5 comidas ideales para el tupper que te llevas al trabajo

Elaborar comidas para llevarlas a la oficina puede convertirse en una tarea tediosa y que muchas veces acaba con nuestras ideas de menú diario. Con la llegada del verano, además, las ensaladas y platos fríos cobran protagonismo, algo que puede llegar a aburrir si se desconocen las mejores combinaciones.

Así, te proponemos cinco platos variados, sanos y perfectos para meter en la fiambrera.

1. Ensalada de arroz

Es uno de los platos perfectos para la temporada veraniega y muy sencillo de elaborar. Con arroz (más sano integral) y tus verduras favoritas puedes preparar un menú de mediodía perfecto. Los ingredientes más habituales: atún, guisantes, zanahoria, maíz, manzana... aunque siempre puedes innovar algo más añadiendo brócoli, brotes de soja, frutos rojos, tus especias favoritas... Tan solo tendrás que cocer el arroz con un poquito de ajo y sal (doble de agua que de arroz), dejar enfriar y añadir el resto de ingredientes. En el caso de que utilices brócoli podrás cocerlo junto al arroz. Como aderezo gusta mucho una cucharadita de mostaza con un poco de miel y aceite de oliva.

2. Menestra de verduras

Es una de las recetas más tradicionales de la comida española y perfecta para llevarla a la oficina y ser recalentada. Si no quieres calentarte la cabeza, incluso las venden ya preparadas para hervirlas o pasarlas por el microondas, y listo. Otra opción es aprovechar las sobras de unas verduras que te hayan quedado del día anterior. Solo tienes que saltearlas con un poco de panceta o pavo, jamón, pavo o pollo y directas al táper.

3. Ensalada de guisantes con tomatitos y huevo duro

Los guisantes son un alimento que se conserva perfecto y fresco aunque se haya cocinado el día anterior y es una idea perfecta para incorporar legumbres a la dieta si los garbanzos (también perfectos para hacer ensaladas) no te convencen. Puedes comprar los guisantes ya cocidos o adquirirlos frescos y cocerlos para después añadirle unos tomatitos cherry y huevo duro. Con el aliño que más te guste será un plato perfecto para los días laborales.

4. Tortilla de calabacín y cebolla

Cualquier receta con huevo te puede sacar de más de un apuro cuando no sabes qué comida llevarte al trabajo. En el caso de las tortillas, lo bueno que tienen es que las puedes tener hechas con mucha antelación y están sabrosas tanto frías como calientes. Esta de calabacín y cebolla acompañada con un poco de requesón o queso fresco, unos tomatitos y un puñado de brotes tiernos será un plato ideal de mediodía. Su elaboración: tan simple como sustituir las tradicionales patatas por el ligero calabacín.

5 . Wok de quinoa

La quinoa es una sanísima forma de sustituir la pasta o el arroz y de dar un cambio al menú diario. Se puede cocer en casa o se pueden comprar los vasitos en las que ya viene cocida y solo hace falta un golpe de calor. Acompañada por tiras de pavo o pollo a la plancha, espárragos trigueros, champiñones, cebolla y con el toque final de un huevo revuelto, sabe a gloria bendita. También se pueden incluir unas riquísimas gambas a la plancha.