Barcelona desprecinta la pista descubierta de los salesianos de Rocafort únicamente para usos educativos

El Ayuntamiento de Barcelona desprecintará la pista cubierta que compartían el colegio Salesians Rocafort y el gimnasio Centre Esportiu Rocafort hasta su clausura el pasado julio por las quejas por ruido que presentaron algunos vecinos. Eso sí, el consistorio reabrirá el espacio únicamente para la actividad educativa y descarta que en la cancha, situada a escasos metros de algunos balcones interiores, se use para la “actividad deportiva de adultos”.

Así lo ha explicado el cuarto teniente de alcalde y concejal del Eixample, Jordi Valls, en el consejo plenario del distrito. “Hemos levantado el precinto para la actividad deportiva de menores y jóvenes de 9:00 h a 22:00 h”, ha explicado el edil. A su vez, ha matizado que el veto se mantiene para la actividad física de adultos. Ha justificado que hace falta “un criterio interpretativo más claro respecto si es un equipamiento deportivo o un equipamiento deportivo para la escuela”.

El concejal, eso sí, no ha descartado que el gimnasio pueda volver a usar el espacio más adelante. “Por lo que respecta a la actividad física [de adultos] de la pista, estamos todavía en un proceso interpretativo”, ha asegurado Valls. El edil tampoco ha dejado claro si la medida es ya efectiva o si entrará en funcionamiento más adelante.

La reapertura de la pista llega pocos meses después de que el Parlament de Catalunya aprobara la modificación de ley que eximía tanto a centros educativos como a equipamientos deportivos de respetar los límites de contaminación acústica durante el día. 

"Los niños la necesitan ya"

Para Narcís Frigola, director titular de la escuela, el anuncio de la reapertura es bueno, pero no puede retrasarse más. "Llevamos nueve meses con la pista cerrada y dos con la ley aprobada, no podemos esperar más", ha asegurado en declaraciones a este diario. "Los niños la necesitan ya, sobre todo ahora con este tiempo que hace", insiste Frigola.

La pista descubierta era el único espacio utilizado por el colegio que seguía precintado por el consistorio. La pista cubierta que se encuentra justo debajo ya reabrió en diciembre, cuando el ayuntamiento aseguró que la titularidad de la pista había “dado cumplimiento a todos los requerimientos efectuados desde el distrito”. Es decir, que el ruido de la pista no excedía los límites establecidos.

Además, tal como explicó EL PERIÓDICO hace unos días, el Centre Esportiu Rocafort solicitó en febrero una compensación de 60.831,97 euros por los supuestos perjuicios que causó el cierre de la pista cubierta. Algunos vecinos aseguraron a este diario que "desde que reabrió” no habían visto “mucha diferencia con los problemas” que ya tenían antes. "Muchas veces están hasta las 11 de la noche, con las luces encendidas, y siguen molestando", afirmaron.