Copa de la Reina
El Barça saca brillo a su corona y gana al Atlético de Madrid en la final de la Copa (2-0)
Claudia Pina firmó un doblete para proclamar al conjunto de Pere Romeu campeón y cerrar la temporada con el triplete nacional.

Claudia Pina celebra su gol en la final de la Copa de la Reina / FC Barcelona


Laia Bonals
Laia BonalsRedactora de deportes
Laia Bonals es redactora de deporte de El Periódico desde abril de 2023. Antes, formó parte de la sección de deporte del ARA, donde empezó su especialización en deporte femenino la temporada en la que el Barça ganó su primera Champions en Goteborg. Desde entonces, ha sido la especialista en el creciente mundo del deporte femenino, siempre preocupada contar las historias de las atletas que están cambiando el mundo y rompiendo techos de cristal.
Colabora con las emisoras de radio Catalunya Ràdio y RAC1, además de las cadenas televisivas de Gol TV y Teledeporte.
Volver a ganar. Y hacerlo feliz. El Barça venció al Atlético de Madrid (2-0) en la final de la Copa de la Reina que ponía el sello final a una temporada que siempre tendrá un gusto amargo. Sin embargo, las azulgranas la cerraron como mejor saben: dejando reluciente su corona, una vez más.
No siempre es fácil avanzar. Hacer borrón y cuenta nueva, sin que los errores pesen. El Barça estaba obligado a ello, pero no siempre el deber coincide con lo que uno puede gestionar. Por mucho que las azulgranas debieran salir al césped del Alcoraz con las ideas claras, la sombra de Lisboa aún se cernía sobre ellas. El golpe ha dejado tocada a una plantilla que apenas ha podido digerir su pasado más reciente.
Recuperar la frescura
Eso y el cansancio. Tanto físico como mental ha mermado a una plantilla que tiene las piernas casi tan cansadas como la cabeza. El calendario ha dejado exhausto a un vestidor que ha notado cómo la temporada se ha hecho excesivamente larga. En parte, el descalabro el Lisboa se debe a ello. Otra parte a una desconexión que amenazaba también en Huesca. Porque no siempre es tan fácil como darle a un interruptor. El equipo necesitaba volver a estar unido y sentirse a gusto en un partido, pero no todos los ingredientes de la receta estaban sobre la mesa. La frescura que se necesita para razonar no es sencillo tenerla tras un año como este.
Pero el equipo de Pere Romeu es tenaz. Se ha levantado otras veces, aunque no de golpes tan crueles como el de hace unas semanas en la final de la Champions. Sin el tiempo necesario para dejar reposar las malas sensaciones, había que dar la talla en la final de la Copa de la Reina contra al Atlético de Madrid. Y las azulgranas se pusieron a ello.
Ni el bloque hundido que presentaron las colchoneras ni el calor sofocante en El Alcoraz les impidió imponerse con el balón. Estuvieron incómodas, pero a medida que el reloj iba corriendo el dominio era más aplastante. Totalmente volcadas en campo rival, combinaron a su gusto. Tardó ese dominio en convertirse en ocasiones claras.
Un paso adelante
Aunque si Claudia Pina está sobre el verde, tarde o temprano la veremos sonreír. La delantera azulgrana este año ha dado un paso adelante. Con la confianza del entrenador y tras reconstruir la suya propia, se ha erigido como una futbolista de escándalo. No solo es el desequilibrio que genera o el olfato goleador que tiene. Va más allá. Pina demuestra que la paciencia y el trabajo tienen recompensa. Aquella futbolista que tuvo que marcharse hace unos años para tener minutos es ahora una jugadora líder y determinante. Y a través de ella, el Barça consiguió abrir el marcador.
Una combinación con Ewa Pajor dejó a Pina encarada a la portería de Lola Gallardo justo en la frontal del área. Desde allí reventó el balón, ajustándolo al palo totalmente fuera del alcance de la guardameta colchonera. Se besó el escudo mientras sus compañeras corrían hacia ella para celebrar el tanto.
Sus destellos de talento durante los partidos se han convertido en una luz constante. Ya no es ese gol solitario o una asistencia, aunque preciosa, esporádica. Ahora, Pina está presente a cada minuto de partido con un desequilibrio que la convierte en imparable. Con ella el Barça se siente fuerte, claro de cara a portería. Tiene la confianza de que todo llegará. Y si no, ya estará Pina para crear una nueva obra de arte. Como hizo con su segundo tanto ante el Atlético de Madrid que prácticamente grababa el nombre del Barça en la Copa. Desde fuera del área y con el exterior, Pina la puso donde quiso.
El Barça gestionó con calma los últimos compases hasta que la euforia se desató cuando la colegiala señaló el final. Hubo un momento de pausa. Y luego todas se abrazaron. Sintieron cómo el peso que cargaban sobre los hombros pesaba un poco menos. No se fue del todo, pero la sensación de volver a ser dejó que este equipo disfrutara de lo logrado. Del éxito. Volvieron a sacar brillo a su corona en una nueva proclamación. Con el triplete nacional, el Barça cierra la temporada con una sonrisa que invoca al optimismo.
- El catalán, la condición indiscutible para Aitana Bonmatí en su nuevo documental: 'Que pueda hablar en mi lengua tiene que ser respetado
- Familia de Rita Hayworth y nieto de torero: así es Gonzalo García, el primer goleador de Xabi Alonso
- El Barça sella el acuerdo con Nico Williams y pagará los 58 millones de su cláusula de rescisión
- Nico Williams y el Barça ya están de acuerdo a expensas de la cláusula
- La intrahistoria del amor del Barça por Nico Williams: de su lealtad con el Athletic a su flechazo con Lamine
- Lamine Yamal cumple el sueño de conocer a Neymar
- Polonara, ingresado por leucemia dos años después de operarse de un cáncer testicular
- Sepa por qué Àlex Márquez no se obsesiona con Marc y es más feliz y rápido que Bagnaia