Etapa 5 Volta Catalunya 2022: Almeida arrebata el liderato a Quintana en una meta volante

Un segundo separa al primero del segundo y 18 del líder al sexto clasificado. No hay nada resuelto y solo quedan dos días para que finalice una Volta que deberá definirse entre el terreno de este sábado por tierras tarraconenses cargado de continuas trampas y repechos y las seis ascensiones del domingo al castillo de Montjuïc.

¿Quién lo iba a imaginar? Seguramente nadie pensaba que la estampa más bella de la quinta etapa de la Volta se pintaría en una meta volante, en el pantano de Foix. Todos a 60 por hora, jugándose el tipo casi como si fuera el esprint final en los Campos Elíseos. Como si quisieran conquistar tierra enemiga, todo por tres, dos y un segundo, apenas una bocanada de aire, pero un tiempo pequeño en el espacio pero enorme cuando puede valer la victoria final en la Volta.

Lo sabía Nairo Quintana y también el Emirates, con su jefe Joâo Almeida, y con Juan Ayuso, protegido y en tiempo asimismo de disputar la victoria por si falla, o mejor dicho por si se descoloca, su compañero portugués, el nuevo líder de la carrera, el que arrebató el jersey verdiblanco por un segundo tras una pelea titánica a ritmo de esprint especial. Esta meta intermedia produjo un mejor espectáculo que el que se vio en la llegada de Vilanova i la Geltrú donde ganó el británico Ethan Vernon.

Nadie que quiera ganar en Barcelona se puede descuidar porque cada esprint especial, como se denominan ahora a las metas volantes, puede ser determinante. Este sábado hay dos programados, en Prades y en el Viaduct dels Masos, que valen su peso en oro, como si se tratasen de la mejor de las subidas ciclistas. Y el domingo aparecen otros dos antes de llegar al circuito final por la montaña de Montjuïc, en Molins de Rei y luego en Castelldefels.

El Emirates juega con ventaja, solo un segundo, pero es un pequeño margen que les permite actuar a la defensiva, entre Almeida y Ayuso, con Marc Soler y Rui Costa, preparados para el zafarrancho de combate. Quintana debe arriesgar. El veterano corredor de Boyacá no es ni mucho menos lento y tiene la experiencia de saber colocarse. Pero el potencial del UEA es abrumador. Terreno hay para restar ese segundo, para dar guerra, sobre todo si amenaza la lluvia este sábado, tal como está previsto y con territorio comanche para emboscadas, un dibujo totalmente distinto al vivido camino de Vilanova, prácticamente una bajada desde los Pirineos donde el pelotón ha permitido kilómetros de gloria a tres ciclistas que trataron de reivindicarse con una escapada: Joel Nicolau, de Palafrugell; Urko Berrade, de Pamplona, y Gotzon Martín, un vizcaíno de Orozko.