El bizcocho de yogur más esponjoso y fácil del mundo

La receta de bizcocho de yogur es, sin duda, una de las más fáciles de hacer, no solo por lo sencillo de su elaboración sino porque prácticamente no tendrás ni que apuntarte la receta. Así de sencilla es.

El secreto de esta receta de bizcocho de yogur, que siempre sale bien y delicioso, no es otro que las medidas de los ingredientes principales: harina, azúcar y aceite. Y es muy fácil tomarlas. Para ello emplearemos uno de los recipientes que utilizaremos: el vaso del yogur. Lo demás, es cuestión de lógica. Tienes que medir los ingredientes con este vaso e ir incrementando su cantidad en orden alfabético.

Es decir, debes usar el vaso de yogur para poner una medida de aceite, dos medidas de azúcar y tres medidas de harina. Es fácil de recordar: aceite, azúcar y harina. Añade cada ingrediente por orden alfabético y, cada vez, súmale una medida más. Luego, añádele tres huevos y algo de levadura y ya tendrás el bizcocho de yogur listo para ser horneado. Sencillo, ¿no?

Un bocado insuperable para desayunar, merendar o simplemente con un café.

Ingredientes

• 1 yogur natural o de limón
• Aceite de girasol (una medida)
• Azúcar (dos medidas del vaso de yogur una vez vaciado)
• Harina de repostería (tres medidas del mismo vaso de yogur)
• 3 huevos
• Levadura química (medio sobre)
• Ralladura de limón (opcional)
• Mantequilla para engrasar el molde si es necesario

Elaboración

1. Precalentar el horno a 180º durante 10 minutos. Forrar un molde con papel de hornear o bien untarlo con mantequilla para evitar que se pegue al recipiente.
2. A continuación, vaciar el yogur en el recipiente donde se va a hacer la masa del bizcocho de yogur. Añadir 3 huevos, una medida de ese vaso de yogur de aceite de girasol, dos medidas de azúcar y bate bien hasta que todo quede perfectamente integrado.
3. Verter tres medidas de harina de repostería en el recipiente y medio sobre de levadura química (tipo Royal). Batir la mezcla conforme se va echando la harina para que no salgan grumos y la masa quede más aireada.
4. Una vez echada toda la harina y esta esté perfectamente integrada, se puede agregar a la masa la ralladura de un limón (solo la parte amarilla porque la blanca amarga).
5. Verter la masa en el molde de bizcocho y meterlo en el horno, con calor arriba y abajo, durante 35 minutos a 180 grados. Durante este tiempo, no se puede abrir la puerta del horno porque el bizcocho se bajará y ya será imposible que suba de nuevo.
6. Una vez pasado el tiempo, comprobar que el bizcocho de yogur está hecho pinchándole un palillo o una brocheta. Si sale seca, está hecho.
7. Apagar el horno y dejar entreabierta la puerta para que se vaya el calor.
8. Sacarlo pasados unos minutos. Si se puede, desmoldarlo y dejar que acabe de enfriarse sobre una rejilla.