La casuística en municipios catalanes
El velo islámico en las ciudades: de Mollet a El Vendrell, así son las prohibiciones locales
La propuesta de Junts para vetar el burka en escuelas reabre una discusión que provocó un auge regulatorio entre 2010 y 2012
CONTEXTO | Junts quiere prohibir el burka en la calle y vetar el uso del velo en escuelas e institutos

Mujeres musulmanas con velo en una escuela / El Periódico


Jan Magarolas
Jan MagarolasPeriodista. He trabajado para medios locales en Tarragona como 'freelance': 'Diari de Tarragona', 'Diari Més' y, en el ámbito cultural, en las revistas 'Fet a Tarragona' y 'NW Revista de Reus'.


Clàudia Mas
Clàudia MasPeriodista
Periodista especializada en el Vallès. He trabajado en medios como VilaWeb, iSabadell, Diari de Sabadell y Bellaterra Diari. Codirigí el documental Els Residus del Mercuri (septiembre de 2023).


Gerardo Santos
Gerardo SantosPeriodista de información local. Durante diez años trabajé como redactor freelance para diversas publicaciones y para medios como los diarios Línia, centrado en el Barcelonès Nord.
El debate sobre el velo integral islámico, prácticamente dormido en la agenda pública catalana durante más de una década, ha vuelto a emerger con fuerza. La propuesta de Junts per Catalunya para vetar el uso del burka y el niqab en los centros escolares ha devuelto a la escena una cuestión que incendió los plenos municipales entre 2010 y 2012, en plena efervescencia del debate identitario y de convivencia. Durante ese ciclo, trece municipios catalanes aprobaron mociones o regulaciones restrictivas. Hoy, la mayoría de ellas han quedado en papel mojado.
Catalunya vivió entonces una cascada de pronunciamientos municipales que comenzó en Lleida, siguió por El Vendrell, y se extendió a otras ciudades como Barcelona, Reus, Tarragona, L’Hospitalet, Manresa, Santa Coloma, Figueres, Lloret de Mar o Cunit. Algunas, como Mollet del Vallès o El Vendrell, todavía mantienen vigente su prohibición, la primera de ellas de forma explícita. Otras, como Reus, vieron sus textos tumbados por los tribunales. Y en un tercer nivel se hallan los ejemplos de Barcelona, Badalona o L’Hospitalet, donde las restricciones tuvieron un recorrido parcial o se quedaron en el terreno de lo político, sin efectos jurídicos.
Mollet: veto explícito al velo integral
En el mapa normativo catalán, Mollet del Vallès sobresale como una de las pocas ciudades que todavía mantiene en vigor la prohibición explícita del velo integral en edificios de titularidad municipal. La medida se incorporó en noviembre de 2011 mediante una modificación de la ordenanza de civismo, tras ser aprobada por el pleno municipal en 2010.
El texto, recogido en el artículo 16 de la normativa, relativo a los derechos de la ciudadanía, es contundente: “Queda prohibido el uso del velo integral islámico, burka y niqab, así como de cualquier otra indumentaria o accesorio que cubra totalmente el rostro e impida la identificación y la comunicación visual de las personas en los edificios e instalaciones de titularidad municipal. Esta prohibición es aplicable a todas las personas, sean o no vecinas del término municipal.” Una redacción clara y directa que, a diferencia de la utilizada por Lleida —cuya ordenanza fue anulada por el Tribunal Supremo en 2013—, ha permitido que la norma de Mollet siga vigente más de una década después.
Preguntado por este diario, el Ayuntamiento de Sant Cugat del Vallès —única gran ciudad del entorno metropolitano gobernada por Junts, formación que ha planteado la reciente propuesta en el Parlament— ha evitado hacer declaraciones “más allá de lo ya expresado en sede parlamentaria”.
El Vendrell: prohibición sin mención explícita
El artículo 56 de la vigente Ordenanza de Civismo y Convivencia de El Vendrell especifica que "no se podrá acceder a las dependencias municipales con vestimenta o elementos que cubran total o parcialmente la cara de modo que no permitan la correcta identificación de la persona". Fuentes del consistorio remarcan que el texto no hace referencia a piezas concretas como el burka o el niqab, y que se pueden incluir elementos como pasamontañas o cascos de moto.
Si bien el texto no habla de prendas concretas, lo cierto es que el debate del pleno municipal del Vendrell en el que se aprobó, en junio de 2010, se recuerda como "muy tenso" debido a la discusión. En ese momento, CiU gobernaba con un pleno el que el partido de extrema derecha Plataforma per Catalunya (PxC) tenía una de las mayores representaciones del país. "Estamos a favor de prohibir el burka allá donde sea porque esto no forma parte de nuestra civilización occidental", apuntaba PxC, mientras que el PP buscaba "el modo de regular o poner filtros al empadronamiento para que sea todavía más lógica y más legal".
Estos dos partidos, además de CiU y ERC, apoyaron la moción, mientras que el PSC optó por abandonar la sesión y no votar "en señal de protesta": "Entendemos que es un debate artificioso sobre un fenómeno numéricamente insignificante en nuestro municipio; es un debate estéril que lo único que contribuirá será a crear problemas de convivencia".
Barcelona: recorrido parcial en equipamientos municipales
