Brie Larson tiene superpoderes

Cuando era pequeña soñaba con ser una especie de cruce entre Indiana Jones y las Spice Girls. Ahora, con 29 años se ha convertido en la primera mujer que protagoniza en solitario una película de la factoría Marvel.

Como su personaje de Carol Denvers, Brianne Sidonie Desasulniers, más conocida como Brie Larson, siempre se ha mostrado inasequible al desaliento, ha luchado, ha caído y se ha vuelto a levantar, demostrando un tesón a prueba de bombas a la hora de alcanzar sus objetivos. Comenzó a la temprana edad de nueve años actuando en 'sketches' en el 'Tonight show' de Jay Leno. Cuando todavía era adolescente, probó en el mundo de la música (en la época de MySpace) con un álbum de esencia pop titulado 'Finally Out of P. E.'. No llegó a ser Christina Aguilera, pero demostró buenas cualidades vocales y una enorme predisposición para convertirse en una estrella.

El activismo 
feminista se ha
convertido en
los últimos años
en parte
fundamental
de su vida

Fue a partir de su participación en la serie de televisión ‘United States of Tara’ (2009) cuando su carrera como actriz comenzó a despegar. Pequeños papeles en ‘Scott Pilgrim contra el mundo’ o ‘Greenberg’, en comedias 'mainstream' como ‘Infiltrados en clase’ hasta desembocar con un rol protagonista en ‘Short term 12’ (‘Las vidas de Grace’), la película de Destin Daniel Cretton que se convirtió en la sensación indie del año y en la que interpretaba a una joven que trabajaba en un centro de asistencia a menores, generando un vínculo muy especial con el espectador.

El otro lado de la cámara

Comenzó a frecuentar los círculos alternativos y a interesarse por el otro lado de la cámara. Entre 2012 y 2013 dirigió, escribió y editó dos cortometrajes, ‘Weighting’ y ‘The Arm’, junto a otras dos actrices inquietas, Sarah Ramos y Jessie Ennis, un trabajo gracias al que consiguieron el Premio Especial de Jurado en Sundance. Ya era una artista completa cuando participó en ‘La habitación’, por la que ganó casi todos los premios de ese año, 2015, incluido el Oscar, por encarnar a una joven víctima de secuestro y violaciones sistemáticas durante años.

Su compromiso con el maltrato hacia la mujer no quedó simplemente en un papel de estatuilla dorada. A partir de ese momento se involucró en diversas causas feministas y fue una de las primeras organizadoras de la iniciativa 'Time’s Up' después de que se destaparan los casos de abuso sexual y de poder en Hollywood. Coincidió precisamente con su preparación física para el rol de ‘Capitana Marvel’, lo que todavía le dio más fuerzas para entrenar y aprender disciplinas de defensa.

Contra los abusos

A lo largo de estos últimos años el activismo se ha convertido en una parte fundamental de su vida: Todos recordarán su gesto de desaprobación y la ausencia de aplausos cuando entregó el Oscar a Casey Affleck en 2017, después de que el actor hubiera sido acusado de agresión, ha denunciado la diferencia salarial entre hombres y mujeres en un Hollywood en el que todavía domina el heterocentrismo, ha lanzado constantes retos a los estudios para que haya más proyectos liderados por directoras y ha puesto de manifiesto la escasez de críticas de cine, imprescindibles para que el discurso de las películas no pasen únicamente por el criterio masculino, algo de lo que se ha asegurado personalmente en los junkets de presentación de ‘Capitana Marvel’.

Es fiel defensora de la sororidad femenina. Con su grupo de amigas va de excusión, patina, recoge setas o canta en el karaoke temas de Usher o Destiny’s Child. Ha mantenido una larga relación con el músico Alex Greenwald, pero al parecer, su compromiso habría finalizado recientemente. Volveremos a verla con el traje de Capitana Marvel en ‘Vengadores: Endgame’, pero también en su debut como directora de ‘Unicorn Store’, una comedia junto a Samuel L. Jackson, que tras pasar por el Festival de Toronto se estrenará próximamente a través de Netflix.