Obama asegura que EEUU habrá llegado a Marte en el 2030

El presidente anuncia que el Gobierno trabajará con empresas privadas con ese objetivo

Imagen de la superficie del planeta rojo.

Imagen de la superficie del planeta rojo. / ESA ik ana

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Seis años después de anunciar su intención de enviar misiones tripuladas a orbitar alrededor de Marte, Barack Obama ha relanzado sus planes para hacer realidad la llegada al planeta rojo. En un artículo de opinión publicado en la web de CNN, el presidente de Estados Unidos ha vuelto a fijar la fecha del 2030 como objetivo para cumplir la misión, un proyecto en el que será indispensable la participación de la empresa privada. “Llegar a Marte requerirá la continua cooperación entre el Gobierno y los innovadores privados, y vamos bien encaminados”, ha escrito Obama. Su optimismo contrasta, sin embargo, con el de algunos expertos, que han acusado a su Administración de negar a la exploración espacial los fondos necesarios.

Bajo su presidencia, la NASA ha vivido una época de transición. Obama ha priorizado la investigación sobre del cambio climático a las misiones de exploración y ha abierto la puerta a las iniciativas aeroespaciales público-privadas. Un ejemplo son los viajes hasta la Estación Espacial Internacional que, tras la jubilación del transbordador espacial en el 2011, se han encargado a las compañías comerciales. En los próximos dos años, ha dicho Obama, estarán listas para volar regularmente a la Estación Internacional. La cooperación con el capital privado también se refleja en los contratos concedidos a seis empresas para que diseñen "hábitats" que hagan posible la vida humana en el espacio exterior. Entre ellas están la Blue Origin del fundador de Amazon, Jeff Bezos, y la Space X de Elon Munsk, que hace unas semanas anunció sus planes para llegar a Marte antes que la Nasa.

“Estas misiones nos enseñarán cómo pueden los humanos vivir lejos de la Tierra, algo que necesitamos para nuestro largo viaje a Marte”. El planeta rojo está a 56 millones de kilómetros de la Tierra y, según los expertos de la Nasa, se requerirían entre 130 días y nueve meses para llegar hasta allí.

Obama no será el presidente que lleve a EEUU a Marte porque le queda menos de medio año en el cargo, pero el mandatario quiere que su nombre quede en los anales como el impulsor de ese sueño de generaciones de científicos aeroespaciales. “Hemos fijado un claro objetivo para el próximo capítulo crucial en la historia de EEUU en el espacio: enviar humanos a Marte para la década del 2030 y devolverlos sanos a la tierra, con la ambición última de que puedan quedarse allí por prolongados espacios de tiempo”. Numerosas voces, sin embargo, han puesto en duda que pueda conseguirse bajo las condiciones actuales.

La Oficina de Responsabilidad Gubernamental ha advertido en varios informes de que será muy complicado a menos que aumenten sustancialmente los fondos para la NASA. Su antiguo director, Mike Griffin, fue todavía más tajante hace unos meses. “La visión que la actual Administración tiene del futuro de nuestra nación en el espacio no ofrece sueños, ni visión, ni plan, ni presupuesto o siquiera remordimientos”, dijo en febrero. Griffin estuvo al frente del organismo entre 2005 y 2009.