La falta de espacio obliga a trasladar más de 100 perros fuera del centro de animales de Barcelona

El Centro de Acogida de Animales de Compañía de Barcelona (CAACB) carece de espacio para alojar a todas las mascotas que están a su cargo. Más de la mitad de los perros que se hallan bajo amparo de la perrera municipal han tenido que ser trasladados fuera de Barcelona, según los datos que el Ayuntamiento ha facilitado a EL PERIÓDICO. A su vez, trabajadores consultados avisan de un problema de “masificación” y discrepan sobre cómo se están gestionando las salidas de mascotas a otros recintos lejos de la capital. 

“Está pasando bastante en los últimos meses, porque estamos llenos”, atestigua una empleada, que prefiere guardar anonimato. “Si antes podíamos juntar dos en la misma jaula, ahora no puede ser porque falta personal -añade-. Hay perros que llevan cuatro días sin salir, es un riesgo muy alto y se podrían hacer daño entre ellos”.  

El complejo que depende del Ayuntamiento de Barcelona tiene 279 perros bajo su custodia, pero las instalaciones del CAACB solo alberga a 105 canes. Son más los que están fuera que dentro: 114 perros han sido llevados a otro servicio de acogida, que el consistorio tiene adjudicado al centro Help Guau de Argentona, a algo más de 30 kilómetros de la capital. 

El contrato vigente desde 2023 para alojar animales fuera de Barcelona vence en 2025, con opción de prorrogarse hasta 2027. El Ayuntamiento compromete hasta 582.978 euros para acoger mascotas lejos del equipamiento situado en la carretera de la Arrabassada. El pliego de cláusulas del contrato alega que “tiene una capacidad limitada de espacio de alojamiento para perros, que no es suficiente para dar respuesta a la cabaña total de animales de la que se debe encargarse”. 

El cálculo para la contratación estimó que se necesitaría dar cobijo a 65 perros en el Maresme, pero las plazas que se ocupan son casi el doble de las previstas. Aparte, otros 14 canes del CAACB se encuentran en residencias y hay 46 en casas de acogida. El gobierno municipal señala que los alojamientos fuera del espacio municipal se justifican por “razones de aforo del centro” al pie de Collserola y “otras situaciones puntuales”.

Alerta por “falta de recursos”

Profesionales del CAACB se han pronunciado en contra de los últimos traslados. Los ocho miembros del equipo de comportamiento canino del centro han firmado una declaración en la que discrepan con la directriz de desplazar a 13 perros del centro.

El Ayuntamiento de Barcelona admite “problemas” en el centro de acogida de animales

Sostienen que, a diferencia de lo que es habitual, no se les ha consultado para validar las decisiones, que tachan de “drásticas” y atribuyen a la “masificación” y la “falta de recursos” en el servicio municipal. “Cuando veíamos que el centro se llenaba y se podían adaptar a otro entorno, sin ser un peligro para nuestros compañeros, elegíamos los perros a trasladar. Ahora es la primera vez que no hacemos la lista”, explica un integrante del equipo de comportamiento canino. 

“Empezaron con el traslado de dos perros y nos negamos a prestar ayuda -prosigue-. Enviamos un informe explicando que era negativo para ambos, porque llevan muchos años en el CAACB. Ha costado tener confianza con ellos y el traslado repercute negativamente en su estado mental y, sobre todo, en su bienestar, porque no podrán ser paseados por voluntarios como ahora, al marcharse muy lejos, a Argentona. Allí a veces solo hay dos compañeros y tienen que ocuparse de 114 perros”. La huelga de una decena de empleados del CAACB el pasado invierno se cerró con el compromiso de contratar a paseadores, lo que aún no ha sucedido.  

El personal consultado afirma que, tras su queja, se ha detenido la reubicación de 11 mascotas fuera de Barcelona. Considera que el traslado conlleva “un riesgo muy elevado”, porque creen que daría al traste con la mejora que habían experimentado en el CAACB. Afirma que, en algunos casos, los canes pueden acabar en una residencia en que “no saldrían de la jaula”. “Sería un maltrato psicológico grande. Arruinaría todo el trabajo que hemos hecho para que estuvieran estables y bien. Allí no tendrían ningún contacto social”, afirman. 

Reproches por una eutanasia

A su vez, el equipo de comportamiento canino se declara desconcertado por la eutanasia practicada a un perro en febrero. “Pesaba cuatro kilos y le costaba tener confianza, pero con quien la tenía podía hacer de todo. Nos parece muy fuerte”, discuten. El consistorio contesta que la muerte asistida se efectúa de acuerdo a la Ley de Bienestar Animal, en el supuesto de enfermedades que comprometen la calidad de vida de las mascotas o por suponer un problema de seguridad.

La perrera de Barcelona, abierta desde 1972, aguarda un cierre que nunca acaba de llegar. Debe ser sustituida por un complejo más grande en terrenos de la sierra de Collserola, en Montcada i Reixac, con capacidad para 350 perros, entre otros animales. Sin embargo, un juzgado paralizó el inicio de la construcción por presunto riesgo irreversible para el parque natural, a raíz de una demanda del grupo ecologista Depana. Por su parte, el Ayuntamiento comenta que desarrolla un plan para “mejorar la adopción de los animales que se encuentran en el centro” de la Arrabassada, “a la vez que se optimizan el espacio y los recursos necesarios para la gestión”, apostilla.

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