8 terrazas nuevas en Barcelona para saborear el verano

El verano barcelonés se vive al aire libre. Y con el calor llegan también las aperturas más esperadas: terrazas que invitan a comer sin prisa, a beber con estilo y a mirar el cielo sin necesidad de plan. Este 2025, la ciudad suma nuevas direcciones que reflejan distintas formas de entender el verano. Todas con personalidad, todas con vistas.

Arte, gastronomía y una buena panorámica en el Born

El Hotel Borneta estrena 180º Rooftop Bar (paseo de Picasso, 28), un espacio íntimo y versátil con vistas al parque de la Ciutadella. Su carta se basa en platillos para compartir -croquetas, 'focaccias', tartares- y una coctelería de baja graduación que apuesta por sabores equilibrados como el Brisa Ahumada, el Negroni Mediterráneo o un Espresso Martini reinterpretado. Todo se complementa con una programación de eventos que combina música, arte y producto local. Abre hasta las 8 de la tarde.

Cocina nocturna bajo las estrellas

Alení (Nou de la Rambla, 174), en el patio interior del Hotel Brummell, propone lo que su fundadora, Seyma Ozkaya (grupo Funky), define como "cocina nocturna": platos sensuales y sabrosos servidos solo por la noche, de jueves a domingo, a la luz de las velas. El menú, con claras influencias de Oriente Medio, incluye gambas fritas, cordero especiado o trucha con hoja de parra frita, entre otros. Una terraza íntima, sin artificios y llena de carácter.

El sabor del Mediterráneo, según los hermanos Torres

Eldelmar (Moll del Gregal, Local 3 del Balcón Gastronómico del renovado Port Olímpic), el nuevo proyecto de los hermanos Sergio y Javier Torres, rinde homenaje a la cocina mediterránea. Ingredientes de proximidad, mínima manipulación y platos pensados para el disfrute: 'suquet' de rape, 'rossejat' en lata, bravas con 'toque Torres', costillas de cordero, bacalao... El plan se completa con sobremesa en barra y vistas al mar, desde el mediodía hasta la noche.

Un oasis con vistas a la plaza de Catalunya

En la octava planta del Hotel ME Barcelona, Furtivo (Casp, 1-13) se erige como un refugio vibrante y contemporáneo en pleno corazón de la ciudad. Con vistas a la plaza de Catalunya, esta azotea combina sesiones de música en directo, piscina, experiencias de 'wellness' y una carta de cócteles de autor. También propone picoteo ligero y bebidas alineadas con las nuevas tendencias de consumo, como cócteles sin alcohol y con colágeno. Un lugar para desconectar sin perder el ritmo de la ciudad.

Sostenibilidad con música y conciencia en el Balcón Gastronómico

Superlocal (Moll del Gregal, Local 5) presume de la terraza más grande del Balcón Gastronómico del Port Olímpic y una carta basada en producto de cercanía. Trabajan con proveedores ubicados a menos de 100 kilómetros el restaurante y sus platos lo cuentan: bolitas de gambas, croquetas de remolacha y queso Blau Ceretà, 'paccheri' con 'stracciatella'. El entorno, cubierto de vegetación, es perfecto para alargar la tarde. Cada fin de semana, de 18.00 a 21.00 horas, celebran el 'Sunsets & DJ Sets', con música en directo y cócteles creativos.

Dos formas de disfrutar del Mediterráneo en el Port Fòrum

El recién inaugurado Hotel SLS Barcelona (Pau, 2) debuta con dos terrazas que reflejan estilos complementarios. Lora apuesta por una cocina con sabores que viajan de Barcelona a Beirut, preparados al horno de leña y parrilla de carbón, en una terraza elegante frente al puerto. A su lado, L'Anxova Divina rinde homenaje a la tapa barcelonesa en un espacio lúdico y soleado, diseñado por Avroko e inspirado en Gaudí. En su carta: anchoas, tortillas, croquetas, pimientos de padrón. Dos conceptos, un mismo placer: el de saborear el Mediterráneo al aire libre.

La Barceloneta, con un pisco a mano y vistas al mar

Coya, que se inspira en la cultura inca y el espíritu de América Latina, reabre su terraza en el Hotel W frente a la playa de la Barceloneta con una novedad: la 'pisco hour': de martes a sábados, de 17.00 a 19.00 horas, los clientes podrán disfrutar de una selección de cócteles de autor acompañados de una tapa cortesía. Son, en su mayoría, tragos de sabores peruanos con un giro contemporáneo. Clásicos reinventados como el mojito de 'shiso' con pisco y manzana, el Beso Rojo (inspirado en el Martini de lichi), el Pancha-Inca (con guanábana y lulo) y propuestas sin alcohol como la tradicional Chicha Morada o el creativo I'm Not a Pornstar.

Montjuïc regresa a su mejor pasado

La Font del Gat (paseo de Santa Madrona, 28) ha recuperado su esencia en la colina de Montjuïc con una terraza que evoca el ambiente de una plaza de pueblo, con lucecitas, mesas de madera y pista de petanca. Es un lugar pensado para el vermut sin prisa, la cena tranquila o esa desconexión que a veces solo se encuentra en los márgenes verdes de la ciudad.

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