'monumento' ciclista

Alejandro Valverde se va al asalto de Flandes

El campeón del mundo, con casi 39 años, descubre este domingo la gran clásica belga de los adoquines

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Sergi López-Egea

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Eddy Merckx durante su dominio repartía sus victorias y se dejaba querer por los belgas, más allá del idioma o la religión, flamencos o valones, y más allá de las dos grandes 'clásicas' ciclistas que movilizan a todo un pueblo durante dos domingos del mes de abril. En dos ocasiones ganó 'El Caníbal' el Tour de Flandes (este domingo, Eurosport, 13 horas) por cinco victorias conseguidas en la Lieja-Bastoña-Lieja, la 'Doyanne', la más antigua de cuantas grandes pruebas de un día se celebran en el planeta ciclista.

Para un flamenco no hay mayor carrera que el Tour de Flandes, creado en 1913, y que este domingo acoge en su seno a todo un campeón del mundo, Alejandro Valverde, quien debuta en una carrera que llevaba años, muchos años, queriendo disputar pero que por diferentes circunstancias de calendario jamás hasta ahora había podido correr. Vistiendo el jersey de arcoíris, el que lo identifica como campeón del mundo, parte entre los favoritos, lo cual tampoco es una circunstancia extraña porque allá donde vaya el ciclista murciano del Movistar siempre es un candidato a la victoria.

Conseguir el triunfo en Flandes no es tarea sencilla, ni mucho menos. No se trata de llegar y poner una pica en Flandes, como si nada, recoger la victoria, dirigirse hacia el aeropuerto de Bruselas y regresar a España. Flandes hay que conocerlo, hay que haberse enfrentado a los tramos de adoquines, tan o casi tan salvajes como los de la París-Roubaix, pero con el añadido de que en Francia no hay muros y en Flandes, sí, con cuestas corta pero asfixiantes y, además, plagadas de adoquines donde el corredor se desequilibra, donde se clava la bici y donde en muchas ocasiones hay la necesidad de poner pie a tierra.

Y eso bien lo sabe Valverde. "Temo más a la tensión que a los adoquines y por lo tanto debo reconocer que tengo un 90 por ciento de posibilidades de no ganar la carrera. Hay que conocerla y yo no la he corrido nunca pero ganarla sería algo increíble", ha afirmado el campeón del mundo en una entrevista concedida a la revista 'Ciclismo a Fondo'.

Nada menos que 270 kilómetros -que hay que hacer en bici y no en coche y a un promedio superior a los 40 kilómetros por hora, agárrense que vienen curvas- aguardan hoy al campeón murciano; sin duda, el mejor 'clasicómano' surgido de las entrañas del ciclismo español. Cuenta con cuatro victorias en Lieja, cinco en la Flecha Valona, dos en la Clásica de San Sebastián al margen de diversos podios. Ha sido en dos ocasiones segundo en la Amstel Gold Race y otras dos veces ha llegado en segunda posición en el Giro de Lombardía.

Los favoritos

De ahí que en Flandes, en Bélgica, lo hayan acogido con los brazos abiertos y enseguida lo hayan situado también en el exclusivo club de ganadores. Este domingo, aparte de los 270 kilómetros, tanto Valverde como el resto de participantes, deberán superar 13 tramos de adoquines o 'pavés' y 17 muros, 10 de ellos provistos de piedras; entre ellos, los famosos Kapelmuur, Muro de Grammont y Koppenberg.

Flandes forma parte del quinteto de 'clásicas' consideradas como 'monumentos' junto a la Milán-San Remo, la París-Roubaix, la Lieja-Bastoña-Lieja y el Giro de Lombardía. Fue Juan Antonio Flecha, ahora comentarista de Eurosport, el único corredor español que ha conseguido subir al podio de esta carrera con una tercera plaza lograda en el 2008.

Valverde, en su debut, deberá estar pendiente de corredores como Alessandre Kristoff, Peter Sagan, Philippe Gilbert, Niki Terpstra (último ganador), Zdenek Stybar, Greg van Avermaet o Mathieu van der Poel, el nieto de Raymond Poulidor.