Con el horario de verano, el sol saldría a las 9:15 en enero en Barcelona

La propuesta de la Comisión Europea de mantener indefinidamente el horario de verano que tenemos actualmente y eliminar el de invierno empezaría a notarse el 28 de octubre, día oficial del cambio horario y en el que ya no se tendrían que retrasar las manecillas del reloj ni tampoco tendríamos una hora más para dormir. No obstante, es muy probable que este próximo otoño aún debamos seguir haciendo el tradicional cambio de hora, ya que la propuesta de Bruselas aún debe ser aprobada por el Parlamento Europeo y posteriormente ratificada por los respectivos países miembros, por lo que el margen de tiempo para implementar este cambio sería muy escaso. 

¿Pero qué implica cambiar o no de hora? En el horario de invierno nos situamos a una hora más respecto del conocido como Tiempo Universal Coordinado (UTC), la convención internacional estándar de tiempo. En cambio, en el horario de verano permanecemos a dos horas más respecto a la UTC. Un cambio que, sea cual sea la convención horaria, no afecta en absoluto al número de horas de sol disponibles durante el día. Tan solo cambiaría el acuerdo por el cual se determina qué hora es en un determinado espacio y tiempo.

La propuesta de suprimir el cambio estacional reabre el debate sobre el huso horario de España

Poniendo como ejemplo la ciudad de Barcelona, si se mantiene el horario de verano (+2 UTC), el día 21 de diciembre (solsticio de invierno) el sol saldría a las 9:15 horas y se pondría a las 18:25. Si se volviera al horario de invierno (+1) o se decidiera cambiar el huso horario y adaptarlo al de Londres y Canarias y no al de Berlín, el sol saldría a las 8:15 y se pondría a las 17:25. En ambos casos, ese día tendremos 9 horas y 10 minutos de sol.

El sol en días clave

El día 12 de septiembre, inicio del curso escolar en Catalunya, el sol saldrá a las 7:29 de la mañana (y lo haría una hora más tarde si ya se hubiera aplicado la propuesta de Bruselas). A partir de entonces, esa jornada contará con 12 horas y 38 minutos de sol que llegarán a su ocaso a las 20:08 horas, momento del atardecer.

Si el cambio se acabara aprobando antes del día 28 de octubre y España aceptara mantener el horario de verano (un debate que sigue abierto) así quedarían las horas en Barcelona de algunos de los días más señalados del año:

El día de la castanyada y de Halloween (31 de octubre del 2018), con el actual horario de verano el sol saldría a las 8:21 y se pondría a las 18:48. Si volvemos al horario de invierno, el amanecer sería a las 7:21 y el atardecer a las 17:48, por lo que la noche de celebración empezaría antes.

El esperado día de los Reyes Magos (6 de enero del 2019), con el horario de verano el sol saldría a las 9:18 y se pondría a las 18:37, atrasando la apertura de los regalos una hora más respecto a lo habitual. Pero si se pasara al de invierno, los pequeños de la casa podrían abrir los regalos a las 8:18, momento en el que saldrían los primeros rayos de sol, y tendrían hasta las 17:37 para disfrutar del día.

La vuelta al horario de verano se produciría el 30 de marzo del 2019, día en el cual tendríamos que adelantar las manecillas del reloj una hora y tendríamos una hora menos de sueño.

El día de Sant Jordi (23 de abril de 2019), con el horario de verano el sol saldría a las 07:01 y se pondría a las 20:40. Con el horario de invierno el amanecer del día de los libros tendría lugar a las 6:01 y el atardecer a las 19:40.

El día de Sant Joan (24 de junio de 2019), con el horario de verano el sol saldría a las 06:19 y se pondría a las 21:29. Con el de invierno, el amanecer del día más corto del año sería a las 5:19 y el atardecer tendría lugar a las 20:29.