BUENAS PRÁCTICAS MUNICIPALES

Una quincena de municipios del Baix Llobregat incorporan proyectos locales al Banco de Buenas Prácticas

Gala de entrega de los certificados de buenas prácticas, el pasado jueves

Gala de entrega de los certificados de buenas prácticas, el pasado jueves / FMC

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Un total de 16 municipios de la comarca del Baix Llobregat recibieron el pasado jueves el certificado de buenas prácticas correspondiente al periodo 2014-2018, en reconocimiento por sus aportaciones al Banco de Buenas Prácticas (BBP) de la Fundació Pi i Sunyer.

Esta iniciativa, dedicada a la detección, sistematización y difusión de experiencias innovadoras, cuenta con la colaboración de la Federació de Municipis de Catalunya (FMC) y pretende promover la mejora y la innovación en los gobiernos locales, premiando aquellas acciones o iniciativas consideras como ejemplares.

Así, se enfoca especialmente en dar visibilidad a proyectos dedicados a contribuir en la reducción de desigualdades, la igualdad de género, el crecimiento económico o la erradicación de la pobreza, entre otros objetivos, que pasan a formar parte de este banco de ‘proyectos modelo’.

Una plataforma pionera que se ha convertido en un lugar de encuentro y de referencia entre los gobiernos locales, y que este año ha premiado las aportaciones de los municipios de Begues, Cornellà, Eparraguera, Esplugues, Gavà, Martorell, Molins de Rei, Olesa de Montserrat, Pallejà, El Prat, Sant Boi, Sant Feliu, Sant Joan Despí, Sant Just Desvern, Vallirana y Viladecans.

Representantes de estos y de los 81 municipios premiados durante el último periodo (2014-2018) recogieron el reconocimiento el jueves en el marco de una conferencia sobre innovación democrática y gobierno local, en la que participaron cerca de 450 personas, desde representantes locales hasta europeos.

Las contribuciones de Gavà y Esplugues

En el caso de Gavà, el certificado pone en valor varias iniciativas impulsadas por el municipio en los últimos cuatro años, como los programas ‘Made in Gavà’ o ‘Junts Fem Barri’, a través del cual los vecinos deciden sobre las actuaciones de mejora del espacio público a ejecutar sobre un presupuesto de medio millón de euros. Una iniciativa por la que el municipio opta además a la Copa España Creativa.

La Fundació distinguió también nueve contribuciones de Esplugues al BBP. Entre ellas, el Pacto para la Reactivación Económica y la Creación de Ocupación de Calidad, que aglutina 73 proyectos consensuados con los agentes sociales y económicos de la localidad para impulsar el sector comercial y promover el emprendimiento.

Además, el certificado también pone en valor otras iniciativas espluguenses, como la figura del ‘Agente tutor’, personificado en un policía local que previene hábitos de riesgo en centros educativos; el espacio Minuts Menuts del Complejo Deportivo La Plana, dedicado a facilitar la conciliación laboral; o el proyecto ‘Escola Sona’, de educación musical, entre otros.

Cinco iniciativas cornellanenses

Por su parte, Cornellà ha incorporado cinco proyectos al Banco de Buenas Prácticas, pertenecientes a diferentes ámbitos. En el deportivo, los proyectos ‘Vine a fer Esport Salut!’, que articula diferentes actividades deportivas gratuitas, y la Escuela Deportiva Social, un programa de extraescolares que fomenta un modelo social colaborativo de valores deportivos no competitivos.

En el ámbito de medio ambiente, el reconocimiento ha sido por la iniciativa ‘La festa del riu’, que contempla la revalorización y recuperación del río Llobregat y de su entorno natural. Y en el ámbito de participación ciudadana, por la plataforma digital de comunicación local ‘A prop teu’ (que repite) y por los Presupuestos Participativos.

Aportación a la transición energética

Por su parte, las aportaciones de Viladecans se han basado sobre todo impulso a la transición energética, capitaneado por el proyecto Vilawatt, así como el Presupuesto energético municipal o el fomento de la energía renovable, a través de la instalación de placas fotovoltaicas en las escuelas.

También se ha incorporado al BBP la recientemente exportada Red de Innovación Educativa de Viladecans, considerada ejemplo de buenas prácticas, así como el proyecto Imaile de aprendizaje en primaria y secundaria, o el programa de divulgación de la biodiversidad del municipio, entre otros proyectos.

En otra línea, las aportaciones samboyanas que han sido reconocidas por la Fundació Pi i Sunyer son el laboratorio cívico de emprendimiento y economia social ‘Coboi’, el proyecto de competición deportiva ‘Juega Verde Play’, que comparte con otros municipios, y el Observatorio de Ciudad.