Sin permiso

2.000 personas protagonizan una polémica Papanoelada Motera en Barcelona pese a las protestas vecinales

Vecinos del Eixample cortan la Gran Via para protestar contra la Papanoelada motera

EFE

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Unas dos mil motocicletas han recorrido este domingo el centro de Barcelona para celebrar la Papanoelada Motera 2024, una tradición en la que los conductores y pasajeros iban vestidos como este popular personaje navideño. Esta anunciada acción ha llevado a un grupo de vecinos del distrito del Eixample a cortar la Gran Vía para dificultar su paso y denunciar las molestias que ocasiona.

Esta marcha de motos, tradicional en los últimos años en la ciudad de Barcelona en fechas previas a la Navidad, se ha vuelto a celebrar en 2024 sin el correspondiente permiso del ayuntamiento ya que, según fuentes del consistorio, "el gobierno municipal rechaza una iniciativa que genera problemas de movilidad, así como afectaciones acústicas y de contaminación". Los moteros se han concentrado a las cinco de la tarde en la calle dels Tarongers, en Montjuic, y han partido desde la avenida Reina María Cristina hacia la Gran Via.

Protesta vecinal

En el cruce de esa avenida con la calle de Urgell, un grupo de unos cuarenta vecinos, según la Guardia Urbana, convocados por la asociación Eixample Respira, han cortado el tráfico en señal de protesta por la Papanoelada y para reclamar una mejora en la calidad del aire.

Ante esta convocatoria, los moteros han pedido en las redes sociales evitar el paso por ese punto y desviarse por calles adyacentes para posteriormente reanudar la marcha por el centro de la ciudad hasta la plaza de Catalunya, desde donde se han dirigido al monumento del Arc de Triomf, paseo de Isabel II, Colón y avenida Paral·lel para regresar de nuevo a la plaza de España. El recorrido, según fuentes de la Guardia Urbana, se ha cubierto sin incidentes.

El ayuntamiento ha indicado hoy, ante esta marcha de los moteros, que "celebrar la Navidad ha de ser compatible con el respeto al descanso y la vida del resto de vecinos", al tiempo que ha subrayado que "al Ayuntamiento no le consta ninguna comunicación de manifestación, concentración o solicitud de permiso de ocupación de la vía pública para esta actividad". Por ello, ha subrayado, "la Guardia Urbana, como hace siempre, levantará acta y la dirigirá a los Mossos para los efectos oportunos", y ha remarcado que los agentes multarían si se cometían infracciones de tráfico".

"Solo somos unos amigos"

Los moteros han replicado en el canal de las redes sociales desde el que ha convocado el acto que cortar una avenida principal de Barcelona, como han hecho los vecinos en la Gran Via, "solo provoca más caravana, tráfico, ruido y contaminación por otros puntos de la ciudad".

"Nosotros no cortamos ninguna calle para hacer la ruta de la Papanoelada, solo somos unos amigos celebrando la Navidad a nuestra manera -aseguran-. Estas cosas no pasarían si desde un principio el Ayuntamiento de Barcelona apoyara este evento que se ha hecho durante muchos años de manera legal. Capacitar un espacio alejado de los vecinos (por ejemplo Montjuic) no solo facilita el proceso, sino que ayuda a que este evento se realice de manera ordenada y sin incidentes".

Agregan, además, que muchos moteros se han quejado en ediciones anteriores de las multas recibidas, y les aconsejan: "Recordad la legalidad de lo que llevéis, ya sea escape, luces y adornos decorativos... Cada uno es libre de hacer lo que quiera, pero asumid las consecuencias".

Los vecinos que han cortado la Gran Via, por su parte, reclaman en un comunicado "unas fiestas sin humos, para evitar enfermedades respiratorias" y una avenida "segura y saludable". Recuerdan, en este sentido, que "es uno de los ejes más densamente habitados y contaminados de Barcelona, con más de 30.000 residentes y paso diario de más de 60.000 vehículos", lo que provoca que los vecinos no tengan un aire limpio y sufran ruido continuo.