ARTISTA DE LA CÁMARA

Tyler Mitchell: el fotógrafo del 'star system' negro

A sus 24 años, es el retratista más solicitado por las revistas y las marcas

zentauroepp48134215 tyler mitchell190517114458

zentauroepp48134215 tyler mitchell190517114458 / periodico

Juan Fernández

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

En la última edición de la Gala Met, el pomposo sarao que todos los años reúne a lo más selecto de la moda y el famoseo norteamericano en Nueva York para recaudar dólares y congratularse de haberse conocido, se vio deambular divertido y curioso a un rostro juvenil con aires de polizón. A sus 23 años, el fotógrafo Tyler Mitchell (asomando detrás de la cómica Tracee Ellis Ross en la fotografía que encabeza este artículo) conserva la impronta del que se intuye infiltrado en una fiesta donde no estaba invitado. No en vano, hace apenas tres años se dedicaba a retratar 'skaters' callejeros sin que nadie supiera nada de él y hoy se lo disputan las revistas y marcas de moda más prestigiosas, locas todas por contratar los servicios de su objetivo.

La historia de Mitchell es un cuento de la Cenicienta ambientado en los tiempos de Instagram, en los que pasar del anonimato más absoluto a la gloria más divina es cuestión de confianza, talento y viralidad. Y también de la ayuda de un hada madrina 'influencer' que se fije en ti y te convierta en el elegido. 

La última página de ese relato es su agenda de mayo, más propia de un fotógrafo con pedigrí que de un recién llegado. En los quioscos norteamericanos es posible encontrar este mes su firma en las portadas de las revistas de moda y tendencias 'I-D' y 'Dazed', y suya será también la foto de la actriz y cantante estadounidense Zendaya que abrirá la edición de junio de 'Vogue'. Como si de un retratista consagrado se tratase, desde mediados de abril pueden verse sus  trabajos en la exposición retrospectiva que le ha organizado el museo de fotografía Foam de Ámsterdam, titulada 'Puedo hacerte sentir bien'.

Desde el suburbio

Bien ya se sentía él al principio del cuento, cuando vivía en Marietta, el suburbio de Atlanta en el que nació, creció y conoció su primera  pasión, montar en monopatín, y donde más tarde descubrió que lo divertido de verdad no era patinar, sino registrar a sus amigos 'skaters' con la Canon digital que se compró a los 15 años. 

Convencido de que lo suyo era la imagen y no la velocidad, estudió arte multimedia en la Tisch School de Nueva York y se especializó en captar instantes cotidianos de la cultura juvenil afroamericana en retratos y vídeos saturados de color que luego subía a sus cuentas de Tumblr e Instagram, donde cada vez tenía más seguidores. Siendo aún estudiante recibió su primer encargo profesional: grabar un clip musical para el rapero Kevin Abstract. También se autoeditó su primer libro, 'Paquete', con las fotos que hizo en La Habana, donde vivió medio año. 

Giro definitivo

Los cazatalentos de la imagen no tardaron en fijarse en ese fotógrafo desconocido que retrataba con tanta honestidad y belleza la identidad racial de los jóvenes negros norteamericanos. Mitchell empezó a publicar instantáneas en revistas y a participar en exposiciones colectivas, pero el hada madrina que acabaría dando un giro definitivo a su cuento no iba a ser un personaje cualquiera, sino alguien de relumbrón. Invitada a editar el último número de septiembre del 'Vogue' norteamericano, Beyoncé respondió a la revista que solo accedería si las fotos las hacía el veinteañero retratista.

Convertido de repente en el fotógrafo de moda, en los últimos meses ha despachado vídeos y fotos para diversas campañas publicitarias de Marc Jacobs, Givenchy, Converse, Nike, Ray-Ban, Calvin Klein, Prada o Mercedes Benz. Le contratan por el magnetismo que desprenden sus imágenes, pero él, que aún conserva la inocencia de los novatos, dice perseguir una misión de más calado. «Con mi trabajo quiero elevar y dignificar el cuerpo negro», avisa.