Barcelona inicia las obras de climatización en 24 escuelas con la idea de que toda la primaria pública tenga aerotermia antes de 2030

"Esto no es como colocar un 'split'", ha bromeado el alcalde, en su visita a la escuela Llorers, en el corazón del Eixample, en la calle de Aragó. Jaume Collboni ha pasado revista este jueves a las obras de instalación del sistema de aerotermia en este centro educativo que mucho tiempo atrás fue un convento y que es uno de los primeros 24 equipamientos de enseñanza primaria que arrancarán el curso 24-25 con climatización. La idea es terminar la década, tras una inversión de 100 millones, con los 170 colegios de primaria intervenidos. Se irá actuando en función de la urgencia, y el centro de la ciudad, por la contaminación y los edificios altos, se lleva la palma. Todo, por cierto, financiado con la tasa turística.

El calor que ha venido de golpe ha sido el mejor contexto para explicar el proyecto. Imposible impartir o recibir clase bajo esta canícula. Y sí, es julio, pero cada vez es más habitual que las altas temperaturas se hagan carne en junio e incluso en mayo. No digamos ya septiembre. Las primeras 24, por ser prácticos, se han elegido por la instalación más o menos sencilla del sistema, pero para el próximo paquete de escuelas imperará la necesidad.

Toni Garcia, director de equipamientos educativos del Consorcio de Educación de Barcelona, ha detallado que el Eixample, tras realizar un estudio en base a siete criterios distintos, es el distritro con más urgencias. "Son barrios en los que coincide todo: edificios al lado de islas de calor, los colegios no pueden abrir las ventanas y los niveles de polución son muy altos". En cuanto a los más complicados, ha señalado este experto, sin duda los que tengan algún elemento patrimonial son los que más desafío generará a la hora de pasar cables y agujerear suelos. Por ahora, entre los 24, no hay ninguno de los colegios delicados. Sobre si se climatizará solo las aulas o todo el centro -incluidos los pasillos-, la decisión se tomará en función de los usos en cada caso.

Placas solares

La idea es que el 9 de septiembre, cuando abren las escuelas, la mayoría de estos 24 centros ya tengan el sistema instalado. Pero el ritmo de las obras durante el mes de agosto determinará el grado de ejecución. En cualquier caso, será en el último trimestre del año cuando todas estén ya finiquitadas, de manera que la calefacción para el invierno ya vendrá alimentada por las placas fotovoltaicas autosuficientes instaladas en las azoteas. En total, las 170 escuelas generarán un total de 30.000m² de paneles solares, aunque la superficie total, ha explicado García, es de 100.000 m². Es decir, que hay margen por si en el futuro se decide colocar más placas para alimentar la electricidad o las cocinas.

Collboni ha recordado que el consorcio es el encargado del mantenimiento de las escuelas de primaria de la capital catalana, pero ha invitado a seguir el mismo camino en los centros de secundaria, que dependen de la Generalitat. "Creo que es un proyecto que se irá replicando en otros ámbitos", ha pronosticado el alcalde, que ha aplaudido que pueda quedar atrás la época de echar mano de los ventiladores en los días de más calor.

La lista de los 24 colegios agraciados en este primer paquete es la siguiente:

• Ciutat Vella: Drassanes y Mediterrània.
• Eixample: Fructuós Gelabert, Encants, Els Llorers, Fort Pienc y Mallorca.
• Les Corts: Anglesola.
• Sarrià-Sant Gervasi: Vil·la Joana.
• Gràcia: Josep Maria de Segarra y L’Univers.
• Horta-Guinardó: La Ginesta.
• Sant Andreu: Ramón y Cajal, Can Fabra, Eulàlia Bota, Ignasi Iglésias y La Maquinista.
• Sant Martí: Fluvià, La Mar Bella, L’Arc de Sant Martí, Pere IV, Provençals, Sant Martí y La Llacuna del Poblenou.