CON ESTAS 'DELICATESSEN' DISFRUTARÁS EL DOBLE

Un pícnic de 5 estrellas para ver la lluvia de Perseidas

Te hacemos diez recomendaciones para meter en tu cesta y subir al monte a ver las 'lágrimas' de San Lorenzo

Un picnic para ver las Perseidas, un buen plan.

Un picnic para ver las Perseidas, un buen plan.

Javier Sánchez

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Los que dicen que las mejores cosas de la vida son gratis tienen razón (bueno, solo de vez en cuando). Un ejemplo es el espectáculo anual de las 

Perseidas o las 'lágrimas' de San Lorenzo: esa caída de meteoros que cada año convierte el cielo en todo un espectáculo para el que no hay que pagar entrada. Tan solo hay que subir a un lugar elevado, con la menor contaminación lumínica, y prepararse a 'cazar' con la vista estrellas fugaces. Los días 11 y 13 de agosto serán en los que este 'show' natural alcance su cénit este verano

. Para que disfrutes el doble, te recomendamos

algunas delicias que puedes incluir en tu cesta de picnic

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Frutos secos con pedigrí

Siempre hay que llevar algún 'snack' o abrebocas que haga más amena la espera mientras se hace completamente de noche. Las cajas de Mavis atraen todas las miradas aunque aquí, como en todo, lo mejor está en el interior. Frutos secos provenientes de Irán, primorosamente seleccionados y con el aliño justo. Una manera espectacular de comenzar nuestro picnic. Desde 7,50 euros la caja.

Una buena ensalada (líquida)

Un maridaje perfecto para una tarde-noche en el campo: un buen vaso de gazpacho. La bebida ideal para refrescarse mientras el sol va haciendo mutis por el horizonte. El de Majao, marca sevillana que trabaja de manera con ingredientes de proximidad, es de esos en los que se aprecia la calidad de cada uno de los elementos, del aceite al tomate, pasando por el toque de ajo y vinagre. Todos ellos están, además, equilibrados entre ellos para un resultado óptimo. Desde 3,20 el litro.

Unas sardinas con historia

La conservera gallega Paco Lafuente apuesta por hacer productos para los muy amantes de las latas de pescado. Un ejemplo perfecto son sus sardinas de añada, siguiendo la tendencia francesa de elaborar conservas de origen y pensadas para perdurar en el tiempo. Si no logramos ver ninguna estrella fugaz, al menos siempre nos quedará el consuelo de recordar aquella noche de verano como la de "aquellas sardinas tan morrocotudas...". Desde 5,50 euros la lata.

Un capricho leonés (y saludable)

Pura proteína y mucha menos grasa que cualquier embutido. Si hay alguien en el grupo que, además de querer ver las estrellas, busca cuidarse -el veranito es lo que tiene-, nunca está de más meter en la cesta un sobre o dos de cecina. La de El Abuelo Maragato, de Cecinas Nieto, con más de 18 meses de curación, no pasa factura en la báscula y encima se derrite en el paladar. ¿Quién da más? Desde 6,15 euros el sobre.

Una empanada 100% gallega

La empresa Forno de Lugo, nacida con vocación itinerante en las ferias y mercadillos gallegos, ha terminado abriendo tiendas en distintos puntos de la península y cuenta con una web capaz de poner en cualquier sitio sus deliciosas empanadas en tan solo 48 horas. De mejillones, de bonito, de bacalao con pasas... destacan tanto por la calidad de su relleno como por su sabrosa masa. Perfectas para un picnic: soportan bien el transporte, se pueden compartir fácilmente y están riquísimas. A partir de 14 euros.

La tortilla 'todoterreno'

Senén González es uno de esos cocineros cuyo nombre siempre irá irremediablemente unido al de un plato: su tortilla. Generoso, hizo una versión para supermercado que se regeneraba a la perfección con un ligero paso por la sartén. Ahora, comercializa una tortilla de patata en lata apta para aprendices de Mac Gyver, exploradores sin ganas de romperse la cabeza o (aquí venimos nosotros) cazadores de meteoros sobre fondo negro. Casi, casi, como la de cualquier madre. Precio: cpv.

El queso que cambia las normas

Acudir a la cita con las Perseidas es hacerlo a una cita con la naturaleza, al encuentro de nuestro yo menos urbanita. Por eso, un queso perfecto es Adiano, primero en nuestro país que cuenta con el certificado de bienestar animal. Un manchego que se comercializa semicurado, curado o viejo. Decidirse por uno u otro es tarea difícil: todos son completamente artesanos y resultan adictivos. Desde 27 euros el kilo.

Un lomo como ningún otro

Puesto que el espectáculo de las 'lágrimas' de San Lorenzo solo ocurre una vez al año, ¿para qué escatimar? Es el momento de incluir solo lo mejor de lo mejor en un picnic merecedor de estrella Michelin. El lomo doblado de Señorío de Montanera, además de ser 100% ibérico de bellota, es una receta recuperada de tiempos ancestrales. Su toque secreto es una fina capa de manteca de de cerdo (de nuevo ibérico, claro) y un aliño de ajo y sal que lo convierte en irresistible. Desde 87 euros la pieza entera.

Un bocado dulce de altura

Al final de todo gran picnic se esconde un gran postre. Descartados los helados, que nos abandonarían por el camino, creemos que lo mejor es subirse al monte con una buena tarta. La de manzana de Mallorca puede ser el colofón perfecto para el tramo final de esta aventura de 'astroturismo'. Las altas temperaturas ayudarán a atemperarla y convertirla en un postre agradecido y apropiado para este banquete campestre. Desde 22 euros.

¿Y para beber? Vino en lata

Por supuesto, ningún picnic está completo sin una buena carta líquida. Se puede acudir a esta cita con las estrellas cargado de botellas, claro, pero también es buena idea apostar por una tendencia en boga: la del vino en lata. La gama I'mperfect es muy veraniega: incluye un rosado ecológico, un espumoso brut y hasta un vino 0,0 para el que le toque conducir (y que seguro será el que acabe viendo más estrellas...). El pack de cuatro latas sale por 14 euros.