Barcelona recortará el horario a todos los negocios del paseo del Born si persiste el ruido nocturno

Si el alboroto no decae y el incordio no remite, los locales de una de las zonas que concentra oferta noctámbula en Barcelona serán penalizados todos con el mismo castigo, sin distinción. El gobierno del alcalde Jaume Collboni prepara el terreno para prescribir su terapia contra el ruido en Ciutat Vella, empezando por el paseo del Born y sus inmediaciones, donde el ayuntamiento detecta “una densidad de quejas” a cuenta del bullicio “más elevada en comparación con el resto del distrito y el barrio” de la Ribera.  

Pendiente de poner paliativos desde que los cierres anticipados de bares, terrazas y súpers en ciertos puntos de Ciutat Vella se eliminaron por defectos de forma en noviembre de 2023, el consistorio planea ahora imponer un adelanto generalizado del horario para bajar la persiana a 19 establecimientos de hostelería, siete de alimentación y 35 módulos de terrazas en el paseo del Born y sus aledaños. No será inmediato y queda supeditado a cómo evolucione la molestia en los próximos meses. 

Todavía pendiente de empezar a aplicarse, el ejecutivo municipal concederá nueve meses desde que el protocolo entre en vigor para que los negocios se adapten y el nivel de ruido caiga por debajo de los 60 decibelios por la noche. Es el umbral preceptivo para proteger el sueño en el paseo del Born, pero un estudio municipal revela que se rebasa casi todas las noches. Ocurre sobre todo los fines de semana, por la elevada presencia de público atraído por bares y terrazas, “favoreciendo la clara superación de los límites acústicos establecidos entre las 23:00 y las 04:00 horas, incompatibles con el descanso de buena parte de la población del entorno”, expresa el informe. 

En caso de que los niveles de sonido y las denuncias no disminuyan transcurrido el plazo de margen, los negocios y las terrazas tendrán que despedir antes a los clientes. Ahora echan el cierre entre las 00:00 y las 03:00 horas.   

Medidas graduales

El reglamento para la Zona Acústica de Régimen Especial (ZARE) del paseo del Born prevé una implantación gradual, con restricciones que se intensificarán en caso de que las primeras etapas no resulten fructíferas. Tras un período para informar previo a la aprobación definitiva, se priorizarán las campañas de sensibilización para tratar de revertir las incomodidades que perturban a los vecinos, que el ayuntamiento achaca tanto a la gran afluencia y la juerga en la calle como al alto volumen de la música en los bares. 

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Si la receta más suave no basta, se instaurará lo que el plan califica como una “medida colectiva de reducción horaria de los establecimientos”. De finalizar la fase 1 del plan sin ceñirse a los límites de ruido permitidos, la fase 2 conllevará la “medida colectiva de reducción horaria de una hora de todas las actividades presentes en la zona que generan un polo de atracción en horario nocturno”, a lo que pueden unirse amonestaciones particulares a los infractores. El ayuntamiento identifica 27 establecimientos con incidencia acústica en el paseo del Born y su contorno más próximo. 

De seguir sin cuajar el antídoto pasados otros nueve meses, se activaría la fase 3, aún más taxativa. Incluye sanciones individuales para los incumplidores y “la aplicación de la medida colectiva de reducción horaria hasta dos horas”. Queda por ver si la misma cortapisa se expande a los demás lugares del distrito donde el ayuntamiento pretende actuar contra el ruido. Son el entorno de la plaza Reial, la calle Joaquín Costa, la Rambla y Arc del Teatre y la Rambla del Raval.

Malestar y denuncias

Las quejas por el bullicio se incrementaron un 22% en 2024 respecto a 2023 en el paseo del Born y sus cercanías, al crecer de 103 a 126 las presentadas a la Guardia Urbana. Más del 75% se atribuyen a personas que armaban jaleo en la calle, a fiestas improvisadas al aire libre y a ruido procedente de los establecimientos. Casi dos tercios de esas reclamaciones se debieron a molestias ocurridas por la noche. 

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Las quejas por el runrún de los locales se elevaron de 27 en 2023 a 33 en 2024. Además, el ayuntamiento apunta a un “aumento significativo” de las denuncias: los expedientes abiertos por la Guardia Urbana por botellones, venta ambulante ilegal y otros motivos que se asocian al ruido se dispararon de 233 en 2023 a 680 en 2024 en el paseo del Born, mientras que los originados por griterío, aparatos musicales, peleas y otras molestias pasaron de 41 a 47.

De alcanzarse las etapas más críticas del plan, el recorte horario se extenderá a negocios de hostelería, terrazas y comercios de alimentación del paseo y las cercanías. A la pena común de reducción de horas de actividad, el ayuntamiento suma la posibilidad de obligar a anticipar aún más el cierre a locales concretos que transgredan los preceptos para velar por el sueño de los residentes. En todo caso, afirma que "se prevé que la reducción propuesta del horario pueda llegar a un máximo de dos horas en total". También se contemplan multas económicas y, en los estadios más estrictos del protocolo, los permisos para colocar terrazas pueden suspenderse, revocarse o inhabilitarse al titular a disponer de licencia durante un año. 

Durante la fase dos, se amonestará a los locales de libre concurrencia que cometan una infracción de las normas contra el ruido que se califique de grave, con un “adelanto de la hora de cierre de los establecimientos durante un período máximo de seis meses” o una clausura de 15 a 30 días. Los negocios a los que se impute una falta muy grave bajarán la persiana antes de tiempo durante seis y 12 meses o se les precintará el local de 30 a 60 días. De llegarse a la fase tres, las faltas graves comportarán que el establecimiento cierre de 30 a 60 días. En caso de clasificarse como muy graves, la clausura puede extenderse de 60 a 90 días o que la licencia de actividad se anule.

En los niveles dos y tres del plan, el horario de los colmados también se estrechará. Estarán forzados a cerrar de 23:00 a 07:00 horas todos los días. Por lo general, los súpers de alimentación pueden permanecer abiertos de forma ininterrumpida, las tiendas de conveniencia tienen prohibido atender de 00:00 a 06:00 horas en el Born y los establecimientos polivalentes deben cerrar entre las 00:00 y las 07:00 horas.

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