Alana Haim: de los Grammy a los Bafta en un año de la mano de 'Licorice Pizza'

Taylor Swift le ganó la partida en los últimos premios de música, pero su celebrado debut cinematográfico impulsa a la pequeña de la banda Haim a cosechar nominaciones cinematográficas

Alana Haim, protagonista de 'Licorice Pizza'

Alana Haim, protagonista de 'Licorice Pizza'

Natalia Araguás

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"Estoy viviendo el año más loco de mi vida", dice la música y actriz Alana Haim. La pequeña del grupo Haim, un trío de hermanas de California, ya encaraba 2022 con una gira que las llevará a tocar en las plazas más codiciadas de EEUU, del Madison Square Garden de Nueva York al Hollywood Bowl de Los Ángeles. Antes, habían hecho historia cuando se convirtieron en la primera banda de rock de chicas en ser nominada el marzo pasado al premio más importante de los Grammy, álbum del año, que finalmente se llevó Taylor Swift. Al éxito musical de Haim, Alana le suma ahora su aclamado debut cinematográfico a las órdenes de Paul Thomas Anderson en 'Licorice Pizza', donde se codea con actores consagrados como Sean Penn o Bradley Cooper. Sin embargo, el director de 'Boogie Nights', 'Pozos de ambición' y 'Magnolia' ha apostado por dos neófitos para protagonizar esta historia de amor ambientada en 1973 en el valle de San Fernando de Los Ángeles: Alana Haim y Cooper Hoffman, cuyo padre, Philip Seymour Hoffman, era el actor fetiche de Anderson.

Reparto en familia

La elección de Alana Haim para 'Licorice Pizza' no es casual. Originaria del valle de San Fernando, como Paul Thomas Anderson, su madre había sido profesora de plástica del director durante la escuela primaria. Anderson ya había dirigido varios videoclips de Haim, que comenzó su andadura en 2007, un lujo solo al alcance de artistas como Radiohead o Fiona Apple. Al director le atrajo el carisma de Alana, a quien compara con "un imán" que le puso a dar vueltas a una historia que pudiera encajar con su talento. Hasta tal punto se ajusta el guion a la personalidad de Alana Heim que su personaje mantiene el nombre (Alana Kane), el ímpetu y hasta la familia de la vida real. Sus famosas hermanas, Este y Danielle, la acompañan en el reparto, así como sus padres, Donna y Mordechai (Moti, un jugador de fútbol nacido en Israel), que interpretan a versiones ficcionadas de sí mismos.

Hasta la imbricación con la música de Alana Haim tuvo en cuenta Anderson para lanzarla al cine. 'Licorice Pizza' (pizza de regaliz) toma el nombre de una popular cadena de discos californiana que en los 70 sirvió de escenario a Patti Smith o Blondie. El tráiler transcurre a ritmo de 'Life on Mars' de David Bowie, Tom Waits actúa y Bradley Cooper interpreta a Jon Peters, expeluquero convertido en productor que lanzó a Barbra Streisand y se convirtió en el quinto marido de Pamela Anderson. Según ha confesado a 'Harper’s Bazaar', Alana Heim conoció antes a Paul Thomas Anderson por sus bandas sonoras que por sus películas.

Su primer contacto con el director fue un CD con las canciones de 'Boogie Nights', con la que Licorice Pizza comparte época y estética. Licorice Pizza parte con cuatro nominaciones a los Globos de Oro, entre ellas la de mejor actriz para Alana Haim, que también suma nominación a los Bafta y se postula para los Oscar. 

Romper estándares

Ella encaja todos sus asombrosos logros con desparpajo y humildad. Confiesa entre risas que, cuando Paul Thomas Anderson le anunció que la sacaría en una película tras una colaboración en el festival de Coachella, pensaba que sería de extra. "Ojalá alguien quiera verme actuando de nuevo, pero en caso de no ser así, este habrá sido el mayor regalo de mi vida", ha declarado a Vanity Fair. Alana Haim ha elevado la 'chica del Valle' a una nueva categoría, alejada del estereotipo de ambiciosa cabeza hueca que se le adjudicó a Marilyn Monroe. Como judía, celebra contribuir a romper los estándares de belleza aria de Hollywood, como en los 70 ya hicieran Barbra Streisand y Pam Grier. Las marcas de lujo se la rifan.

Síndrome Peter Pan

Su acné permanente, su pelo encrespado, le han ayudado a hacer más creíble en 'Licorice' Pizza su relación con el personaje de Cooper Hoffman, de 18 años, que encarna a un director en ciernes. Ella acaba de cumplir los 30 y los ha celebrado en una fiesta conjunta con Taylor Swift, también sagitario y amiga íntima pese al revolcón que le dio en los Grammy. "No me siento como una adulta", ha reflexionado Alana Haim, quien dice tener la confianza de una adolescente: "Todo el mundo juega a gira la botella y nadie quiere besarme". Incluso en el síndrome de Peter Pan capta Alana el sino de los tiempos. 

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