El Ayuntamiento de Barcelona confirma que aprobó el 9 de julio de 2010, bajo la alcaldía de Jordi Hereu, un decreto que prohibía el acceso a equipamientos municipales a personas ataviadas con accesorios o vestuario que les taparan la cara e impidieran su identificación. Por ejemplo, burka y niqab islámicos y cascos de moto integrales. La medida fue anunciada en junio del mismo año, tras las prohibiciones aprobadas en Lleida y El Vendrell y en un momento en el que la regulación o no del velo suscitaba un gran debate público.
La capital catalana había constatado antes que no tenía competencias para decidir sobre el uso de este elemento en la vía pública: un informe de los servicios jurídicos municipales, fechado a 10 de junio de 2010 y aún consultable en línea, advirtió a Hereu que solo podía implantar la restricción en equipamientos.
Tarragona y Reus: de la regulación "general" al frenazo judicial
Además de El Vendrell, Tarragona, Reus y Cunit son las otras ciudades de la demarcación tarraconense donde el pleno aprobó una regulación local al velo islámico, auque con resultados diferentes. En Tarragona, el gobierno del PSC llevó a votación, ese mismo junio de 2010, la prohibición del burka y el niqab en dependencias municipales, un texto que recibió el apoyo de PP y CiU, y la abstención de ERC. Fuentes del consistorio afirman que el objetivo de la moción era "poder identificar a las personas" y que la normativa se aplica actualmente "de forma general y sin menciones específicas a ningún tipo de vestimenta religiosa", como así lo indica la ley catalana de igualdad y no discriminación.
En Reus, en cambio, CiU y PP aprobaron una ordenanza más restrictiva, que prohibía llevar el velo islámico por la calle y en el transporte público. El TSJC anuló esa norma hasta en dos ocasiones: inicialmente en 2015 y nuevamente en 2017, cuando rechazó el recurso que había presentado el Ayuntamiento de Reus. Ahora, la ordenanza tampoco hace referencia a prenda alguna pero impide llevar "vestimentas y accesorios de cualquier tipo que impidan la identificación por medios visuales", y lo hace "por motivos de seguridad pública".
Badalona y L'Hospitalet: se quedó en el terreno político
El Ayuntamiento de Badalona señala que en la ciudad no existe en este momento ninguna regulación local relativa al uso del velo integral. Además, fuentes municipales aseguran que en Badalona "no tenemos problemas de personas con la cara tapada". En todo caso, las mismas fuentes aseguran que el criterio del gobierno municipal es que "se ha de poder reconocer la cara de la persona". Bajo este criterio, añaden, "ha de haber libertad para que cada persona vista como considere".
Se da el hecho que en octubre de 2022, a raíz del asesinato de la joven kurda Masha Amini por pasear por la calle con el velo "mal puesto", el Pleno de Badalona aprobó una declaración institucional en que se pedía a los estados miembros de la Unión Europea "que eviten legislar o desarrollar políticas sobre cualquier aspecto de la indumentaria de las mujeres, puesto que atenta contra la libertad de las mujeres a vestir y vivir como quieran allá donde sean". Dicha declaración, que también lamentaba "la criminalización, el señalamiento y la hipervigilancia que mujeres en todo el mundo, también en Catalunya, tienen que sufrir por el uso del velo", fue aprobada por unanimidad. Tanto Albiol como el ahora portavoz del PP en el Parlament (y entonces concejal popular en la oposición municipal), Juan Fernández, votaron a favor.
Al otro lado de Barcelona, L'Hospitalet de Llobregat se convirtió en la quinta ciudad catalana en aprobar una moción que prohibía el uso de los velos integrales en edificios y equipamientos municipales con los votos a favor del PSC —entonces liderado por la exalcaldesa Núria Marín—, CiU y PP. "Va contra los derechos de las mujeres y las hace invisibles", manifestó la entonces concejal de Servicios Sociales, Dolors Fernández, después de que los populares llevaran la propuesta al Pleno. Sin embargo, no hay constancia de que las actuaciones fel consistorio hospitalense fueran más allá. Fuentes municipales explican ahora que la propuesta no pasó de la moción y que la prohibición no está incluida en la ordenanza de civismo ni se llegó a aplicar.
Suscríbete para seguir leyendo
- Centenares de jóvenes cortan el tráfico en la plaza Catalunya de Barcelona por la presencia de un 'tiktoker' en un restaurante
- Una policía local de Barcelona captura una tercera serpiente en un almacén y la suelta en el campo
- Una inspección investigará el origen del brote de salmonela en un bar de Sant Adrià: 'He tenido que estar tumbada tres días
- Unas obras en el metro de Barcelona cortarán la L4 y la L11 durante todo julio y agosto
- La R3 de Rodalies iniciará en septiembre un corte de 16 meses que empezará por el tramo L'Hospitalet-La Garriga
- Cortadas las rondas de Litoral y Dalt de Barcelona por la pérdida de carga de un camión y un accidente
- Barcelona pagará un millón para reparar una calzada llena de baches pocos meses después de reformarse
- Crece la oferta de vivienda en el barrio del Gorg de Badalona: salen al mercado unos 130 pisos junto al futuro Canal