PLAN DE ACCIÓN

Áltima apuesta de manera decidida por la sostenibilidad

La empresa de servicios funerarios desarrolla en su Plan de Acción de Sostenibilidad Corporativa del 2020 los cinco compromisos estratégicos que vertebran su actividad

Fauna propia del cementerio de Roques Blanques

Fauna propia del cementerio de Roques Blanques / periodico

F. L. Amado

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En los últimos tiempos, velar por la sostenibilidad ha dejado ya de ser una opción en las compañías para convertirse en uno de los ejes vertebradores de las estrategias empresariales. Y en este sentido, cabe destacar que se trata de un concepto que va mucho más allá de la lucha contra el cambio climático, como se podría pensar en un primer momento, abarcando a diferentes ámbitos y grupos de interés.

Una buena muestra de ello es el trabajo que viene realizando la compañía de servicios funerarios Áltima, que desde el año 2018 fijó la sostenibilidad como su eje estratégico para lograr responder a las nuevas demandas ciudadanas. Además, apoyados en esta idea, pretenden ayudar a conseguir un uso eficiente de los recursos limitados y ahorrar costes; adaptarse a los nuevos marcos legislativos, y aprovechar las posibilidades de crecimiento generadas a partir del impacto positivo, la diferenciación, la competitividad e innovación, y los nuevos mercados.

Impacto positivo

Según explican desde Áltima, la sostenibilidad es el logro de un propósito de generación de impacto positivo que desarrolla valor social, ambiental y económico para todos los grupos de interés, desde el modelo de negocio hasta los objetivos específicos, las operaciones y los indicadores. Por tanto, no es de extrañar el nivel de detalle de su Plan de Acción de Sostenibilidad Corporativa 2020, que expone sus cinco compromisos estratégicos, que dan lugar a su vez a 12 objetivos corporativos y 17 ámbitos de actuación, sin olvidar que ascienden a 36 las iniciativas activas por parte de la compañía.

Como no podía ser de otro modo, el acompañamiento a las familias es el primero de los compromisos estratégicos de la empresa, que deriva en cuatro objetivos operativos en torno a los que han desarrollado 17 iniciativas sostenibles. Ofrecer un servicio funerario integral y humano sería uno de esos objetivos, con una apuesta convencida por su sistema de contratación Assessora y otras herramientas digitales que facilitan los trámites a familiares y allegados. El segundo de los objetivos sería acompañar a las familias en el tránsito a la muerte, el duelo y el recuerdo de las personas, para lo cual ofrecen servicio psicológico especializado, así como talleres y grupos para mitigar el dolor y superar juntos el duelo.

Por otra parte, también buscan contribuir a la generación y difusión de conocimiento relacionado con la muerte con vistas a facilitar su comprensión. Por ejemplo, a través de la Tanatopedia, una enciclopedia virtual que está disponible en su web, o el patrocinio de la cátedra WeCare: Atención al final de la vida, entre otras iniciativas. Por último, en este apartado también se han fijado como objetivo contribuir a mejorar la calidad e innovación del sector, con la puesta en marcha del Centro de Conocimiento como proyecto estrella, la organización de su Jornada Anual para profesionales, en colaboración con la Universitat Internacional de Catalunya (UIC), o el mantenimiento del apoyo y patrocinio del Fórum Panasef.

Respeto medioambiental

En este segundo compromiso estratégico tendríamos que resaltar el papel que juega la corrección y eficiencia en la gestión medioambiental por parte de la compañía. Así, desde Áltima continúan actualizando los datos anuales respecto a su huella de dióxido de carbono, a la vez que se esfuerzan por optimizar el consumo energético. En este ámbito, un estudio sobre el consumo del agua les ha permitido obtener una bonificación de la Agència de l’Aigua.

Por otro lado, la compañía también ha puesto el foco en la oferta de unos servicios y productos que sean respetuosos con el medio ambiente. Al respecto, a los proyectos ya en marcha (como el Bosque de la Calma, el Árbol Familiar, el Camino del Bosque…) se suman otros centrados en la protección de la flora y de la fauna autóctonas, en colaboración con diferentes entidades, así como el impulso del convenio de colaboración en la promoción de acciones de conservación y potenciación de la biodiversidad y la divulgación del medio natural del Delta del Llobregat.

Del mismo modo, desde Áltima demuestran cada día su defensa del medioambiente con iniciativas como la incorporación de vehículos eléctricos a su flota de coches fúnebres, la elaboración de un catálogo de féretros y urnas ecológicos, o la disminución de su consumo eléctrico en un 5% respecto a los datos del 2018.

Servicios de proximidad

El tercero de los compromisos apunta directamente a la aportación de beneficios al entorno geográfico más próximo. Algo que consiguen ofreciendo servicios locales, cercanos a las personas e instituciones vecinas. Entre sus objetivos figura colaborar con las entidades locales para maximizar el valor social, para lo cual han fijado la elaboración de un plan de acción comunitaria que sustente proyectos de colaboración y voluntariado.

Asimismo, la compañía muestra su deseo de continuar efectuando donaciones a entidades próximas (como Cáritas Diocesana en Sant Feliu del Llobregat o Fundación Make a Wish, entre otras) y colaborando con más de 15 instituciones y fundaciones del entorno cercano con quienes viene trabajando conjuntamente.

Gobernanza responsable

ste cuarto pilar de la compañía de servicios funerarios muestra el fiel compromiso que existe desde Áltima por llevar a cabo una gestión empresarial responsable, informada, ética y transparente. Muestra de ello es su adhesión al Código de Buenas Prácticas de las empresas funerarias de Catalunya o la elaboración del suyo propio.

Además, la firma persigue formalizar una política de contratación con criterios de proximidad e inclusión, comprendiendo convenios de colaboración ya en marcha con entidades sociales, sin olvidar el fomento de una cadena de aprovisionamiento responsable que incluya criterios sociales y medioambientales en el proceso de selección y homologación de proveedores.

Desarrollo personal

El último de los compromisos de Áltima se refiere a las oportunidades de desarrollo tanto personal como profesional que existen dentro de la empresa. De ahí la apuesta decidida que hacen por un espacio laboral que sea inclusivo, que motive a los profesionales y que permita la participación. Para alcanzarlo, desde la compañía han lanzado iniciativas como los Premios ÁLTIMA Crea Millor’ o la realización de una evaluación anual del rendimiento. Además, no hay que olvidar también la continuación y potenciación del Plan de formación anual personalizado, que permite obtener formación técnica específica para el puesto de trabajo, habilidades, gestión emocional, medio ambiente y seguridad.

En definitiva, toda una colección de iniciativas que refrendan el firme y convencido compromiso de Áltima con la sostenibilidad, ya sea desde lo social, lo ambiental o lo económico.