La prolongación de la L8 de Ferrocarrils de Espanya a Gràcia ya tiene todas las obras en marcha

Las máquinas empezaron a taladrar en enero de 2024, pero una obra de esta magnitud, con más de 400 millones de euros de inversión, tiene muchas derivadas y puntos de entrada. Prolongar la L8 de FGC desde Espanya hasta Gràcia a través del Hospital Clínic y Francesc Macià debería ser una realidad en 2030, o ese es el deseo y la promesa del actual Govern. Veremos cómo avanza la cosa, pero sí puede afirmarse que todos los puntos afectados e implicados a lo largo de estos cuatro kilómetros de trazado ya tienen las obras empezadas: punto de entrada de la tuneladora, salidas de emergencia y futuras estaciones.

La consellera de Territori, Sílvia Paneque, se ha calzado un peto amarillo este jueves para visitar la zona de obras asida a plaza de Espanya, en el lugar en el que en la primavera del año que viene, con algo de retraso (se esperaba para finales de 2025), se espera que la tuneladora empiece a perforar. Primero por Gran Via y luego por Urgell, para terminar con una ligera curva por Sant Gervasi hasta el cruce de Travessera de Gràcia con Gal·la Placídia.

La previsión es que este nuevo ramal de metro genere una demanda anual de 19 millones de viajes, lo que, según Territori, será el mayor retorno económico y social de la actual hoja de ruta del plan director de infraestructuras de la Generalitat. El proyecto incluye la reforma de la estación de Plaça Espanya y Gràcia, la creación de otras tres nuevas (Hospital Clínic, Francesc Macià y el intercambiador de Gràcia) y tres salidas de emergencia, además de los cuatro kilómetros de túnel.

Esperando al topo

En la plaza de Espanya son bien visibles los trabajos en todas las esquinas de esta inmensa rotonda viaria, incluida una máquina de esas largas y vistosas que se encargan de crear pantallas subterráneas. Entrada la Gran Via, donde los técnicos han puesto al día a Paneque, ya se distingue un gran agujero de 90x20 metros que por ahora tiene ocho metros de profundidad pero tiene que llegar a los 20. Será entonces, dentro de un año, cuando el topo mecánico venga por piezas, se monte y empiece a comerse la Barcelona suburbana.

Se trabaja también en el parque de Joan Miró, donde a través de un pequeño túnel que partirá de Gran Via llegarán las tierras que vaya escupiendo la tuneladora. Del mismo modo, hay movimiento en las salidas de emergencia: Consell de Cent-Urgell, Muntaner, entre Laforja y Marià Cubí y Gran Via con Llançà. Y en las futuras estaciones, que entre otras cosas, han obligado a cortar el tráfico en Comte d'Urgell durante un año.

Pero que estén todas las obras de infraestructura empezadas no significa que estén todos los proyectos en marcha. Más allá del túnel y la posterior instalación de vías y catenaria, queda pendiente la arquitectura de las estaciones. Con todo, Territori mantiene que todo estará terminado en 2030, cuando también está previsto que esté acabada la L9 del metro. Linda coincidencia.