suerte, mucha suerte. Tal vez demasiada."Estaban en la calle si Mutu no llega a fallar el penalti ante Buffon". Abelardo está convencido de una cosa:"Si llego a ser zurdo, paro el disparo de Baggio pero, al ser diestro, me tire hacia el otro lado".Y muestra aún su sorpresa porque"un equipo de Clemente muriese pillado en un contragolpe". Y es que"éramos tan superiores que nos fuimos todos

"Fuimos los únicos que intentamos jugar a fútbol", señala Camarasa, pensando que hoy ocurrirá lo mismo."Les superamos en juego, ocasiones y estadísticas. ¿Y qué? Perdimos. Y ellos, ya ves, como siempre: en el 82 pasaron sin ganar un partido; en EEUU, gracias al árbitro y ahora, llorando".

Hierro no quiere hablar demasiado de aquello. "El pasado, mejor no removerlo. Nadie vive de recuerdos y menos en el fútbol. Son otros tiempos, otra selección y otra oportunidad".Más o menos comoJulitoSalinas, que estos días anda mosca porque todo el mundo le recuerda la oportunidad perdida."No fue perdida: chuté bien y Pagliuca tuvo la potra, ya ves, de que, habiéndose tirado hacia el lado contrario, detuvo mi disparo con el pie".Para Salinas, fue peor la ocasión fallada el otro día por el alemán Gómez ante Austria (0-0 en el minuto cuatro) o"la pifia"del meta checo Cech, que le regaló a Nihat el empate y que, finalmente, supuso abrir la remontada.

Descarada ayuda arbitral

"Una vez vivido y, pasados los años, piensas que no tendremos una oportunidad como aquella, éramos tan superiores..."Quien se lamenta ahora es Goikoetxea."Ese 2-0 ante los franceses, ya ves, con expulsión y penalti incluidos, dará alas a los italianos". Alas es lo que piensa Sergi que hubiese tenido que tener Abelardo para detener el gol de Baggio."Claro que si el árbitro hubiese llevado el pinganillo de ahora igual el linier le hubiera advertido del penalti de Tassotti ¡qué sé yo!". Eso sí, Sergi cree que"a nosotros siempre nos falta el culo de Italia o su eficacia".

"Yo lo siento, de verdad--dice Miquel Àngel Nadal con esa típica sonrisa en los labios de niño bueno, que no ha roto nunca un plato--, pero aún ahora sueño con la ocasión de Julito, al que quiero horrores. Aquello era el 2-1 y a semis". El tío del tetracampeón de Roland Garros cree que"todas las derrotas te dejan muy tocado, pero aquella eliminación aún dura".Por eso él, como Luis Enrique, clamavendetta"en el buen sentido de la palabra, en su versión de desquite deportivo".Eso sí, Nadal tiene, en contraposición a sus compañeros, una aclaración que hacer sobre la tan cacareada suerteazzurra."Cuando se repite tantas veces, ya no es suerte; es mentalidad, carisma, oficio".

Oficio de vencedores, claro.