La estación de Renfe de plaza de Catalunya, esta mañana.

La estación de Renfe de plaza de Catalunya, esta mañana. / ALBERT BERTRAN

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El Periódico

Una controvertida actuación de dos vigilantes de seguridad ha llevado a Renfe a pedir que sean apartados de servicio y expedientados. Son empleados de la empresa subcontractada Sureste, a la que la operadora ferroviaria pide explicaciones tras el incidente sucedido en plaza Catalunya

La intervención, grabada por usuarios con sus móviles y divulgada por el diario El Plural, consistió en inmovilizar por la fuerza y entre cuatro vigilantes a un joven en un andén. Al parecer tras una discusión decidieron reducirlo y enmanillarlo. El chico opuso resistencia y el personal de seguridad usó la violencia para mantenerlo en el suelo.

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También se puede observar en dicho vídeo cómo las personas que están presenciando la inmobilización empiezan a chillar y se enfrentan a los agentes: "No puedes tratarlo así", "lo estamos grabando", aseguran varias voces, en contra de la acción de los agentes de seguridad.

Renfe defiende que no puede tolerar "ninguna actitud ni verbal ni física que pueda atentar contra la integridad física de los viajeros, con independencia del hecho anterior que haya sucedido ". Al no ser empleados directos de la ferroviaria, le pide a la empresa intermediaria la apertura de un expediente informativo y que los vigilantes protagonistas sean" apartados inmediatamente del servicio".