Uno de los ultras que apalizó a un independentista Barcelona reconoce la agresión

Los acusados de dar una paliza a un manifestante independentista en octubre del 2019, después de concentrarse en la plaza de Artós de Barcelona en una manifestación ultra durante los días post-sentencia del 'procés', han negado formar parte de grupos neonazis, en el juicio que ha empezado este martes en la Ciudad de la Justicia.

Uno de ellos sí que ha reconocido que dio "tres patadas a los glúteos" de la víctima y le ha pedido perdón. Dos más han reconocido que estuvieron en la zona donde se produjo la agresión, pero han asegurado que se marcharon al ver que había mucha tensión.

La fiscalía pide cinco años de prisión para los acusados por un delito de lesiones con las agravantes de discriminación ideológica y abuso de superioridad y disfraz. La acusación popular, ejercida por el Ayuntamiento de Barcelona, pide también cinco años de prisión, y considera que se les debe sumar un delito de desordenes públicos, ya que la agresión se produjo en el recorrido realizado por los miembros de la manifestación ultra que desfilaban por las calles de la capital catalana al grito de "a por ellos", lanzando objetos y amenazando y atemorizando a las personas que encontraban por el camino.

El joven agredido fue atendido por la Oficina por la No Discriminación del ayuntamiento, que considera que ha habido un delito de odio.