El Barça mira a los ojos a su enemigo inglés: "Que nunca hayamos conseguido ganarle en casa es pasado"

Al Barça le quedan pocos retos. Tras derrumbar todos los muros y construir nuevos hitos, al equipo azulgrana le faltan muy pocas casillas por marcar. Una de ellas es ganar al Chelsea en casa. El rival de semifinales de la Champions (18 h, TV3 y DAZN), igual que en las últimas dos ediciones, llega a Sant Joan Despí con algunos cambios respecto a años anteriores. Ahora, con nueva entrenadora (una pesadilla para las azulgranas) y viejas compañeras azulgranas, el Barça busca dejar la eliminatoria encarrilada este domingo.

"Que nunca hayamos conseguido ganarle al Chelsea en casa es pasado y no afecta al partido de mañana", sentenció Pere Romeu, que afronta sus primeras semifinales de la Champions en el banquillo del Barça. El Chelsea se ha convertido en un conocido demasiado cercano para el Barça. "Tenemos la referencia del pulso del año pasado, en el que la ida no salió bien y en la vuelta conseguimos la clasificación. Es importante sacar un buen resultado, pero tenemos que tener en mente que es una eliminatoria de 180 minutos", matizó Aitana Bonmatí antes de la ida de las semifinales.

De BCN a Londres

Las azulgranas no solo han coincidido con ellas en las fases finales de la Champions las últimas temporadas, sino que además algunas de las futbolistas que han dejado la capital catalana lo han hecho para convertirse en 'blues'. Los antecedentes más cercanos, en estos pasados mercados de fichajes. Keira Walsh fue la enésima jugadora que se sumó a las filas del Chelsea tras una etapa en el Barça. Hacía tiempo que la inglesa había pedido marcharse. Quería volver a su país, estar cerca de su gente y llegó un punto en que su continuidad era insostenible en el equipo azulgrana. Pese a que en verano parecía hecho con el Arsenal, finalmente el pasado diciembre hizo las maletas para ocupar una taquilla en Stamford Bridge.

Una llegada menos tortuosa tuvo Lucy Bronze. La lateral terminó contrato el pasado verano y decidió volver a Inglaterra. "Ellas nos conocen, saben cómo jugamos, pero no sé si eso es suficiente como para plantear un partido contra nosotras. Nos conocen, nosotras a ellas también y a otras jugadoras de su equipo que llevamos mucho tiempo jugando contra ellas", relató Aitana sobre sus excompañeras.

Relevo en el banquillo

Junto a Lucy y Keira, también aterrizó en Londres Sonia Bompastor. La exentrenadora del Olympique de Lyon cogió las riendas del equipo tras la marcha de Emma Hayes, que ahora dirige la selección de EEUU. Con el cambio, las 'blues' han ganado fútbol.

Bompastor ha sido el dolor de muelas de este Barça en gran parte de su historia reciente. La que fuera entrenadora del principal verdugo de las azulgranas en las finales de la Champions perdidas, tiene pillada la medida al Barça. Si bien es cierto que en la pasada final en Bilbao, donde el Barça levantó su tercera Champions precisamente ante el equipo francés, Bompastor conoce a la perfección la mejor versión del vestuario azulgrana. "Es una entrenadora nueva que nos conoce mucho, pero es su primera temporada en el Chelsea", comentó Romeu.

"Somos equipos muy distintos. Ellas son un equipo que no está incómodo sin balón, cuando baja el balón tiene aún más posibilidades de contraataque. En ataque tiene capacidad para tener posesiones largas. Somos dos equipos diferentes y haremos un partido para intentar tener el control", radiografió Pere Romeu antes del primer asalto contra el equipo inglés. A nivel general, los equipos de Bompastor han puesto en práctica un estilo puramente ofensivo. Algo que los hace peligrosos tanto en posesión como en transiciones ofensivas. Además, cuando toca cerrarse atrás o tener cierta dureza en la contención del ataque del rival, no tienen ningún tipo de complejos.

El duelo, rocoso, será un medidor de paciencia y talento para el Barça. "El Chelsea va a plantear una eliminatoria larga. Ha hecho cosas similares esta temporada. Nos imaginamos un partido donde nos coincidan un poco de tiempo al inicio. He disfrutado mucho preparando la eliminatoria y analizando al Chelsea, he visto al equipo convencido con lo que hemos trabajado y también con muchas ganas de estos partidos", confesó Pere Romeu antes del primer asalto.

Romper un nuevo techo y encarar la final de Lisboa. La meta está marcada y el trabajo hecho.

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