Convento de clausura
Las tres monjas clarisas que quedan en el monasterio de Pedralbes lo abandonarán en febrero
Han solicitado su traslado a las instalaciones de la orden en Vilobí d’Onyar, que confirma que las acogerá
Ayuntamiento y monasterio de Pedralbes firman un acuerdo por 75 años
Muere sor Montserrat Casas, popular abadesa del monasterio de Pedralbes de Barcelona
Collboni gira la tradición e insta a las clarisas de Pedralbes a que pidan que llueva

Collboni saluda a Montserrat Casas, abadesa del monasterio de Pedralbes, en febrero de 2024, tres meses antes que la religiosa falleciera. / Jordi Cotrina


Toni Sust
Toni SustPeriodista
Escribo sobre Barcelona desde 2016. Antes lo hice sobre Política social (2011-2016) y sobre Política catalana y española (2001-2011).
Profesor asociado de Periodismo en la UPF.
Las tres monjas que quedan en la comunidad de las clarisas en el monasterio de Pedralbes la abandonarán en unas semanas. Son sor Immaculada, sor Pilar y sor Isaura. Tienen 90, 73 y 66 años, y está previsto que las tres lo dejen durante el mes de febrero y se trasladen a otra instalación de la orden de Santa Clara, el monasterio de Vilobí d’Onyar. De esta manera, las monjas clarisas dejarán Pedralbes tras pasar allí casi 700 años. Ahora está por ver cuál es el futuro del monasterio barcelonés.
La institución religiosa fue fundada por Elisenda de Montcada, esposa de Jaume II de Aragón, en mayo de 1327 con la idea de que ella se instalara allí cuando se quedara viuda, como así hizo. Vivió en el monasterio, en un palacio anexo que mandó construir, desde 1328 –el rey falleció en noviembre de 1327– hasta su muerte, en 1364.
Falta de relevo
La situación viene determinada por la falta de efectivos, que es hija de la falta de vocaciones. No hay relevo, no hay monjas jóvenes que puedan acompañar a las que siguen al pie del cañón. Por eso, informan fuentes de las clarisas, las tres monjas pidieron hace tiempo su traslado a Vilobí. “No estaban en posición de poder mantener las obligaciones de la vida contemplativa”, explican esas fuentes, que rechazan entrar en qué futuro tiene el monasterio: "Primero las personas, después los inmuebles".
Pese a que todo apunta a que el traslado se producirá en febrero, en la orden de Santa Clara advierten de que no está cerrada la fecha exacta: “Vendrán cuando quieran”. Lo que sí precisan es que si las tres monjas abandonan Pedralbes es por voluntad propia y no por otra cosa.
Recogida de firmas
Una precisión que tiene sentido a la vista de que se ha abierto una recogida de firmas virtual en la plataforma Change.org, que sostiene que la salida de las religiosas es obligada. 'Evita el desalojo de las últimas monjas clarisas del Monasterio de Pedralbes', se titula la petición, que este martes sumaba cerca de 800 firmas.
El texto publicado en Change.org subraya que la labor de las monjas de Pedralbes supone “un ejemplo vivo de cómo las mujeres han contribuido a la preservación de la cultura a lo largo de los siglos”. “Su desalojo no solo representa una pérdida material, también la desaparición de un símbolo de la lucha y dedicación femenina. ¿De verdad vamos a dejar que desaparezcan?”, apunta.
Mínimo, cinco monjas
La orden de Santa Clara insiste en que las tres monjas han pedido dejar Pedralbes, en que se aceptó su petición y en que serán acogidas con toda calidez. Los motivos de esa decisión, añaden, son los lógicos vista la situación. Por una parte, son mujeres de edad avanzada. Por el otro, son pocas: según las mismas fuentes de las clarisas citadas anteriormente, es preceptivo que las comunidades de los monasterios cuenten por lo menos con cinco monjas.
Las clarisas tienen como obligación desarrollar una actividad económica de la que vivir, que sufrague sus gastos. En Vilobí, por ejemplo, se hacen hostias, es decir, sagradas formas para la Eucaristía. En Pedralbes, subrayan las fuentes de las clarisas, las tres monjas ya no desarrollaban ninguna actividad económica.
¿Y la recepción de Santa Eulàlia?
Cuando se fundó el monasterio, se estableció que el Consell de Cent debía protegerlo. Y la relación ha llegado hasta estos tiempos. El Ayuntamiento de Barcelona firmó en 2022 un acuerdo por el que el consistorio se comprometía a hacerse cargo, como ya hacía, de los gastos del equipamiento y acordó un presupuesto anual, que para ese año ascendía a 1,7 millones de euros. El pacto implica que la comunidad aporte los bienes artísticos del monasterio y cobre un alquiler del consistorio. El acuerdo tiene una vigencia de 75 años.
Los concejales del ayuntamiento, con el alcalde a la cabeza, suelen visitar a las clarisas en el monasterio el 12 de febrero, día de Santa Eulàlia, la patrona histórica de la ciudad. Es una deferencia que recuerda que la comunidad estaba en sus orígenes bajo la protección institucional del Consell de Cent barcelonés. El año pasado, Jaume Collboni encabezó la visita por primera vez como alcalde y fue recibido por la entonces abadesa, Montserrat Casas. Entonces, en febrero de 2024, había seis monjas en Pedralbes. Casas falleció en mayo pasado. Ahora está por ver si este año también hay visita municipal el 12 de febrero y si se cuando se hace todavía hay monjas establecidas en el monasterio.
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