Lucas Bravo, la obsesión de 'Emily en París'

El actor francés acaba de estrenar la segunda temporada del gran éxito de Netflix y será visto próximamente en películas con Isabelle Huppert, Julia Roberts o George Clooney

Lucas Bravo, en un episodio de 'Emily en París'

Lucas Bravo, en un episodio de 'Emily en París'

Juan Manuel Freire

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Cuando muchos se preguntan, con cierta incredulidad, el porqué del éxito masivo de 'Emily en París', parecen ignorar deliberadamente la presencia en la serie de Lucas Bravo, actor no solo de físico escultórico, sino también de curiosa capacidad emotiva. En la primera temporada del éxito de Netflix, Bravo consiguió hacernos sentir mal por un talentoso chef (Gabriel) que ponía los cuernos a su adorable novia francesa (Camille, Camille Razat) con una estadounidense recién llegada a la ciudad (la Emily del título, Lily Collins). Cuestión de vulnerabilidad y sensibilidad. 

"Sobre el papel, Gabriel era simplemente el chico de al lado", explica Bravo en un 'junket' virtual previo al estreno de la segunda temporada de la serie. "Pero cuando me eligió para el papel, Darren [Star, el creador] se decantó por una versión más vulnerable. Además, cuando me enfrento a un personaje, siempre parto de un lugar de amor, de intentar comprenderlo; no sé hacer de alguien a quien no quiero. Y desde ese lugar de amor, hice todo el viaje hasta la raíz de la situación actual de Gabriel: cuáles son las cicatrices y los traumas que le hicieron perder sus valores".

Chef con experiencia

Por la parte de la cocina, Bravo no tuvo que viajar demasiado: hace un tiempo, cuando aún no le llovían las ofertas como actor, había sido subchef en un restaurante de París. "Cuando rodamos, tengo un doble para las escenas de cocina", explica. "Pero yo insistía en que mis manos aparecieran en el plano y en conectar la imagen con mi cara. Odio esos planos de películas en que ves a alguien tocar el piano y filman por separado cara y manos. Quería ser yo quien cortara los puerros [ríe]". Si se trataba de separar tripas, no tenía problemas en delegar: "Gabriel cocina mucha carne, pero yo soy vegetariano. Luché porque él también lo fuera, pero los guionistas querían realmente basarse mucho en lo que llamamos 'bourguignon', cocina tradicional francesa".

Hijo del antiguo futbolista profesional Daniel Bravo (y la cantante Eva Bravo), este nativo de Niza está acostumbrado a vivir cada cierto tiempo en una ciudad distinta. "Entre enero y marzo de este año, viví en Lisboa, solo porque me apetecía. Ahora mismo no hace falta estar en Los Ángeles y hacer pruebas allí para conseguir papeles: todo se hace vía Zoom o a través de grabaciones que te haces a ti mismo". Es decir, sin salir de casa, ni falta que hace, Bravo se las ha ingeniado para ser fichado en películas al lado de Isabelle Huppert ('Mrs. Harris goes to Paris'), Julia Roberts y George Clooney ('Ticket to paradise') o la revelación de 'Borat, siguiente película documental', Maria Bakalova ('The honeymoon'). Nos cansaremos de ver a Bravo. Bueno, muchas y muchos no. 

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