Los escolares de primaria de Cornellà ya aprenden a programar

Aprender a programar es cada día una capacidad más esencial y por eso se ha incorporado a los currículums educativos, pero hasta el momento estos estudios y otros relacionados como la robótica forman parte de los cursos de secundaria. Pero no en todos los lugares es así. En las escuelas públicas de Cornellà, mediante el proyecto EduLab, una iniciativa de Citilab, esta barrera de edad ya se está rompiendo.

El programa Edulab, que cuenta con el apoyo del Ayuntamiento de Cornellà, tiene como objetivo impulsar la enseñanza de la programación como lenguaje transversal para entender y relacionarse con la tecnología y así conseguir que los niñas y niñas desarrollen pensamiento crítico y creativo. Porqué, para los creadores de este programa, en una sociedad digitalizada como la actual la programación para un ciudadano es equiparable a la escritura o las matemáticas.

El primer centro donde se ha puesto a prueba este programa ha sido la Escuela Dolors Almeda, con una prueba piloto que este año inicia la segunda etapa. También se han tejido las primeras relaciones y se ha trabajado con el Instituto de Cornellà y la Escuela Suris, a la espera de poder colaborar y apoyar a más centros educativos públicos de la ciudad para implementar estas metodologías innovadoras que enriquecen la actividad habitual en el aula, la tarea del profesorado y el aprendizaje del alumnado.

Trabajos realizados

Ejemplo de la aplicación de este programa de programación, EduLab, son los resultados y las aplicaciones optenidas. Los alumnos del Ciclo Medio y Ciclo Superior de la Escuela Dolors Almeda diseñaron y construyeron seis robots desmontables programados con Snap4Arduino, que posteriormente sirvieron para trabajar con los niños y niñas de Ciclo Infantil, Inicial y Medio.

Además, los niños de Ciclo Inicial y Ciclo Medio también participaron en el diseño conjunto de SnapJunior, una versión de la herramienta de programación por bloques Snap!, orientada a los más pequeños. Por otra parte, también se trabajó en la construcción de un dispositivo que mostraba el ruido de la clase para que los niños tomaran conciencia del mismo y poder autorregular el volumen de forma colaborativa, además de trabajar en el diseño de aplicaciones para mejorar la velocidad lectora del alumnado.

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