Estudio científico

Los perros pueden oler cuando estamos estresados

Un estudio demuestra que los perros son capaces de detectar las señales químicas del estrés solo mediante el olfato

El estudio sugiere que “la producción de lágrimas de los perros ayuda a forjar conexiones más fuertes entre las personas y sus perros”

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Los perros pueden detectar con una precisión superior al 90% cuando un humano está estresado. Este fenómeno, según detalla un nuevo estudio científico publicado este miércoles en la revista 'PLOS ONE', se debe a la capacidad de estos animales de percibir las "señales químicas", los olores y los cambios fisiológicos asociados a momentos es estrés agudo. 

Para comprobar el mecanismo exacto detrás de este 'superpoder' perruno, los investigadores recolectaron muestras de aliento y sudor de 36 personas antes y después de pasar por una tarea estresante. A partir de ahí se colocaron las muestras ante cuatro perros de diferentes razas y se les pidió que identificaran cuáles venían de personas estresadas y cuáles pertenecían a personas en estado de reposo.

Según apuntan los resultados de este experimento, los animales lograron completar la tarea con éxito en 675 de las 720 pruebas realizadas. Todos los perros lograron dar en el clavo en más del 90% de los casos. Algunos, más avispados, incluso consiguieron más de un 96% de aciertos. Esto demostraría que, más allá del 'mito', esta capacidad de los perros para detectar el estrés responde a un mecanismo biológico.

"La investigación destaca que los perros no necesitan señales visuales o de audio para detectar el estrés humano. Este es el primer estudio de este tipo y proporciona evidencia de que los perros pueden oler el estrés solo con el aliento y el sudor, lo que podría ser útil al entrenar perros de servicio y perros de terapia", explica la investigadora Clara Wilson de la Universidad de Queen, una de las expertas que ha liderado este trabajo.

Uno de los perros que ha participado en el estudio mientras olfatea una muestra.

Kerry Campbell

El equipo responsable de este estudio argumenta que, probablemente, este fenómeno se debe a varias razones. Por un lado, a la capacidad de los perros de "detectar cambios en los compuestos orgánicos volátiles producidos por los humanos en respuesta al estrés". Y por el otro, es probable que la estrecha historia de domesticación y convivencia de estos animales con nuestra especie los haya preparado para estar al tanto de este tipo de cambios.

Más allá de lo entrañable que nos pueda parecer la capacidad de los perros para percibir nuestro estrés, los científicos recuerdan que demostrar el funcionamiento de este fenómeno es muy importante. "Gracias a esto, estos animales pueden ayudar a personas con ansiedad, ataques de pánico o trastorno de estrés postraumático (TEPT)", recalcan los investigadores que han liderado esta investigación.