Volta a Catalunya: Roglic y Evenepoel empatan en su segundo duelo

Esteban Chaves, el ciclista colombiano de la eterna sonrisa, buscaba un imposible, algo tan irreal como sorprender a esta pareja de insaciables formada por Primoz Roglic y Remco Evenepoel. Mikel Landa, el corredor que ha creado en torno suyo una religión denominada ‘landismo’, probaba de atacar a dos kilómetros de la cima de Vallter 2.000. Solo abrían el fuego, disparos al aire, porque cuando Evenepoel cambia el ritmo estalla la revuelta, aunque en la primera meta en alto de la Volta, el italiano Giulio Ciccone, un escalador rápido en las llegadas, les birlaba la victoria.

Era la primera de las tres cimas de la ronda catalana, seguramente un territorio para vigilarse, para ver cómo están todos sin tener que mover aún el árbol para comprobar si algún favorito estaba maduro como el fruto que cae al suelo. Roglic se mantuvo a la retaguardia y Evenepoel quiso iniciar lo que se podría denominar una especie de ofensiva tranquila. Ellos vieron, en cambio, que si aceleraban solo un sorprendente Ciccone los seguía. A Landa le faltaba un poco, no mucho la verdad, pero suficiente para que el corredor alavés viese que posiblemente el podio, más que la victoria, puede ser su objetivo, siempre en el supuesto de que Ciccone sea flor de un día, un ciclista que pelea por etapas, que ha sido líder del Tour, pero que siempre se olvida de luchar por las clasificaciones generales.

Y la victoria en Barcelona es sin duda el objetivo de Roglic, siempre líder, y de Evenepoel, que ya ha cedido en dos días seis segundos, que no son gran cosa, pero un minúsculo puñado de tiempo que en carreras de una semana igual al final puede ser decisivos.

Ojo a la etapa de este miércoles

Pronto ha llegado la montaña porque la Volta no es una ronda de 21 días y en una semana se resuelve todo. Xavier Florencio, director del Bahrein y por lo tanto de Landa, repasaba el recorrido de la etapa en la salida y los otros dos días de montaña previstos en el menú. “Solo se puede trabajar como equipo camino de La Molina. Ahí sí que hay territorio para tratar de aislar a ciclistas como Roglic y Evenepoel. En Tortosa llegarán todos juntos a pie de puerto donde ganará el más fuerte”, explicaba el técnico catalán. De hecho, es el único día para que una escuadra potente como el Bahrein trate al menos de buscarle las cosquillas a los equipos de Roglic y Evenepoel. Pero luego tiene que responder Landa y da la sensación de que el ciclista esloveno y el campeón del mundo son algo así como un muro infranqueable para el corredor alavés.

Por lo tanto, habrá que esperar a lo que ocurra este miércoles en La Molina y, sobre todo, en La Creueta que puede ser una especie de encerrona muy peligrosa si alguno, o mejor dicho su equipo, anda un poco despistado camino de la estación de esquí de la Cerdanya.