Obras en la ciudad

Los cortes en la L4 de metro y la T4 del tranvía alteran este verano el acceso a las playas de Barcelona

El Barcelona Bus Turístic volverá a hacer rutas nocturnas este verano

La seguridad de las puertas del metro de Barcelona llega a juicio

TMB recalca que los trabajos son imperativos porque los raíles llegan al fin de su vida útil en ese tramo, que tiene el 67% de incidencias de la línea amarilla

Pasajeros en la estación de la Línea 4 de metro de Ciutadella/Vila Olímpica, en Barcelona.

Pasajeros en la estación de la Línea 4 de metro de Ciutadella/Vila Olímpica, en Barcelona. / FERRAN NADEU

Jordi Ribalaygue

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El tramo central de la Línea 4 del metro de Barcelona quedará fuera de servicio este verano, lo que afecta a algunas paradas que conectan con las playas. Los trenes no circularán entre las seis estaciones que distan entre Bogatell y Verdaguer a partir del 26 de junio y hasta el 31 de julio. A partir de agosto, los convoyes volverán a hacer parada en Ciutadella/Vila Olímpica y Barceloneta, pero seguirán sin efectuar el recorrido habitual entre Jaume I y Girona hasta el 25 de agosto.

A su vez, la línea T4 del tranvía -que une Sant Adrià con la Vila Olímpica- no funcionará entre el 26 de junio y el 31 de agosto. Aparte, la T5 y la T6 finalizarán el recorrido en La Farinera, en vez de hacerlo en Glòries.

La Autoritat del Transport Metropolità (ATM), Transports Metropolitans de Barcelona (TMB) y el Ayuntamiento de Barcelona han garantizado este jueves que el metro seguirá enlazando con la costa, si bien han admitido que los bañistas deberán dar más vuelta para llegar en transporte público a las playas de la ciudad. Han resaltado que la parada de Bogatell -a unos 950 metros en línea recta de la playa de Nova Icària- seguirá prestando servicio en julio, mientras que la de Ciutadella/Vila Olímpica y Barceloneta -las más cercanas a las playas del centro- reabrirán en agosto.

A su vez, han anunciado que la frecuencia habitual en verano -cuando el número de pasajeros en el suburbano decae un 15% en julio y un 35% en agosto- se reforzará entre un 6% y un 12% en las líneas 1, 2, 3 y 5. La intención es que absorban el pasaje procedente de la L4 y de la línea más frecuentada del Trambesòs. También se habilitarán servicios de buses lanzadera.

Vibraciones e incidencias

Los cortes en la red de transporte público de la capital se deben a las obras para sustituir la vía a lo largo de tres kilómetros de la L4. La renovación debe acabar con las vibraciones que se perciben en superficie en puntos del paseo de Gràcia, Consell de Cent y la ronda Sant Pere.

TMB recalca que los trabajos son imperativos, porque los raíles están llegando al fin de su vida útil en ese tramo, que concentra el 67% de las incidencias de la línea amarilla. Los trabajos cuestan 16. La empresa pública planifica reemplazar las vías de toda la L4 en los próximos años. Tiene pendiente resolver si la siguiente fase se abordará en 2024 o en 2025. 

En cuanto al tranvía, el proyecto para unir los dos circuitos inconexos de la red llevan este verano a que las las vías existentes y las nuevas confluyan en la plaza de Glòries. La parada de La Farinera se suprimirá y se construirá una nueva en Glòries, delante del museo Disseny Hub, que se estrenará en septiembre. 

TMB estima que unos 65.000 viajeros se verán afectados al día por la interrupción del servicio en el tronco central de la L4 en julio. En agosto, las obras dejarán a unos 45.000 pasajeros sin opción de circular entre cuatro paradas de la línea. La compañía sostiene que la incidencia fue mayor el verano pasado, cuando se cortó un tramo de la Línea 5 que incluyó la estación de la Sagrera, uno de los grandes intercambiadores de Barcelona. Por su parte, el operador del tranvía, TRAM, calcula que dejará de prestar 900.000 desplazamientos de la T4 entre junio y agosto.