Actuación policial polémica
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La fiesta del 49 aniversario del esplai Santa Maria del Pi del barrio Gòtic de Barcelona el pasado sábado acabó con dos personas detenidas y enfrentamientos entre miembros de la entidad y la Guardia Urbana. Según fuentes municipales, los hechos ocurrieron a las dos de la madrugada en la plaza de Josep Oriol, cuando los agentes se acercó al lugar donde se estaba dando un concierto que debía finalizar a la una y media y donde vecinos de la zona habían expresado malestar porque todavía no había terminado.
La versión de los Mossos d'Esquadra y del esplai protagonista difieren por completo. La fuente oficial sostiene que la actuación se produjo después de que los agentes fueran golpeados. Para el Esplai del Pi, ha sido un episodio de "violencia policial" y llama a una protesta el viernes. Fuentes municipales apuntan a este diario que el cuerpo ha abierto "informaciones reservadas" sobre el caso, un protocolo de investigación interna que abre en todos los casos en los que la policía ha ejercido un especial uso de la fuerza. Un vídeo publicado por el semanario La Directa muestra las cargas policiales.
La versión policial: agentes golpeados y defensa
A pesar de contactar con una de las responsables y pactar que éste acabaría después de una última canción, los que actuaban continuaron sobre el escenario, y cuando los agentes volvieron a requerir que finalizara, recibieron insultos y lanzamiento de latas. Según explican, intentaron interactuar con otra organizadora, pero una persona les empujó con intención de echarlos para evitar identificaciones. Los agentes quisieron acompañar a dos de las responsables a una zona de la plaza más tranquila para explicar que el motivo de las identificaciones era poder levantar acta de inspección del evento, pero justo en ese momento, afirman que uno de los organizadores golpeó a un agente por la espalda.
Una patrulla detuvo a la persona en cuestión, pero de inmediato fueron agredidos por otras personas por la espalda. Según las mismas fuentes, frente a los hechos los agentes actuaron haciendo uso de las defensas para dar seguridad al entorno. Concretamente, utilizando spray pimienta y en un caso concreto haciendo uso de la porra. Por su parte, sostienen que durante la intervención siguieron los lanzamientos de latas de cerveza a los agentes. Por todo ello, dos personas quedaron detenidas por atentado contra agentes de la autoridad, mientras que dos agentes recibieron asistencia por diferentes heridas leves y arañazos.
Según el esplai, amenazas y agresión policial
La versión de los organizadores es distinta a la de la policía ya que, de entrada, han asegurado a través de un comunicado difundido por redes sociales que al llegar al lugar del concierto ningún agente fue directamente a hablar con los responsables. Apuntan que fue al término de la fiesta -en la que también celebraban el otorgamiento de la medalla de honor del distrito- y mientras se recogía el material, cuando dos agentes se dirigieron a dos organizadoras para identificarlas con la amenaza de que si no lo hacían irían a comisaría. Sostienen además que la fiesta tenía permiso hasta las 2:00 de la madrugada.
La entidad añade que las compañeras empezaron a grabar con los móviles la situación y que, en ese momento, se produjo una primera agresión a una de las mediadoras al estirarla del brazo para llevarla donde allí había los coches. Una segunda persona, afirman, fue cogida por el cuello y apartada de forma violenta más allá del cordón policial. Además, añaden que a chico se le rompieron los dedos y la mano para intentar ayudar a una de las personas retenidas.
A partir de entonces, relatan, que se vivieron momentos de tensión, en los que la policía cargó contra la gente que había. Así, el esplai habla de puñetazos, tirones de pelo y gas pimienta a pocos metros de la cara. También cuestionan que una de las personas identificadas sufrió un ataque de ansiedad y no se la atendió de forma correcta. En este sentido, concluyen que dos personas quedaron detenidas y otras siete fueron identificadas. Por todo ello, el esplai -que pertenece al Movimiento de Esplais de la Fundació Pere Tarrés- ya ha convocado una protesta para este próximo viernes a las cinco y media de la tarde en la plaza Vicenç Martorell de Barcelona para "denunciar y confrontar la violencia recibida".
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