De Glòries a Cristóbal de Moura

El Ayuntamiento de Barcelona alquila por 48 millones un edificio en el 22@ para reubicar a 500 empleados

El gobierno afirma que el traslado de servicios de urbanismo y vivienda al distrito tecnológico supone un ahorro del 32% en cuotas de arrendamiento

Barcelona identifica un centenar de ocupaciones y asentamientos pendientes de desalojo

Oficinas en el 22@, en Barcelona.

Oficinas en el 22@, en Barcelona. / ÁLVARO MONGE

Jordi Ribalaygue

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Barcelona
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El Ayuntamiento de Barcelona ha dado luz verde este miércoles al traslado de unos 500 trabajadores de los servicios municipales a oficinas del 22@, en el distrito de Sant Martí, donde abonará 48,9 millones de euros en cuotas de alquiler durante 15 años. La mudanza implica a equipos vinculados al área de urbanismo, vivienda y patrimonio del consistorio, afincados hasta ahora en el entorno de la plaza de Glòries y cuyo arrendamiento está finalizando. 

El teniente de alcalde de Economía, Jordi Valls, ha explicado que a la licitación se han presentado seis ofertas -con inmuebles situados en las calles Pere IV, Bilbao y Marruecos- y el contrato se ha adjudicado a la empresa Poniente Items, para arrendar espacios en el edificio situado en el número 121 de la calle Cristóbal de Moura. El concejal ha recordado que el concurso público, convocado en octubre pasado, preveía un gasto máximo de 68 millones de euros por el inmueble que se rastreaba, de unos 8.400 metros cuadrados. 

El importe que el consistorio abonará se halla por debajo de las previsiones. “La adjudicación supone un ahorro del 32% respecto al precio que el ayuntamiento pagaba anteriormente y se sitúa un 11% por debajo del precio de licitación”, ha esgrimido Valls. El edil ha resaltado las “condiciones positivas” del acuerdo. Además, ha valorado que haya servicios municipales que se asienten en el distrito tecnológico: “Reforzamos el 22@ con la presencia del ayuntamiento y sus propias oficinas de urbanismo”.

Junts, Barcelona en Comú y ERC se han alineado con el gobierno del PSC para votar a favor de adjudicar el nuevo contrato, mientras que PP y Vox se han abstenido. Pese a conceder su respaldo, los Comuns han advertido del “malestar” del personal que será reubicado.

El concejal Pau Gonzàlez ha alertado de que el cambio se fragua con “una cierta falta de explicación y de diálogo”, aunque ha recalcado que no lo cuestiona. El edil sí ha rogado al ejecutivo municipal un “esfuerzo suplementario” para “recoger las preocupaciones de las personas que se moverán y lo puedan hacer en las mejores condiciones”.