Obra finalizada

La retirada de un gran techo de amianto en el Eixample se encamina al juzgado tras acumular denuncias

Residentes de una manzana de Consell de Cent aseguran que llevan dos meses sin abrir las ventanas por temor a las fibras tóxicas, por lo que reclaman nuevas mediciones de contaminación y una limpieza a fondo del patio

Catalunya ampliará el único depósito controlado disponible para amianto

El techo de amianto en el interior de manzana del Eixample, antes de empezar a retirarse.

El techo de amianto en el interior de manzana del Eixample, antes de empezar a retirarse. / MACARENA PÉREZ

Jordi Ribalaygue

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Barcelona
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Ya ha finalizado la retirada de las placas de amianto de un gran techo de 1.300 metros cuadrados que cubrían el interior de manzana delimitado por el paseo Sant Joan y las calles Aragó, Bailèn y Consell de Cent, que ha causado inquietud en la Dreta de l’Eixample en las últimas semanas. Las tareas para desmontar el fibrocemento -que contiene la sustancia cuyas fibras pueden ser insalubres y cancerígenas- terminó la semana pasada. A su vez, el Ayuntamiento de Barcelona aseguró que las mediciones efectuadas descartaban que existiera riesgo por presencia de partículas tóxicas en el ambiente. No obstante, los vecinos movilizados contra unas obras que han juzgado deficientes no se dan por satisfechos con los sondeos y estudian interponer una denuncia en el juzgado contra los trabajos, que temen que hayan puesto en riesgo su salud.

“No nos quedamos tranquilos, el mal ya está hecho”, expresa Bea Beza, vecina de la zona. Comenta que, aunque las labores ya han acabado, algunos vecinos siguen evitando asomarse al patio: “Hay gente que no abre las ventanas desde hace dos meses. Nuestra preocupación es que las fibras de amianto hayan quedado depositadas en elementos comunes, persianas y terrazas y que podamos inhalarlas. El nivel de incertidumbre es muy grande. Hay personas que están preguntando si pueden tender la ropa y otros que no la están colgando fuera por miedo”.

Residentes de la zona han reclamado que los promotores de las obras se hagan cargo de una limpieza en profundidad que certifique que no queda rastro de asbesto. Al igual que otros habitantes de la zona, Beza ha interpuesto varias denuncias ante Inspección de Trabajo contra las tareas de remodelación del edificio situado en el número 495 de Consell de Cent, donde se hallaba la redacción de EL PERIÓDICO hasta 2021 y que reabrirá como un 'coworking' de oficinas. Los avisos de los vecinos propiciaron que un inspector acudiera tres veces a examinar las obras y que personal del consistorio se personara en otras dos ocasiones.

Empieza la retirada de amianto denunciada por los vecinos en Consell de Cent

Empieza la retirada de amianto denunciada por los vecinos en Consell de Cent / VÍDEO: EL PERIÓDICO

En todo caso, las labores no se paralizaron, como instaron los denunciantes, la Asociación de Vecinos de la Dreta de l’Eixample y la Federación de Asociaciones Vecinales de Barcelona (FAVB). El inspector dio sus comprobraciones por finiquitadas pero, pese a los requerimientos, los residentes desconocen cuál es el veredicto y si se ha impuesto sanción. 

“No han hecho nada para protegernos, nadie ha querido mojarse”, lamenta Beza, que no comprende que no se ordenase detener las tareas a raíz de las quejas. Ahora, habitantes de esa manzana del Eixample valoran acudir al juzgado, por lo que se asesoran con las entidades vecinales y abogados del Col·lectiu Ronda. “Solo nos queda eso, una denuncia por otra vía, porque la vía administrativa no ha servido para nada”, observa la vecina. 

Denuncias e inquietud por la presencia de amianto en unas obras del Eixample

EL PERIÓDICO

Sin mascarillas

Beza -que es técnica de prevención y ha impartido formaciones para resguardarse del amianto- presentó una denuncia más al Departament de Treball el lunes pasado. La acompañó con fotografías y vídeos, con los que alertaba de que había operarios sobre la cubierta sin mascarilla ni ropa adecuada para evitar impregnarse con el material peligroso. Además, avisaba que se retiraba sin remojarse para no levantar polvo. 

“Ha sido flagrante la poca prioridad que se ha puesto en la seguridad: ha habido momentos en que picaban el techo, incluso con elementos mecánicos… Hemos tenido días mejores y peores, y momentos en que transitaban sin ‘epis’”, critica Beza. Una de las empresas implicadas en la reforma del inmueble, Certis, responde que, si se ha visto a empleados golpeando sobre el techo y sin protección, era porque “las placas estaban encastadas en el bordillo de la medianera y no era posible sacarlas enteras”

Una de las imágenes aportadas por los vecinos a una de las denuncias interpuestas a Inspección de Trabajo.

Una de las imágenes aportadas por los vecinos a una de las denuncias interpuestas a Inspección de Trabajo. / CEDIDA

“Para evitar cortar o romper la placa, se procedió a picar el bordillo y, de esta manera, poder sacar la placa entera como indica el procedimiento en el plan de trabajo”, justifica la constructora. “Para este tipo de trabajos, no es necesario que [los trabajadores] se pongan los ‘epis’ de amianto, pues en ningún momento van a retirar la placa u otro elemento con fibrocemento”, alega.

Sondeo independiente

Beza dice que están pendientes de ver los resultados detallados de los análisis a los que el concejal del Eixample, Jordi Valls, se refirió en la audiencia pública de la semana pasada. “No nos sentimos seguros, y menos si no se hace una verificación final y una operación de limpieza”, postula. En esa línea, solicita una “medición independiente y de calidad técnica que verifique que las fibras no están depositadas en elementos del patio y puedan volver a levantarse”. Habitantes de la zona han recabado un presupuesto para saber cuánto les costaría encargar un estudio.

La vecina piensa que era preciso que se hubiera instalado una carpa protectora para aislar a las viviendas del polvo de asbesto: “Pero no se ha hecho así. Uno de los grandes problemas viene de que se haya dado permiso de trabajo sin poner una protección global frente a la dispersión de fibras, teniendo en cuenta que hay viviendas a menos de 20 metros. Esa cubierta es cara, y es una cuestión de dinero y de tiempo. Ahora vendrá una oleada de desamiantados en todo el Eixample y esto crea un precedente”.

Tras el caso de Consell de Cent, la Asociación de Vecinos de la Dreta de l’Eixample ha recibido consultas por otras tres retiradas de techos de fibrocemento en los últimos días, incluida la del Taller Masriera, que el ayuntamiento acomete desde finales de marzo. La entidad está aconsejando a las comunidades y recuerda que los instrumentos legales son limitados a la espera de que la próxima ley para la erradicación del amianto en Catalunya entre en vigor, que permitirá imponer multas de 100 a 100.000 euros a los infractores. “Está claro que las empresas van a toda prisa antes de que se apruebe la nueva ley y haya un reglamento”, opina la asociación.