EL CATALÀ DE L'ANY

Ona Carbonell, la nadadora que alcanzó a Mengual en sus sextos Mundiales

La barcelonesa suma ya 20 medallas en campeonatos universales y 34 en total

Ona Carbonell.

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Joan Carles Armengol

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El año 2017 fue un buen año para Ona Carbonell. Quizá no el mejor de su vida deportiva (la nadadora no podrá olvidar nunca las dos medallas olímpicas, una de plata y otra de bronce, en Londres 2012), pero sí que fue un buen ejercicio. Con las dos platas que logró en las pruebas de solo técnico y solo libre en Budapest, elevó a 20 las medallas logradas de forma consecutiva en seis Mundiales. La cifra es monumental. Igualó los podios de la legendaria Gemma Mengual en torneos universales y, con un total de 34 medallas, está ya pisando los talones de la propia Mengual (39) y de Andrea Fuentes (36) –ambas retiradas- como la nadadora española más laureada en la historia de la natación artística (nueva denominación oficial de la sincronizada).

"Estar seis Mundiales seguidos en el podio me llena de orgullo. Es muy difícil mantenerse"

Ona Carbonell

— Nadadora

"Cuando gané la segunda medalla de plata en Budapest los periodistas me dijeron que había igualado a Gemma. Ni siquiera lo sabía. Pero me gustó mucho, no tanto por haber igualado su récord sino porque te das cuenta de que es el fruto de muchos años trabajando y compitiendo al más alto nivel. Fue una oportunidad de mirar atrás y darme cuenta de los muchos años, y muy buenos, que llevo en este deporte".

Desde luego que son muchos. Porque la barcelonesa Ona Carbonell, que el próximo 5 de junio cumplirá 28 años, entró con 15 en la selección española, y desde entonces ha estado en dos Juegos Olímpicos (2 medallas), cuatro Campeonatos de Europa (12 medallas, 4 de ellas de oro) y seis Mundiales (20 medallas, una de oro), recogiendo perfectamente el relevo de Mengual y Fuentes en una modalidad marcada por el traumático despido de Anna Tarrés como seleccionadora poco después de los Juegos del 2012.

Las mejores se adaptan

"Si algo me ha demostrado este 2017 es que es muy difícil llegar, pero más difícil es mantenerse. Estar seis Mundiales seguidos en el podio es algo que me llena de orgullo", asegura Carbonell, una deportista modélica y persona poliédrica que dirige sus múltiples intereses también a diversas actividades fuera de la piscina. Pero, dentro de ella, ha elevado a la enésima potencia una de las máximas que sigue a rajatabla. "Los buenos se quejan y los mejores se adaptan". Esa capacidad de adaptarse, de superación, es lo que la ha llevado a mantenerse durante 13 años en la cresta de la ola, sea con Tarrés, con Esther Jaumà y, desde esta temporada, con la japonesa Mayuko Fujiki, seleccionadora de un equipo totalmente rejuvenecido.

"Yo soy la mayor, con mucha diferencia. La siguiente, con 24 años, es Meritxell Tomàs, y luego ya está Paula Ramírez. Las demás chicas son muchos más jóvenes, y yo ya me siento vieja entre ellas”, afirma Ona entre risas. Vieja puede ser, pero acabada, nunca. La nadadora tiene mucho futuro por delante, con tres objetivos claros: el Europeo de Glasgow de este verano, los Mundiales de Corea del Sur del año que viene y, cómo no, sus terceros Juegos Olímpicos, los de Tokio 2020.

"Las medallas son un objetivo, pero no el único. El verdadero objetivo es ir creciendo y aprender cada día para ser mejor nadadora", asegura. Y, tras un 2017 intenso, quiere tomarse este 2018 con un poco más de tranquilidad. "Ya no tengo 14 años, debo recuperar el cuerpo, ir al fisio, recobrarme a nivel mental… En definitiva, cuidarme, pero sin dejar de transmitir mis conocimientos a este equipo tan joven. Y aprovecharé también para mejorar la técnica, que es lo que peor llevo". Pese a esas palabras, no renuncia desde luego a seguir acumulando medallas, en el Europeo de Glasgow, y luego en las citas mayores de Corea y Japón.

Radiografía

<span style="font-size: 1.6rem; line-height: 2.6rem;">La figura de Ona Carbonell no se limita a las piscinas. Es un personaje ubicuo, con una inquietud enorme por explorar nuevos terrenos y vivir nuevas. "Tengo un mundo interior muy vivo", aseguró cuando publicó su primer libro, ‘Tres minutos y cuarenta segundos’ (lo que dura un programa libre en natación) hace casi dos años. "Me gusta aprovechar las oportunidades que me da la vida y aprender de todo", asegura.</span>