Comercio

Rabat deja atrás el socavón del covid y supera los 130 millones de euros de facturación en 2022

La empresa joyera incrementa por primera vez las ventas prepandemia y suma un 25% al volumen de negocio del año anterior

El plan para 2023 incluye volver a crecer a doble dígito y abrir dos nuevas tiendas monomarca, una de ellas en Barcelona

Jordi Rabat, presidente de Rabat

Jordi Rabat, presidente de Rabat / Rabat

Paula Clemente

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Objetivo más que cumplido. La empresa familiar de venta de joyas y relojes de lujo Rabat cierra 2022 con un volumen de negocio mayor al de antes del covid, un crecimiento a doble dígito respecto al año previo y habiendo logrado mantener el peso que el público local tiene en su negocio desde la pandemia, una de las grandes metas que se ponía la firma a comienzos de año.

Porque si bien antes de la irrupción del covid apenas cuatro de cada diez clientes eran españoles, ya el año pasado la proporción se invirtió completamente, una tendencia que el presidente de este grupo familiar da por consolidada una vez analizada la radiografía de 2022. La compañía ha facturado aproximadamente 132 millones de euros, un 25% más que en 2021 y un 12% más que en 2019. De este volumen, un 72% corresponde a ventas al público nacional, un porcentaje que implica prácticamente duplicar lo que facturaba gracias al cliente nacional hace tres años.

"Hemos notado que al cliente le gusta regalar algo que tenga valor", sostiene el presidente de la compañía, Jordi Rabat, quien confiesa haber percibido ya cierta recuperación del cliente americano y, sobre todo, europeo, pero sentirse más cómodo con el vínculo creado con el público local. "Es donde más valor podemos aportar", resuelve el mismo.

En este contexto, el beneficio operativo de la empresa (el que no tiene en cuenta todavía los impuestos o las amortizaciones, entre otros gastos contables) ha ascendido también un 50% hasta los 12 millones de euros.

Según las cifras expuestas este martes por el empresario, crecen los ingresos procedentes de todas las líneas de negocio (joyas, relojes, tiendas propias, 'boutiques' de una marca en exclusiva...), la única excepción es el canal digital. Pese a que ésta era una de las grandes apuestas del grupo para el año, ver que no conseguían vender a más de un 1% de las personas que visitaban su web les ha convencido de centrar sus esfuerzos en la venta en tienda física. Es decir que Rabat ya no vende 'online'.

Plan para 2023

De hecho, los planes para 2023 pasan esencialmente por mejorar su red de establecimientos. La compañía ampliará sus tiendas en Valencia, Tarragona y Barcelona (en esta última, el local estrella de la marca ganará 200 metros cuadrados), hará trabajos de adecuación en la de Madrid y abrirá dos nuevos puntos monomarca, es decir dedicados en exclusiva a una sola marca, al estilo de la 'boutique' Rolex que el grupo tiene, por ejemplo, en la capital española y que ha sido uno de los grandes dinamizadores del mercado madrileño este último año. Aunque todavía prefieren mantener oculto de qué marcas serán, Rabat avanza que estas dos nuevas tiendas se situarán en Valencia y en Barcelona, también en el Passeig de Gràcia.

En cuanto al objetivo financiero, la idea es mantener este año el crecimiento a doble dígito, pero este girará más previsiblemente en torno al 10% que al 25% registrado este último año. En definitiva, ha concluido el presidente de la empresa, "seguir creciendo de esta forma, pero siempre centrados en la excelencia de cara al cliente".