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En cuatro barrios de la ciudad

Badalona sumará más de 300 pisos de protección oficial tras pactar una permuta con un gran propietario

De las 772 viviendas planeadas, 449 serían libres y 323 de protección oficial, de las que 120 serán cedidas al Ayuntamiento

Badalona impulsa sus dos primeras promociones de vivienda protegida en 20 años: irán destinadas a familias con, al menos, un hijo

Un operario en una obra de construcción de viviendas en el área de Barcelona

Un operario en una obra de construcción de viviendas en el área de Barcelona / Jordi Cotrina

Gerardo Santos

Gerardo Santos

Badalona
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El Pleno ordinario del Ayuntamiento de Badalona de este lunes ha desencallado uno de esos proyectos que llevaban en la mesa de los distintos gobiernos municipales desde hace años. Se trata del planeamiento urbanístico de la zona de Can Colomer, una masía en el barrio de Pomar de Dalt y catalogada como Bien Cultural de Interés Local desde 1984. En estos terrenos, situados por encima de la B-20 y a los pies de la Serralada de Marina, un gran propietario disponía del derecho de construcción de 79.000 metros cuadrados para levantar viviendas unifamiliares. Sin embargo, un pacto alcanzado entre el Ayuntamiento y el promotor, permite el traslado a otros puntos de la trama urbana de Badalona de buena parte de las aproximadamente 400 viviendas que, de no haberse logrado el acuerdo, el promotor podría haber edificado enteramente en la zona de Can Colomer.

Así, y con los votos favorables del PSC y de los concejales del gobierno municipal del PP (el resto de grupos políticos se ha abstenido), el Pleno ha dado luz verde al nuevo texto refundido de la modificación del Plan General Metropolitano (PGM) de la zona de Can Colomer, paso necesario para hacer realidad la limitación de la construcción de viviendas en este lugar. Así, el propietario de los terrenos podrá levantar 772 viviendas, de las cuales 130 se situarían en Can Colomer y el resto, en las cuatro zonas de los barrios de Pomar, Morera, Bufalà y Montigalà. El Ayuntamiento asegura que de las 772 viviendas planeadas, 449 serían libres y 323 serían pisos de protección oficial. De estos últimos, 120 serán cedidos al Ayuntamiento por el propietario. La mitad de los pisos de protección oficial serán de venta y la otra mitad estarán destinados al alquiler.

Protección del espacio

Tanto el alcalde de Badalona, Xavier Garcia Albiol, como el teniente de Alcaldía de Territori del gobierno municipal, Daniel Gracia, han coincidido en destacar que el primer objetivo de la medida radica en la protección de un paraje "con valor paisajístico", pero que también se busca "incrementar de manera sustancial el parque de vivienda de protección oficial de la ciudad". "Después de 20 años sin que el Ayuntamiento haya construido pisos públicos, hemos conseguido que el 41% por ciento de las viviendas que se construirán gracias a esta operación sean de protección oficial", ha declarado Albiol.

Gracia ha hecho hincapié en que, de resultas del acuerdo, el promotor acabará construyendo unas 370 viviendas más de las que estaban planeadas en el proyecto original. Asimismo, ha señalado que el gobierno municipal ha querido dar prioridad a esta cuestión, algo en lo que posteriormente ha ahondado el alcalde Albiol: "Esta situación llevaba demasiado tiempo enquistada, el propietario quiere de una vez por todas desarrollar su proyecto, y a la ciudad le permite disponer de un parque de vivienda pública importante".

Apoyo con reservas

Si bien el resto de partidos no se opuso a la propuesta, sí mostraron reticencias y desconfianza. Es el caso de la concejala del PSC, Teresa González, que advirtió que los socialistas valorarían "con detenimiento que las modificaciones introducidas en el texto refundido no alteren los compromisos sociales y ambientales del planeamiento original". Por su parte, el presidente de ERC, Àlex Montornès, ha señalado que el hecho que se apruebe esta medida merece celebración, aunque ha indicado que es necesario que los pisos de protección oficial que se construyan respondan a las necesidades sociales del municipio: "Nos tenemos que felicitar entre todos de que esto tire adelante —y ha matizado—, hay unas 200 familias en la mesa de emergencia y si se consigue tener vivienda pública, hay que pensar en cómo orientar estas viviendas".

Más dura con el gobierno municipal se ha mostrado la presidenta de Badalona en Comú Podem, Aïda Llauradó, quien ha criticado que el gobierno Albiol introdujese la aprobación de la medida por la vía de urgencia en el orden del día del Pleno municipal: "No entendemos esta prisa, a no ser que el promotor tenga mucha prisa por forrarse". Además, ha señalado que "las viviendas protegidas anunciadas no son ningún mérito" del gobierno municipal, sino "una obligación por parte de la Ley de Urbanismo y de las normativas posteriores". La representante de Guanyem y exalcaldesa de Badalona, Dolors Sabater, ha señalado que la edificabilidad en el sector de Can Colomer "nunca debería haber existido", y ha recordado que ya durante su mandato como alcaldesa aquel equipo de gobierno ya trabajó en la propuesta que ahora ha traído a votación el gobierno municipal actual.

Presentación de alegaciones

Como es habitual, el alcalde Albiol ha cerrado el debate, agradeciendo en este caso a los grupos del Pleno que ninguno haya votado en contra del dictamen: "Más allá de las diferencias políticas, compartimos la prioridad del problema de la falta de vivienda para nuestros ciudadanos —y ha concluido—. Estas promociones no resolverán el problema de manera definitiva, pero sí empiezan a dar luz y esperanza a personas que veían como el tema de la vivienda pública en la ciudad estaba parado".

Una vez aprobada inicialmente la modificación del PGM, se abre un período de consultas y alegaciones al que, a tenor de lo expuesto por la oposición, se acogerán los partidos con representación en el Pleno. Una vez se apruebe definitivamente, es la Generalitat quien dará luz verde, o no, al planteamiento urbanístico.

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