Centro comercial
Barcelona descarta comprar el Centre de la Vila y deja su futuro en manos de la propiedad
El gobierno de Collboni considera que el precio final de la operación es “demasiado elevado” e “inasumible”
Cierran los emblemáticos cines Yelmo Icaria de Barcelona tras más de 25 años en activo
Barcelona reserva cinco millones de euros para comprar el centro comercial de la Vila Olímpica

Interior del centro comercial El Centre de la Vila en el barrio de la Vila Olímpica con numerosas tiendas cerradas y pocos comercios abiertos. / Jordi Cotrina / EPC


Judith Cutrona
Judith CutronaPeriodista especializada en información local. Con la mirada puesta en el Ayuntamiento de Barcelona y en las calles de la ciudad. He estado siete años escribiendo noticias en Europa Press. Antes, colaboré con La Vanguardia y Público.
El Centre de la Vila es el centro comercial de referencia para los vecinos del barrio de la Vila Olímpica de Barcelona, que ven desde hace años como la oferta se reduce y la instalación se deteriora sin una solución en el horizonte. La mayoría de sus locales están cerrados y los residentes se están quedando sin un lugar para el ocio y las compras. El último gran golpe fue la pérdida de los cines Yelmo Icaria y ahora se suma la última decisión del Ayuntamiento de Barcelona de no comprar el equipamiento. De este modo, el consistorio deja su futuro en manos de la propiedad, la empresa estatal Mercasa, que estaría barajando diferentes opciones.
El Gobierno municipal ha mantenido conversaciones con la empresa para explorar la posibilidad de llegar a un acuerdo que permitiera la compra, pero finalmente no ha sido posible. “El precio final de la operación es demasiado elevado y este gobierno lo considera inasumible”. Estas fueron las palabras del teniente de alcalde de Economía, Jordi Valls, en la comisión de Economía del mes de mayo.
Aunque no precisó la cifra, fuentes municipales explican a EL PERIÓDICO que “se ha rebajado sustancialmente respecto a los 80 millones de euros”, que era el impacto que se llegó a estimar hace dos años. Al precio de la compra se le añade la inversión que tendría que hacer el consistorio para rehabilitar el equipamiento, que se inauguró en 1996 a raíz de los Juegos Olímpicos de 1992, cuando se construyó este barrio residencial con vistas privilegiadas al mar.

Interior del centro comercial de la Vila Olímpica, el Centre de la Vila, con muchas tiendas cerradas y pocos comercios abiertos. / Jordi Cotrina / EPC
“Conflictividad judicial”
Otra de las razones que también alegó Valls para justificar el descarte de la compra es la “conflictividad judicial en el ámbito del aparcamiento”. “Esto añade un componente más de inseguridad en la operación”, añadió, recordando que “todavía existen resoluciones judiciales”. No opinan lo mismo los vecinos, que aseguran que “judicialmente ya está terminado”. Ambos se refieren a la gestión irregular del aparcamiento del centro comercial, que desembocó en denuncias de clientes, también por amenazas y coacciones.
Por todo ello, el gobierno de Jaume Collboni descarta la compra a la que se comprometió en los presupuestos de 2023, en los que pactó con ERC reservar cinco millones de euros para adquirir el centro comercial con el objetivo de crear un equipamiento comercial municipal dentro de la red de Mercats Municipals. Ahora no deja otra opción que fiar el futuro del Centre de la Vila a Mercasa.
Reinversión o subasta
Según apuntó el propio Valls en la misma comisión, la empresa estatal está valorando “diferentes opciones” que pasan por un proceso de reinversión o uno de subasta “porque parece que puede haber algunos operadores comerciales que pueden estar interesados”. Aun así, el teniente de alcalde aseguró que el gobierno municipal haría seguimiento de la situación “hasta que finalmente Mercasa decida qué hacer”.

Interior del centro comercial El Centre de la Vila, en la foto la zona donde se ubicaban los cines Icaria, en el barrio de la Vila Olímpica con numerosas tiendas cerradas y pocos comercios abiertos. / Jordi Cotrina / EPC
La explicación de Valls fue en respuesta a una pregunta de los republicanos, qué pedían conocer el estado de las negociaciones sobre el futuro del equipamiento. Tras la respuesta del gobierno, el portavoz adjunto de ERC, Jordi Coronas, teme que el equipamiento pase en manos del Estado y que se produzca una subasta como la de los locales del frente marítimo.
“No descartamos que se haga una subasta como los locales del Port Olímpic”, lamenta Coronas en declaraciones a EL PERIÓDICO. Para el concejal, la empresa mercantil “intenta sacar el máximo rendimiento de un activo inmobiliario como este”. “Lo está dejando morir. Menos locales y aparcamientos bajo mínimos”, añade.
Más de 40 locales cerrados
Basta con pasearse por el centro comercial para darse cuenta de los pocos negocios que están abiertos. Según la última memoria anual de 2023 de Mercasa, a la que ha tenido acceso este diario, hay 84 locales en una superficie de 17.317 metros cuadrados, de los cuales 44 están alquilados y 40 están cerrados. A estas cifras, el presidente de la asociación de vecinos de la Vila Olímpica, Jordi Giró, añade el cierre de los cines Yelmo Icaria y ocho locales más.

Un hombre pasa por delante de dos locales cerrados en el Centre de la Vila. / Jordi Cotrina / EPC
Giró explica que el aspecto del centro comercial empezó a dar “una sensación de cierta dejadez” ya en 2010 y que se extendió hasta 2022, cuando fue “empeorando más la oferta, el servicio y la falta de dirección e inversiones”. Esta sensación y el desánimo de los comerciantes se ha acentuado en los últimos tres años, sobre todo con la marcha de los cines Yelmo.
Según Giró, algunos comerciantes empezaron a quejarse el verano pasado de que “la compañía no les estaba renovando los contratos porque se querían quedar con espacio para algo que tenían previsto”. A todo esto se suma “la desidia de no invertir ni un solo duro en mantenimiento”. “Hemos tenido las escaleras mecánicas un año sin funcionar”, lamenta Giró.
“¡Es el comercio del barrio!”
Los vecinos expresaron todas estas inquietudes en una carta dirigida a Mercasa. Allí también recordaron a la empresa que el centro comercial se creó para dar servicio comercial al barrio. “Había un compromiso desde los Juegos Olímpicos de dar comercio de proximidad a la Vila Olímpica y todo el mundo se escapa de la responsabilidad”, dice Giró a este diario, con la impresión de que la empresa está “especulando”. “¡Para nosotros es el comercio del barrio!”, añade.

Interior del centro comercial de la Vila Olímpica, el Centre de la Vila, con muchas tiendas cerradas y pocos comercios abiertos. / Jordi Cotrina / EPC
En su respuesta, a la que ha tenido acceso este diario, Mercasa afirmó que eran “muy conscientes de la necesidad de mejoras e inversiones en las instalaciones” para “conseguir que el Centre de la Vila vuelva a ser el lugar de referencia y de dinamización económica que merecen los vecinos de la zona”. En este contexto, aseguran que han estado “trabajando y en contacto continuo durante muchos meses” con el Ayuntamiento de Barcelona “ante el posible interés municipal”.
Ante “la necesidad de soluciones concretas”, aseguran que "Mercasa contempla en su plan estratégico la realización en este año 2025 de un estudio de viabilidad e inversiones para el centro que defina el camino a seguir y que garantice una gestión óptima a medio y largo plazo".
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