Saltar al contenido principalSaltar al pie de página

Compromiso con la soberanía

Barcelona, primera ciudad del mundo que abraza las tecnologías de código abierto promovidas por la ONU

A diferencia del modelo privado y opaco propugnado por Silicon Valley, la capital catalana se compromete a apostar por unas infraestructuras informáticas públicas accesibles a todo el mundo y de forma gratuita

El cuarto teniente de Alcaldía, Jordi Valls, firma los Principios de Código Abierto de Naciones Unidas.

El cuarto teniente de Alcaldía, Jordi Valls, firma los Principios de Código Abierto de Naciones Unidas. / Ajuntament de Barcelona

Carles Planas Bou

Carles Planas Bou

Barcelona
Por qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Barcelona refuerza su compromiso con los derechos digitales y con una gobernanza transparente de la tecnología. Y es que la capital catalana se ha convertido en la primera ciudad del mundo que suscribe públicamente los Principios de Código Abierto de las Naciones Unidas, un manifiesto que promueve la colaboración tecnológica frente a los monopolios que controlan las infraestructuras digitales, en manos de un reducido grupo de gigantes empresariales.

El movimiento en favor del código abierto aboga por un modelo de descentralización en el que el código fuente de los programas informáticos es accesible a todo el mundo y de forma gratuita. Acceder a las entrañas del software sin restricciones es crucial para poder auditarlo, modificarlo o redistribuirlo. A diferencia del modelo privado propugnado por Silicon Valley, cuyas aplicaciones son opacas y de pago, las de open source son consideradas un bien público compartido.

En esa dirección, Barcelona es la primera ciudad que abraza los principios trazados por la ONU y que se compromete a diseñar y adoptar servicios informáticos abiertos, inclusivos, interoperables, reutilizables y seguros. "En un contexto internacional donde la tecnología también está contribuyendo a la polarización del mundo, es necesario fomentar modelos tecnológicos y de políticas digitales que pongan a la gente y los derechos en el centro", reivindicó el cuarto teniente de Alcaldía, Jordi Valls, durante la firma de los principios, formalizada el jueves.

Barcelona se suma así a una lista de apoyos que incluye al Gobierno de Francia y a más de 60 organizaciones e iniciativas en defensa de los derechos digitales como Linux o Tor Project. Entre los programas informáticos de código abierto más conocido destacan los navegadores Firefox o Brave, el reproductor multimedia VLC o el paquete de ofimática alternativa LibreOffice.

"El código abierto no es sólo una cuestión tecnológica sino que es una cuestión de bien público y de que la tecnología y el conocimiento deben estar en manos de todos y no sólo de unos pocos", remarcó Amandeep Singh Gill, subsecretario de digitalización de la ONU.

Suscríbete para seguir leyendo